Segunda parte: 20

425 35 11
                                    

Especial Joaquín

Ya todo pasó y no puedo viajar al pasado para evitarlo.

De seguro, Carolina ya está llegado al aeropuerto y, bueno, yo estoy encerrado en mi habitación preguntándome: "¿Hice lo correcto?". Es obvio que Carolina me odia por todo lo que la confundí, pero el más confundido ahora, soy yo. Al volver a ver a Martina, una parte de mi corazón totalmente abandonada, volvió a la luz y generó que vuelva a sentir cosas por ella. Sin embargo, cada vez que veía a Carolina con Rocío, imaginaba una familia con ella, solo con ella. Cuando lo intentaba con Martina, no funcionaba, como si faltara algo.

Pero ya no había tiempo para arrepentirse, Carolina y yo hemos escogido caminos diferentes y tenemos que aceptarlo. Yo comenzaré una vida con Martina y Rocío, además, yo sé que mi hermana también estará conmigo. Pero, ¿por qué sigo mal?

Al estar tanto en mi habitación, decidí salir afuera para respirar aire fresco, estar tanto tiempo encerrado, me agobiaba. Recuerdo que Carolina no salía de su cuarto cuando se encontraba en situaciones depresivas. Creo que han sido por mi culpa...

Una voz interrumpió mis pensamientos, la voz de Martina se escuchaba desde afuera de la casa. Iba a ir abrazarla, así tal vez podría olvidar mi extraña depresión. Pero ella estaba de espaldas y no me hablaba a mí.

-Sí, gracias a que la tonta de Carolina se fue de mi camino, me podré casar con Joaquín y tener toda la plata que necesito- hablaba por su celular- Agradezco cada día por abandonar a la mocosa de Rocío, ella terminó siendo mi camino fácil hacia la gran herencia de Joaquín.

Me fui. No iba a hacer una escena de drama ni nada por el estilo. Ella no merecía mi sufrimiento. Quería llorar y volver a mi habitación; sin embargo, me aguanté y corrí en busca de mi hija.

-Rocío, agarra tu abrigo, nos vamos a buscar tu madre.

-Pero si está afuera-dijo mientras agarraba su abrigo confundida.

-Me refiero a tu verdadera mamá-le guiñé un ojo.

Ella abrió los ojos y de ella, salió una gran sonrisa.

-¡Vamos! ¿Y mamá dos también viene?

No sé qué pasara con Martina, ni me interesa. Todo este tiempo estuve ciego y no lo quise aceptar ni tampoco ver. Ahora lo entiendo. Me dejé engañar y estuve aferrado a la idea de una nueva familia con Martina, que no me importó lo demás.

Pero como ya dije: uno no puede volver al pasado.

Desearía tanto no haber visitado nunca el orfanato y descubrir que Martina era la mamá biológica de Rocío, tal vez hubiera tenido un lindo futuro con Carolina.

Regresando a la realidad, Rocío y yo nos subimos a mi auto y nos dirigimos en busca de Carolina. Y esta vez, no habría confusiones. Martina se iría completamente de mi vida y Caro será mi futuro, el futuro que ignoré, pero que ahora recuperaré.

Puede que no pueda viajar al pasado, no obstante, yo recuperaré lo que dejé a un lado. Nunca es demasiado tarde.


¡Holaaa! Ya sé que el capítulo es un poco corto, pero esperen al próximo capítulo, ya que será el final de toda la novela. 

¿Carolina se irá o se quedará?

NOT EASYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora