Beth (Serie Love 06)

Parque de atracciones

Steve

-¿De verdad que podrás aguantar hasta mañana?
-No me queda más remedio. Susan no aceptará verme ahora y lo
cierto es que le irá bien hablar con Beth, así que lo más lógico es
marcharme a casa y desear que llegue pronto mañana.
-¿Puedo preguntar que ponía en esa nota que le entregaste a Beth?
Sonreí, y mi amigo comprendió que no se lo diría.

Susan

-Sé que no estás de humor, que no quieres hablar, pero no puedo
marcharme sin saber que te pasa.
-Quiero contártelo Lizzie, pero lo único que sé es que Mike me besó y
yo no fui capaz. Me entraron ganas de salir corriendo y fue lo que
hice.
-¿Crees que es porque no es a él a quien deseabas besar?
-¿Te refieres a que es a Steve al único que deseo besar?
-¿Es así, no?
-Si.
-Cuando he venido, estaba aquí abajo y me ha dado esto para ti.- me
tiende una nota, la abro y tras leerla sonrío.
-¿Qué dice?- Beth estaba muerta de curiosidad.
Le devolví el trozo de papel para que la leyese mientras yo cogía mi
teléfono y marcaba el número de Steve.
La nota decía así.
NADA EN ESTE MUNDO ES COMPARABLE A LO IMPORTANTE
QUE ERES PARA MI. MAÑANA PASARÉ A BUSCARTE A LAS NUEVE.
YA TENGO GANAS DE QUE LLEGUE LA HORA.
Realmente era muy dulce. Ahora si que no tenía dudas de que yo era lo más importante para Steve.
-Hola.
-Hola. Muchas gracias por la nota.
-No tienes nada que agradecerme. Ha merecido la pena si te ha puesto
de mejor humor.
-Si. Yo también tengo ganas de que sea mañana.
-Entonces estaré ahí puntual para no perder ni un segundo.
-De acuerdo. Hasta mañana.
-Hasta mañana preciosa.

Llegó el día. A las nueve estaba puntualmente esperándome en el
portal.

Yo también fui puntual, y tras un saludo algo tímido, nos dirigimos a su destino.
-¿Dónde vas a llevarme?
-Es una sorpresa.
-Pero el ansia me puede. Cuéntamelo.
-Espera un poco. No seas impaciente.

Steve

Llegamos al parque de atracciones media hora después.
Susan se alegró muchísimo y a mi me alegró ver que sonreía.
-Te acordaste.- dijo volviéndose hacia mi con una gran sonrisa en los
labios.
-¿De que?- ¿Que estoy pasando por alto?
-¿Quieres decir que no recuerdas que cuando éramos pequeños me
moría de ganas de venir aquí contigo.- la sonrisa iba desapareciendo
poco a poco.
Lo pensé durante un rato y entonces recordé.
Recordé a una Susan de niña, y una de nuestras conversaciones durante la
hora del recreo.
Para aquel entonces, el parque era solo un plan de futuro.

Cuando me marché del la ciudad, empezaban a construirlo y parece ser que ella jamás vino.
Esperó todos estos años a venir conmigo.
-La verdad es que lo decidí de forma inconsciente porque tenía ganas
de venir y lo pensé muchas veces desde que regresé pero no le
encontraba sentido a venir si no era contigo.
-¿Yo te gusto, verdad Steve? ¿O prefieres verme como a la amiga que era?
La besé en los labios y al apartarme sonreí.
-Jamás besaría así a un amigo.
Ella me devolvió la sonrisa y asintió con la cabeza.
Bien. La cosa iba muy bien.

Cuando desperté esta mañana, temí que de algún modo, pudiese estropearlo.
Estos días, muy a mi pesar, nos hemos visto siempre con otras personas y aunque conocer a Beth, Audrey y a Tyler ha sido genial, yo solo necesitaba tiempo con ella.

Quiero que esto salga bien más que nada y darle el tiempo que necesite para que me acepte y vuelva a mirarme como cuando nos reencontramos.
Cuando vea eso de nuevo en sus ojos, sabré que está lista.
Tomo su mano en un impulso esperando que no me rechace y no lo hace.
Ahora mismo, solo quiero que se divierta.
Y después... Bueno, el tiempo dirá.