Promesas

Capitulo 35

Jung YunHo. (POV)

Estoy sentado en mi oficina en la "SM" pensando en lo que tengo que hacer para poder asegurar la empresa. Aún no he podido obtener los papeles que hacían propietario a SiWon y KiBum de más de la mitad.

HanGeng está parado frente a mí, esperando a que le de alguna orden. Respiro hondo y reviso de nuevo el informe que ha venido a darme.

— ¿Qué ha pasado con lo de SiWon? — le pregunto sobre el tipo al que contraté y que hasta el momento no ha sabido hacer su trabajo.

— Sigue igual. — contesta. — HeeChul no ha podido recordar nada y con el nacimiento del niño todo se ha enfriado un poco.

Me recargo en mi silla. Junto mis manos y respiro hondo. Necesito hacer algo. Un plan de respaldo. Las cosas no están marchando como yo quiero.

— Y ese chico... ZhouMi y su hermano. ¿Siguen en China?

— Sí. Desde que se fueron de aquí, ahí se han mantenido.

— Y KiBum... ¿Ha intentado contactarse?

— No YunHo. Parece que aún está muy afectado por lo del bebé.

Sigo hojeando el informe en mis manos pero puedo escuchar en su voz un poco de inseguridad. Es casi imperceptible pero lo conozco. Ha trabajado conmigo mucho tiempo como para no haberlo estudiado lo suficiente para saber cuando está diciendo la verdad.

Dejo el informe en el escritorio. Respiro hondo y levanto el rostro para verlo. Como siempre, luce serio. Cualquiera podría decir que no ocurre nada pero yo no. Aquí hay algo que no me agrada nada.

— Bien. Continúa vigilándolos a él y su hermano. Quiero saber que es lo que tanto los distrae de lo que les he pedido.

— Está bien. — contesta tomando algunos papeles del escritorio. — ¿algo más?

— No. Puedes irte. — hace una media venia y sale.

Observo fijamente la puerta. Vuelvo a bajar la mirada para leer el informe que me ha traído. Niego con la cabeza con una media sonrisa.

— Es una lástima. HanGeng era un buen brazo derecho. — me digo.

El informe que me ha traído no está completo. Puedo notarlo. No se compara en nada a los que me presentaba antes del accidente de mi hermano. Respiro hondo. Me recargo de nuevo en la silla. Ya no puedo confiar en él. Debí notarlo cuando mi hermano murió en ese accidente.

Saco mi celular del bolsillo de mi saco y marco un número privado.

— Necesito que vengas a mi oficina sin que HanGeng se entere. — le digo a la persona del otro lado. — y más te vale que así lo hagas YooChun... No quieras saber de lo que soy capaz. — después de escuchar su respuesta, corto la llamada.

En cuanto lo hago, el intercomunicador suena. Mi secretaria me dice que mi abogado está esperando así que lo hago pasar. Tengo algo muy importante que arreglar con él. YunHee acaba de nacer y aún no está registrado.

Kim JongWoon. (POV)

Sonrío ampliamente. Creo que desde que desperté el día de hoy, he sonreído más de lo que lo hice toda mi vida. No puedo sacarme de la cabeza lo que pasó anoche. La forma en que RyeoWook me aceptó de nuevo como su prometido.

Manejo por las calles de la ciudad rumbo a su casa. Debería estar trabajando, sobre todo porque apenas son las 12 del día pero necesito verlo. No ha ido a la universidad porque anoche me fui de su casa muy tarde y no pudo levantarse temprano.