[Levi narra]
Estaba sentado en la silla de madera, dándole la espalda a la pared y no me había quitado el saco ni cuando entramos, dejo que se quede puesto en mi cuerpo. Me lo puse antes de venir, allá en casa con Eren. Este... Me acomodo un poco las solapas sobre pecho, un leve contacto y un estúpido capricho suyo, el mío es... querer conservarlo así. Un intento mediocre de mi parte, de retener su calor conmigo.
Porque yo... lo he estado extrañando, incluso antes de que empezara este viaje en avión y abordara el tren para llegar acá. Lo extraño, desde el momento en el que comprendí que tenía que alejarme de él... por tres días. Desde el momento en que ella...
—... -Mi puño se quiere cerrar sobre mi rodilla. Rabia, no. Es impotencia. Me encorvo más adelante y voy mandando mi vista abajo, al suelo de madera ennegrecido por la mugre, el lodo y las pisadas de niños, entrando con las botas sucias seguro. Isabel estaba sentada a lado mío y Farlan está de frente, apoyado de espaldas contra el fregadero de la cocina-sala.
Yo... empezaría a hablar, después de un mullido silencio. En el que Farlan, me había dicho la pregunta de: "Quieres contarnos... ¿Qué te pasa, Levi?".
Obvio que no sería fácil y tomaba mis pausas como demostración, de que estaba muy afectado, en extremo y prefiero que este tiempo, sea considerado como un lapso del tiempo muerto. De hecho, es el mismo peso fúnebre que cargo y que me tomó para asumir que "aquel pasado" tan bello... Ya NO va a volver. No tan fácil, al menos.
—...Durante estos cuatro años de convivencia con Eren, yo... -Había una vela encendida sobre la mesa, me perdí en su luz ese instante al narrar y quise volver a callar, pero...
—Lev···
— Ahg, ¡Maldita sea! Fui un completo estúpido. -gruñó para mi, quisiera tener esa taza e irla estrujando. Tenia hasta intenciones de romperla con la mano u tirarle al suelo en mi frustración.— Todos ustedes tenían toda la puta razón. Eren es lo que necesitaba, él me dio todo lo que podía desear en un "nuevo inicio" e incluso más. Estos años a su lado...Probé bastante de la vida, conocí lo amargo y lo dulce con él. Yo soy malditamente feliz y me odio, por permitir eso.
Apreté el puño y lo golpeo contra mi rodilla.
— Jamás pensé que... Eren y yo éramos tan parecidos. Él es esa persona de la que nunca podía desconfiar y a la que me aferre sin parar. Le creí -di otro golpe — ¡Mierda que si lo hice! Creí que podíamos ser una familia juntos, pero...
Otro corto silencio. En que nadie dice nada, excepto yo.
— Pero yo, yo estaba experimentando todo aquello por primera vez y me, fui tanto tonto de creerme LIBRE... Me di el permiso de entregarme a estás emociones a rienda suelta y no pensé jamás en salir herido en el proceso. Yo me... me...
—Te enamoraste de él. -finalizó Farlan. Exhalo y ya no me queda más, que admitirlo.
— Si. Me enamore de Eren -Admití sin pena, era algo de lo que estaba orgulloso...aunque me doliera.
Consentir la idea de quererlo. Esa que me decía muy dentro de mi, que él era casi lo único bueno que había hecho en este largo de toda mi vida. Me permití caer en el amor y estaba agradecido, de que este "Amor" por fin me llegara a mi vida mientras yo... Me había pasado años rogando por él, hasta el punto de odiarlo y andar negando su existencia.
"Nunca me enamoraría y mucho menos... demostraría cariño a nadie aparte de mi familia, ¡mis hermanos de sangre y mugre! ¡Y no hay nadie más!"
Joder, que idiota. Al final, ese amor si vino. EREN vino a mi cuando no lo esperaba, cuando ya... me había decidido a olvidarme del amor.
—...Me enamore de su dolor que asemejaba al mío, Farlan. Me enamore de su bondad tan desconocida, de lo torpe que resultaba su gentileza...de su terquedad hacia mi bienestar, de su preocupación por una vida que no le correspondía, de sus fraternales y cálidos abrazos... de ese deber de "Padre" que se ponía encima por mí. Alguien que no vale nada -suspire largo y cansado —...Me enamore de la protección que me brinda, de la confianza que me da...Aún cuando le falló, incluso del perdón que siempre recibo sí estoy llorando...A pesar de saber que fui yo, ¡Soy yo quien lo lastima!
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Tienes Mi Corazón (SNK)
RomanceEsta es la vida del joven Eren Jaeger de 19 años de edad, joven alegré y amante de la música. Su vida es tranquila y placentera solo, no planea comprometerse con nadie hasta que "Este día" llega y lo cambia todo. Eren se encuentra con un niño pobre...