Lo que nunca me imaginé.

Capitulo19- Les hablaba de mi

Habían pasado dos días desde que había despertado mi amiga, en esos dos días había estrechado más la relación con mi padre en incluso se llevaba mejor con Fran, tenían más confianza. Solo quedaban tres días para el campamento y yo estaba muy ilusionada de poder ir con mi amiga y con mi ojazos! Cada día que pasaba con él me volvía más loca. Era por la tarde y después de una mañana de clases pesadas y gimnasia estaba rebentada, pero tenía que ir a ver a Yuls ya que le iban a dar el alta según como la viese el médico. Después de una siesta fui a la ducha que me despejó bastante. Salí y me vestí con unos vaqueros unos botines marrones y un jersey del mismo tono, me hice una cola alta y me maquillé un poco. Ya iba a salir y al abrir la puerta de la calle, me encontré a mi amiga mirándome con una sonrisa, me quedé boquiabierta. Enseguida, me abracé a ella

-Tia, pero que haces aquí?? No tenías que estar en el Hospital?- no podía reprimir mi alegría y ella no paraba de reirse

-Me han dado esta mañana el alta, he ido a casa a ducharme y eso y he querido darte una sorpresa y bueno aquí estoy- antes de que terminara de hablar le tiré del brazo haciendola pasar al salón y cerrando la puerta detras de mi

-Aun no me puedo creer que estes aquí conmigo- me senté a su lado en el sofá abrazándola con fuerza- No sabes lo que te he echado de menos.

-Bel, deja de ser tan cursi por favor, eso de tener novio te está afectando eh!!- me sonrojé al escuchar la palabra novio-  Ui si, definitivamente te ha afectado ese ojazos!

Le di un cojinazo en la cara sin esperarselo y se quedó bastante sorprendida, yo no aguanté y estallé en mil carcajadas y antes de darme cuenta sentí un cojinazo en mi cara y escuché la risa de mi amiga, nos miramos y estallamos en carcajadas. Íbamos a pasar la tarde juntas y decidimos ir al centro comercial, como en los viejos tiempos

Mientras mirabamos todas y cada una de las tiendas, hablabamos de Alex, le conté lo de mi padre, del campamento. Me compré un par de pijamas nuevos, un poco provocativos, unos cuantos vestidos para las noches que salgamos  y unas cuantas cosas más. Mi amiga iba cargada con muchas bolsas más. Pareciamos Julia Roberts en Pretty Woman. Fuimos a una cafetería a tomarnos algo para reponer fuerzas. Era pequeña, con estilo de los 80 las camareras iban en patines y vestían uniformes rosas y blancos. Mirándo al rededor de la cafetería me fijé en que un chico rubio no dejaba de mirar a Yuls. Sin embargo ella estaba distraida en su móvil, le di un par de golpecitos en la mano y ella alzó la vista hacia mi.

-Hay un chico rubio, muy guapo que no deja de mirarte, está en la mesa del centro, pero mira disimuladamente!!- Ni disimuladamente ni nada, mi amiga se giró hacia el chico y le sonrió, una sonrisa de amabilidad pero no como las que ella les daba a los chicos guapos

-Y eso que te había dicho disimuladamente cabrona!!- le dijé en tono bajito pero fuerte, ella se rió y en eso vino la camarera, con sus patines de cuatro ruedas

-Hola chicas, ya saben que tomar?- sacó de su bolsillo del uniforme una libretita y un boli rosa con una pluma al final

-Pues yo una Coca-Cola, por favor- ella asintió con una sonrisa en sus labios

-Y yo una Fanta de Naranja y unas aceitunas- comentó Yuls. La camarera se fue y me fijé en mi amiga que no dejaba de mirar al chico rubio

-Ui, conozco esa mirada, a ti te ha gustado ese chico!- Noté como sus mejillas se coloreaban a la misma vez que se encojía de hombros.

-Hombre, el tío está de toma pan y moja, pero después de lo que me ha pasado con Alex no estoy preparada para estar con nadie más- su voz sonaba triste, le alcancé la mano apretandosela.

-Cariño, Alex no te va a volver a tocar, se que aún es pronto para estar con alguien, pero tampoco puedes pretender meterte a monja, porque sinceramente a ti no te pega nada!!- tenía que poner un poco de humor para que no se viniese abajo y pareció funcionar ya que esbozó una gran sonrisa