Capitulo 23

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AL FINAL DE LA HISTORIA SE CORREGIRAN TODAS LAS FALTAS ORTOGRÁFICAS.



En todos mis años de vida al unico hombre que he visto llorar es a Keys. Es extraño verlo llorar, despues de todo es el Alpha de la manada y anteriormente ya me habían dicho que los de ese rango solían ser muy orgullosos, con cambios de humor frecuentes y muy fuertes. Puede que entienda un poco su sufrimiento, no es para mas tratar de matar a tu progenitor, tratar mal a tu hermano, e incluso atacar a tu madre.

Despues de cumplir los quince años todo cambio, los que considere mi familia se apartaron de mi, la unica que para ese entonces me trataba con supuesto cariño era Mirelys, aunque algunas veces no pasaban desapercibidas sus sonrisas falsas; desde entonces siento cierta envidia por las familias que son unidas, siento envidia del amor que se dan mutuamente, porque es algo que nunca voy a tener. Cuando me entere que Cirs era mi madre le hice pensar que todo estaba bien, que no me afectaba en absoluto haber perdido tantos años de mi vida con personas equivocadas, que no me dolio saber que no peleo por mi siendo La Diosa De Las Brujas.

Desconozco la palabra amor, no se su significado, cuando crei conocerlo resulto ser una farsa; tal vez Keys es mi unico ejemplo de amor pero no es lo que yo necesitaba y necesito todavía, el es mi amigo, quizá un hermano pero a pesar de todo siempre se iba cuando mas le necesitaba no lo tome como una traición, en realidad nunca le dije que me visitara, que me diera regalos ni mucho menos que fuera mi amigo, el desde un principio insistió en estar conmigo, pero de igual forma agradezco que solo me visitara dos veces al año despues que termino el instituto, no quería que presenciara lo miserable que era mi vida, los golpes de Reik, los malos tratos de Sam y Andrés y las sonrisas forzadas de Mirelys.

La vida de Noel es tan fácil, ser amado por tantas personas, tener un padre que le admira, un hermano que le trata como si fuera lo mejor del mundo y una madre que por mas que su carácter y arrogancia le hagan ver mala le ama y se preocupa por el. Quiero una familia, que se preocupe por mi, que me ame, que me entienda, que sea unida... Siempre me han tachado como egoísta y lo admito, es lo que soy por pedir algo que nunca tendré y por envidiar la felicidad de los demás.

— ¿Por que lloras?

— Solo recordaba lo miserable que es mi vida.

— Antes lo era, ya no, me tienes a mi y con eso basta.- Me abrazo mas enterando su rostro en mi cuello, este aun estaba mojado por sus lágrimas.

Rei sin gracia. ¿Quien era el para decir eso? Lo unico que sabia de el era su nombre y que era un hombre lobo, no tenía derecho a decir que lo tenía a el, hace unas horas atrás estaba por abusar de ella y ni hablar del mal trato que le habia dado.

— ¿Quien eres tu? No te conozco, solo se tu nombre y lo que eres — Grite tratando de empujarlo — No tengo porque tenerte a ti porque no eres mi amigo — Nuevamente trate de empujarle — Puede que el dia que nos encontramos en la cafetería me comporte como una cualquiera contigo o que hace unas horas me gustaba lo que estabas haciendo pero no te da derecho decir que te tengo a ti.

No me saltaba, quería golpearlo por todo, por decir que lo tengo a el, por casi matar a Keys, por tratar mal a Cesar, por pelear con sus padres, por como me trató... por sentirme atraída a el.

— ¿Quieres saber por que tengo tanto derecho en ti? ¿Por que tienes que hacer lo que yo diga? — Beso mi cuello — O ¿Por que tienes que reaccionar a todas mis caricias? — Susurró metiendo su mano en mi camisa y acariciando mi espalda baja.

Maldita sean sus caricias, su voz, maldita sea yo por sentirme bien con esto. Trato de empujarlo pero es inútil, este me abraza mas, y no me importara pero al parecer cierta parte de su anatomía esta despertando y sumando que esta desnudo no me es agradable.

— Responde, Liz, ¿No te gustaría escuchar la respuesta de esas preguntas? — Susurró lamiendo mi cuello.

— Es obvio que eres un sádico masoquista — Contesté segura.

Noel se aparto un poco y me miro, en sus ojos ya no se encontraba seguridad, su cara ya no reflejaba la tranquilidad de hace un momento, su cara reflejaba tristeza absoluta.

— ¿Nunca me vas a creer lo que digo? — Sus ojos estaban cristalinos.

— ¿Como te voy a creer? No me has dicho nada, solo vienes diciendo cosas sin sentido de que tienes derecho en mi y nada mas. — Grite — Solo llegas quieres tocarme, decirme cosas repugnantes que solo me asustan ¿Donde esta el Noel que me trataba bien y con respeto?

Sus ojos reflejan dolor pero no me importa, ni siquiera me responde.

— ¡Responde! ¿Donde esta el Noel que yo conoci? ¿El que era tierno? — Ya no gritaba, ahora solo susurraba tratando de contener las lágrimas.

— Dime... Porque lo unico que estas logrando es asustarme.

Lágrimas salen de sus ojos, su rostro refleja dolor pero mas que todo tristeza. Le veo ponerse de rodillas y abrazar mi cintura, no pense que mis palabras fueran tan duras pero es la vedad, llora como un niño, puedo escuchar su llanto.

— Perdoname, Liz, yo no querías asustarte — Me abrazo con mas fuerza — Yo no soy asi, es el... También es la época la que hace que se descontrole y me vuelva asi.

¿De quien hablaba? ¿Que tiene que ver la época?

— N-no entiendo de que hablas Noel.

— No lo entenderás, ¿Solo quiero que me digas si quieres las respuesta de las preguntas que te hice?

— Si. Quiero saber la respuesta — Dije, la verdad quiero saber por que me siento asi.

— Porque eres Mia. — Y despues de eso lo unico que pude sentir fue sus labios sobre los mios.





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