Promesas

Capitulo 32

Ryu ZhouMi. (POV)

Veo mi reloj impaciente. Apenas han transcurrido diez minutos. Quisiera que el tiempo pasara rápido. No quiero estar aquí pero no puedo seguir negándome a mis padres. Si lo hago, seguramente buscarán la manera de alejarme aún más de KiBum.

Observo fijamente la flor que está sobre la mesa. La ha comprado para mí. Mueve su mano buscando el contacto con la mía pero rápido la alejo. Levanto un poco la mirada. Sonríe divertido ante mi reacción. Hago una mueca molesto y desvío la mirada.

— Éste restaurante es uno de los más exclusivos. Lo elegí porque preparan una excelente sopa wonton. ¿Te gusta la sopa wonton no es así? — de nuevo, lo veo a los ojos muy serio.

— No. No me gusta. No sé quien le dijo que me gustaba. No la soporto. No me gusta su sabor. — contesto golpeado.

La verdad, es que amo la sopa wonton pero no quiero darle el gusto de sentirse bien solo por haberme traído a éste restaurante. Levanta una ceja. Me ve fijamente y de nuevo vuelve a sonreír. Me molesta que nada lo haga enojar.

Tomo el menú frente a mí, cuando veo que el mesero se pone frente a nosotros. Busco cualquier cosa. En realidad, no tengo mucha hambre.

— Dos sopas wonton.

— Yo quiero Chow Mein. — lo interrumpo y sonríe de lado.

— Por favor querido. Sabemos que quieres la sopa. — aprieto los labios conteniendo mis ganas de contestarle. Se voltea a ver al mesero de nuevo.

— Dos sopas Wonton y un Perrier Jouet por favor. — abro los ojos sorprendido por la champagne que ha pedido. Demasiada cara.

— En seguida señor Kuo. — el mesero hace una venia y se retira.

Observo como el mesero se aleja y aún con la boca abierta y sorprendido por lo que acaba de pedir, regreso la mirada hacia enfrente. Sigue sonriéndome pero ésta vez, puedo notar un rasgo de satisfacción por haberme impresionado. De inmediato, cambio mi expresión.

— ¿Por qué ha pedido la sopa? Le he dicho que no me gusta. — me toma desprevenido y toma mi mano.

— Querido. Deja de hablarme de usted. Me llamo Dylan. — respiro hondo y molesto.

Está ignorando mis reclamos. Zafo mi mano y me cruzo de brazos en la mesa haciendo un puchero para demostrarle que estoy muy molesto. Volteo sorprendido cuando escucho que empieza a reírse.

— ¿Se está burlando de mí? — le reclamo enojado.

Deja de reírse pero sigue sonriendo. Pone sus codos sobre la mesa y junta sus manos frente a su rostro. Me observa fijamente.

— Eres encantador ZhouMi. — entrelaza sus dedos. No puedo evitar sonrojarme un poco por su afirmación. — entre más te encaprichas en no querer nada conmigo, más me agradas. Eres un reto. — levanta una ceja. — me gustan los retos.

No contesto nada. Empieza a incomodarme el que esté siendo tan paciente con todas las groserías que estoy haciéndole. El silencio entre nosotros se rompe cuando el mesero llega con la botella de Perrier Jouet y la pone junto al señor Kuo.

Sirve una copa frente a mí y luego sirve una para él. Levanta su copa y la pone entre los dos esperando a que yo levante también la mía.

— No gracias.

— ¿Por qué? ¿No te gusta el champagne?

— No quiero. — contesto seco y levanta una ceja.