De la A a la Z (26 one shot)

Capitulo 19: Solo quédate en silencio

Era una noche lluviosa del séptimo mes del año en curso cuando Erza Scarlet acababa de terminar la última práctica de esgrima que tendría antes del inicio de las competencias extra-académicas. Como era costumbre en ella pasa a dejarle el informe de todos le encuentros que iba a tener en la etapa preliminar al Maestro Makarov una vez hecho me dirigió a la casa de su novio Jellal Fernandes ya que quedaba más que las residencias Fairy Hills y lo último que quería era pescar un resfriado a causa de la torrencial lluvia en temporada de competencias. Logró llegar casa sin estar completamente empapada por la lluvia al ser algo tarde trato de hacer el menor ruido para no despertar a querido princeso el cual se había quedado dormido en el sofá frente al televisor encendido...suponía ella.

–Espero que te enfermes por la lluvia– Dijo Jellal con calma asustando ligeramente a la recién llegada.

– ¡Jellal! –Exclamo Erza dejando su bolso con sus cosas junto a la puerta– Puedo saber porque siempre que vengo a tu casa te encuentro despierto a pesar de lo tarde que sea– Quiso saber la joven mientras se deshacía de algunas de las prendas que estaban mojada por la lluvia.

–Me es imposible no preocuparme cuando no dices que estas en las residencias así que te espero hasta que llegues a acá– Confesó Jellal levantándose del sofá para ir hasta donde se encontraba su amada pelirroja– Erza... lo siento tanto, soy un novio horrible por el simple hecho de no poder ir a buscarte cuando sales tarde de tus prácticas– Dijo el peliazul tomando las manos de la mencionada la cual solo negó con su cabeza para ella que él estuviera, de cierta manera, libre y que pudieran verse cuando quisieran era suficiente para la pelirroja.

–No eres un novio horrible, Jellal aunque con lo malhumorado que amaneces en ocasiones el término es discutible– Dijo con una sonrisa Erza apretando un poco el agarre del chico.

–Sabes que te amo, ¿Cierto? –Dijo Jellal mirando fijamente a la muchacha frente a él, ganándose un asentimiento de cabeza por parte de esta– Ve a cambiarte prepare tu cena favorita...De nada– Agregó soltando lentamente las manos de Erza– ¿De nuevo lagrima derramas por tu ojo izquierdo? –Dijo secando la solitaria lágrima que bajaba por el rostro de la chica.

–Hoy olvide el medicamento por salir apurada de casa...pero no es nada de qué preocuparse– Dijo apoyando su mejilla sobre la palma de Jellal– Gracias por tenerme la cena lista...y te amo también– Dijo antes de salir corriendo a la habitación del chico para ducharse y cambiarse.

Desde que Erza se fue corriendo a la habitación del dueño de casa habían pasado solo unos quince minutos, los cuales fueron aprovechados por Jellal para calentar y servir la cena de su novia además de preparar una par de bebidas calientes para calmar un poco el frió que hacía a causa de la fuerte lluvia, para cuando la pelirroja regreso al salón principal donde funcionaban tres espacios pequeños como lo eran la salita de estar, la cocina y el comedor, ya el chico tenía servida la cena para que la disfrutara.

–Cada vez que me abrazas me haces el hombre más feliz y afortunado de la tierra– Dijo el peliazul captando la atención de Erza en segundo quien apenas acababa su cena– Me hielo al pensar que todo esto es un sueño que termina y me dejara en una realidad fría y oscura como lo son las prisiones de la guardia real...

–Pues cada vez que me pides un beso...yo soy tan feliz que a veces siento...me quedo sin respirar es tonto lo sé...ya que tenemos dos años de novios pero de solo recordar todo lo que hemos vivido en todo este tiempo me vuelve la persona más dichosa del mundo –Interrumpió Erza, pues sabía hacia donde se dirigía aquella conversación sólo espera que con lo dicho el tema quedará en el olvido y pudieran sólo compartir un momento de paz y amor como otras veces.