- ¿Y, como te va la vida Sally? -dijo Harry el por decirlo de alguna manera el jefe del grupo de apoyo.
- Por ahora todo va bien-dije-. La vida sigue siendo una hija de puta, pero a pesar de eso todo va bien.
Así era me encontraba en un grupo de apoyo pues mi madre hace unos meses se le había ocurrido la gran idea de que necesitaba conocer a personas que pasaron por algo igual o parecido a lo mío y aunque la idea no me hacia ni pizca de gracia no tuve más remedio que ir.
Los tres años siguientes de mi recuperación habían sido normales, mi vida era por así decirlo como la de un adolescente normal y procuraba recordarme a misma que lo que no me había matado me había hecho más hija de puta y efectivamente así era, ahora era una chica fría, cortante, desconfiada y dura con las personas, podía decir que la abundancia de decepciones también me había ayudado en ese procesó, pero en fin lo importante era que estaba viva y ahora más que nunca, tenía 18 años eso era para la mayoria de adolescentes la cumbre de la vida, los 18 representaban muchas cosas, eras más libre, rozabas los 20, pero soñabas con los 22, tenía 18 y una vida por delante, una vida llena de sorpresas.
El instituto me estresaba y vaya que lo hacia así que aquel lunes en mi hora libre había decidido ir fumar mi dosis de realidad.
Después de matemáticas tenía mi hora libre antes del almuerzo en donde me encontraría con todas las chicas, por lo que decidí usar aquella hora libre en algo productivo, me dirigí a mi taquilla, cogí mi bolso y el libro que estaba leyendo para literatura "El retrato de Dorian Gray".
Ya en la azotea revise en mi bolso en busca de la cajetilla de tabaco -para mi desgracia solo quedaban dos pitillos y estábamos a pleno miércoles- me fume los dos.
- Genial Sally, genial -me dije a mi misma en voz alta.
- Sabía que eras rara, pero no tanto como para hablar sola -dijo una voz masculina que venía desde atrás, me gire para verle la cara-. Un placer hablar contigo Sally Miller.
Enarque una ceja.
- ¿Y,tu eres? -pregunte.
- Soy Josh, Josh Harries, llevo 3 años en la misma clase que tu para tu información -dijo este cogiéndome el pitillo y llevándoselo a la boca.
- Ya se quien eres -dije- Tú eres un chuloboy más -esta vez fui yo que le quitó el pitillo- Siempre estas con tus amigos, los otros chuloboys del instituto, así que se perfectamente quien eres.
- Es genial que sepas tanto sobre mi, acaso me investigas Sally -no puede evitar una gran carcajada.
- Querido Joshua, eso es lo que quisieras -le puse el pitillo en la boca antes de volver al interior del edifico-. Por cierto dile a tu quería amigo Cody que fue un placer verlo el otro día.
Salí de allí y me dirigí a la cafetería donde se encontraba todo el instituto ya que el timbre había sonado. Durante la comida pude notar como Josh no me sacaba la mirada de encima y claro que eso no se le pasaría a Cloe por alto.
- Ya estas haciendo ojitos con Cody -la fulmine con la mirada, me llevaba bien con Cody en realidad todas nos llevábamos bien con él, era un buen chico.
- No es Cody -dijo Grace a lo que le di toda mi atención y le hice un jesto con la mano para que no siguiera-. Es Josh, Josh Harries, lo se por que hace varias semanas que me pregunta por Sally. Creo que le gustas. Reí ante su comentario- ¿Qué?
- Yo gustarle a Josh, Grace cariño llevo 3 años en clase de literatura con él y nunca, repito nunca le he hecho ni el más mínimo caso.
- Verás Sally -dijo Cloe- No hace falta ser cercano a una persona para que esa persona te quería -dijo, ella era la "gurú" del amor ya que estaba saliendo con Jake y pues era la única que tenía una relación dentro del grupo.
- No creo en el amor, sólo es un invento al igual que San Valentín. Todo una mierda -dije levantandome para largarme a casa.
- Eso dices ahora mi amor -dijo Cloe, yo por mi parte mientras me apartaba de la mesa le fui enseñando mi precioso dedo del medio para demostrarle mi amor por ella.
Cuando doble la esquina puede ver a Josh apoyado en mi taquilla.
- ¿Quién es el acosador ahora? -dije a lo que medio sonrió-. Es cierto me debes un pitillo chato.
- Si quieres puedo devolvértelo con una condición -enarque una ceja.
- ¿Cuál es esa condición? -pregunte.
- Vendrás conmigo a la fiesta de Halloween de esta noche -sabía que aquello tenía truco.
- Dime Josh, ¿por qué yo?, tienes a muchas chicas detrás de ti -pregunte y el se acerco a mi.
- Eres diferente Sally, desde el primer día en que te vi, me gustas así de simple -se acerco más a mi-. Me gustas y no sólo como amiga.
ESTÁS LEYENDO
Broken Inside (Editando)
Ficțiune adolescențiTan fría como Siberia. Tan en ruinas como Roma. Sally esta rota, rota por dentro, muriendo por de dentro. Ella había decidido olvidar ese pasado que la atormentaba. Ella había decidido pasar de página. Un nuevo capítulo. Pero, si todo término...