Capitulo 01

360 23 1
                                    

Jung YunHo. (POV)

La empresa "SM" es la más importante en todo Seúl. Prácticamente se dedica a todo. Tenemos un canal de televisión, una editorial, tiendas departamentales, una marca automotriz "TVXQ"en fin, todo lo que puedan imaginarse.

Prácticamente el poder que tenemos en nuestras manos no sólo nos beneficia a nosotros, sino a muchos empresarios de Seúl. Todo aquel que se jacte de ser un buen negociador debe tener por lo menos un contrato firmado con alguno de nuestros departamentos. Sólo los más grandes y poderosos empresarios pueden tener la suficiente capacidad financiera para firmar grandes contratos con nosotros.

Mis padres murieron hace varios años en un accidente aéreo, y desde entonces yo empecé a hacerme cargo de todo, pero en el testamento dice que todo debe estar dividido en tres partes iguales. Una para cada uno de los hijos de la familia Jung.

Debido a eso, cuando mi hermano SiWon terminó sus estudios empezó a hacerse cargo de varias de las empresas. Mi otro hermano aún no termina sus estudios y en estos momentos está en el extranjero en una de las escuelas más prestigiadas de Inglaterra.

Hasta ese momento todo era perfecto, mis hermanos estaban bajo control y yo seguía teniendo el control de la mayoría de los negocios. Se hacía lo que yo decidía. Todo es por el bien de la familia y por los negocios que mi padre nos heredó.

Pero de pronto SiWon comenzó a cambiar. Llegaba tarde a las juntas importantes, no se presentaba a los eventos que nuestros socios más grandes organizaban, en ocasiones llegaba tarde a la oficina y en casa era la misma situación. Entonces fue cuando noté que algunos de los negocios en donde él se desempeñaba habían dejado de tomar en cuenta mis decisiones.

Hasta que un día hace ocho meses llegó a casa con ese chico.

— YunHo. Te presento a mi esposo.

Me quedé en blanco, se había ido a casar quien sabe a dónde sin importarle un bledo la posición de nuestra familia. Tomó una decisión que debió consultar con la familia.

— Hola. Mucho gusto. Soy Kim HeeChul. — se presentó.

— No princesa. Recuerda, Jung HeeChul.

— SiWon. Tenemos que hablar. Al despacho ahora.

Entré al despacho y empecé a caminar de un lado a otro. Tenía que pensar en cómo resolver ese problema.

— ¿Qué te pasa? ¿Por qué eres así de grosero con HeeChul? — entró recriminándome.

— ¿Qué me pasa? ¿Estás loco? ¡Fuiste a casarte sin mi consentimiento!

— Ya soy mayor de edad y puedo hacer lo que quiera. Aunque no te guste, HeeChul es mi esposo y tendrás que darle su lugar. — eso era el colmo. Era capaz de responderme así ¿desde cuándo?

— ¿Has pensado en el futuro de las empresas? ¿Sabes que lo que acabas de hacer puede ser perjudicial? Ya tenía pensado un buen matrimonio para ti.

— ¿Un matrimonio arreglado? ¡No YunHo! Si KiBum se deja manipular por ti, bien por él pero a mí no. Yo ya estoy casado y tendrás que aceptarlo. Y por las empresas no te preocupes, que las que yo estoy manejando van muy bien porque las ganancias se han incrementado considerablemente.

— ¿Y por qué no he visto ningún reporte?

— ¿Acaso eres el dueño de todo? Te recuerdo que las empresas son de los tres. Tú sólo estabas cuidándolas. ¡De ahora en adelante yo me hare cargo de lo que me corresponde!

PromesasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora