*EL PERFUME QUE BAJO DEL CIELO*.

*EL PERFUME DE LA JUSTICIA*

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El perfume de la justicia y un joven perfumado LLAMADO DANIEL.

«Ir tras la justicia conduce a la vida, pero ir tras la maldad conduce a la muerte» Pr 11,19

El hombre sediento de Cristo, el hombre de Dios, busca con urgencia una fragancia que se siente cuando se tiene pero más se siente su ausencia en nuestras sociedades, el mundo de hoy se caracteriza por enfocarse en construir muros, en construir ciudades enteras, pero no piensa en construir justicia, estamos sedientos de este aroma tan particular

¿Qué es la justicia? ¿A qué huele?

Es un principio moral y cristiano que inclina a obrar y juzgar respetando la verdad y dando a cada uno lo que le corresponde, manteniendo los valores de respeto, equidad, igualdad y libertad.

Podemos conocer su definición, pero ¿conocemos su significado en medio del diario vivir de un pueblo donde escasea todo, sobre todo escasea la fe y la esperanza?

Dios es justo, ¿por qué lo dudamos? ¿Será porque le echamos la culpa por lo que el mismo hombre ha hecho y de lo que estamos viendo y sufriendo sus consecuencias? No ha sido la mano de Dios la injusta, ha sido la mano del hombre que vino a quebrar el equilibrio original.

De seguro sí sabemos a qué huele la injusticia, la principal labor del cristiano es buscar esa justicia, y hacer algo particular, no podemos seguir indiferentes, y es una actitud que se debe tornar un hábito en nuestras vidas, un estilo de vida, que todo lo que proclamemos, anunciemos, denunciemos y hagamos sea en pro de lograr un entorno un poco más justo cada día, pero no buscando la justicia personal, sino la justicia de Dios.

“Dichoso el justo, porque le irá bien y gozará del fruto de e sus acciones “ Is 3,10

¿Dónde y cómo buscarla? No podemos lanzarnos a buscar a ciegas, ni quedarnos sólo en la intención, estamos llamados a trabajar arduamente en la búsqueda de la justicia en nuestro entorno de manera práctica, porque no es un sueño imposible, y el aporte que cada uno pueda hacer es valioso y cuenta.

«¡Hagan justicia al débil y al huérfano! ¡Hagan justicia al pobre y al necesitado!» Sal 82,3

Como cristiano puedo buscar la justicia social siguiendo las pautas que nos ha dado el Señor, como cristianos estamos llamados a trabajar por lograr equidad en nuestra comunidad, empezando por tratar a todos por igual, y siendo amigo, hermano, cercano de todos; nuestro aporte, colaboración, trabajo debe llevar a un mundo más humano, más justo, luchando por la paz, la libertad y la igualdad, como hijos de Dios tenemos los mismos derechos y deberes, y debemos hacer algo por los que están más desprotegidos, por los menos beneficiados, por los despreciados y apartados de la sociedad, por los niños, por los ancianos, cada mano que tienda sumará por la justicia.

Si ayudo a un hermano en una necesidad, aunque sea en lo poco, estoy aportando mi grano de arena, y muchos granos de arena puedo aportar, que no me canse nunca de obrar en pro de la justicia, porque Dios que es justo, ve mis acciones, ve mis intenciones, y la justicia divina no tarda en hacerse sentir sobre los hombres.

«BIENAVENTURADOS LOS PERSEGUIDOS POR CAUSA DE LA JUSTICIA, PORQUE DE ELLOS ES EL REINO DE LOS CIELOS»  Mt 5,10

DANIEL Y SU PERFUME DE JUSTICIA.

Daniel 6:
16 Entonces el rey mandó, y trajeron a Daniel, y le echaron en el foso de los leones. Y hablando el rey dijo a Daniel: El Dios tuyo, a quien tú continuamente sirves, Él te librará.
17 Y fue traída una piedra, y puesta sobre la puerta del foso, la cual selló el rey con su anillo, y con el anillo de sus príncipes, para que el acuerdo acerca de Daniel no se cambiase.
18 Se fue luego el rey a su palacio, y pasó la noche en ayuno; ni instrumentos de música fueron traídos delante de él, y se le fue el sueño.
19 Entonces el rey se levantó muy de mañana, y fue aprisa al foso de los leones:
20 y llegándose cerca del foso llamó a voces a Daniel con voz triste. Y el rey habló a Daniel y le dijo: Daniel, siervo del Dios viviente, el Dios tuyo, a quien tú continuamente sirves ¿te ha podido librar de los leones?
21 Entonces habló Daniel con el rey: Oh rey, para siempre vive.
22 El Dios mío envió su ángel, el cual cerró la boca de los leones, para que no me hiciesen mal: porque delante de Él fui hallado inocente; y aun delante de ti, oh rey, yo no he hecho ningún mal.

Al hablar de perfume tenemos que separarlo o dividirlo, ya que hay perfume malo y perfume; el perfume malo es aquel que nosotros no queremos olerlo, ni tampoco queremos estar cerca; ahora bien el perfume bueno es agradable, es aquel que nosotros queremos estar cerca y también olerlo.

En la vida del cristiano solamente hay dos olores, hay dos perfumes; uno de santidad y otro de pecado, el cristiano verdadero tiene un olor a santidad; ahora el cristiano carnal tiene un olor a pecado.

Recientemente alguien fue a predicar a mi iglesia y él decía que estaba en Orlando y que estaba vestido de pantalón corto, una franela y uno tenis y que estaba sentado en cierto lugar y que de repente alguien se le acerco y le pregunto que si él era predicador; el predicador se sorprendió en gran manera, ya que su manera de vestir no decía nada. Pero tenía PERFUME QUE ERA SU ACTITUD.

Saben  DANIEL, tenia ,  algo que lo identificaba y ese algo se llama santidad, se llama el perfume del espíritu; algo que nosotros los cristianos por mas que queramos no podemos ocultar, la santidad.

Cuando echaron a Daniel en el foso, los leones no vieron a hierba, tampoco vieron un pieza de carne; los leones vieron y olieron algo diferente, ese algo diferente se llama santidad, se llama el perfume del Espíritu.

Que con esta reflexión nosotros podamos poner en orden nuestra vida , vamos a revisarnos y a mirar que tipo de olor o perfume nosotros estamos emanando, si es un perfume de pecado vamos a arrepentirnos; ahora bien si es un perbfume de santidad, pues continuemos adelante.