- ¿Hola...?
La voz femenina que oye le pone en alerta y se voltea para ver de quién se trataba; había estado tan concentrado en lo que llevaba haciendo hace un par de horas, que no sintió que ella estaba ahí mirándole desde las escaleras.
- ¡Oh, señorita Jung! – sonríe.
Taemin se incorpora y limpia sus manos en la tela de su pantalón de chándal, ofreciéndole una para saludarla.
- Lamento haber entrado, la puerta estaba abierta... - le dijo – Llamé pero como no vi nadie me preocupé y decidí entrar
- ¡Oh, no se preocupe! El camión se fue hace poco y olvidé cerrarla...
La casa era un completo desastre. Había cajas apiladas por todos lados; en la sala los muebles estaban cubiertos con telas blancas para evitar que el polvo las deteriorase, así como herramientas, pintura y otros elementos para la remodelación que pretendía hacer. En el segundo piso era lo mismo, más cajas con cosas que se distribuían por el pasillo hasta la habitación que llevaba usando los últimos días.
Desde que se decidió por comprar la casa, todo había sido demasiado rápido. El traslado de sus pertenencias y el organizar todo, además de contratar maestros para pintarla y cambiar una que otra cosa.
- Veo que trajo todas sus pertenencias...
- Sí, no veía la hora de cambiarme, es una nueva etapa para mí y estoy muy entusiasmado – sonrió mirando todo con exceso de orgullo – Debo agradecerle por ayudarme, ha sido muy profesional señorita Jung
- No hago nada más que mi trabajo, me alegra que esté feliz, espero que ahora su vida sea incuso mejor...
- Espero lo mismo – afirma – Y bueno, ¿qué le trae por aquí? Pensé que no nos reuniríamos hasta en un par de días, hasta que el antiguo dueño me entregara la posesión efectiva de la casa...
- Bueno, la verdad que ya lo hizo, tenga
La corredora de propiedades le entrega una carpeta con dichos documentos, los que Taemin revisa y puede comprobar por sí mismo, que ahora la casa era completamente suya; al fin tenía algo propio.
Al principio su madre no estuvo de acuerdo; '¿Para qué quieres una casa si puedes vivir conmigo?' le decía. Pero él, tenía esta fijación de independizarse, de tener algo de su propiedad, de reanudar su vida por sí mismo.
- Me reuní con él esta mañana y me la entregó...
- Pensé que había dicho que estaba en Japón
- Llegó anoche, vino a hacer este papeleo y ya mañana se regresa a Tokyo
- Oh, pensé en al menos conocerlo – se lamentó – Admito que fue raro no hacerlo, pensé que él iba a creer que yo era un estafador e incluso pensé que él lo era, nunca creí que me vendería la casa de inmediato
- Bueno, él tenía un perfil de persona muy establecido a quien quería venderle la casa, estaba muy apegado a ella, y usted simplemente calzó perfecto
- Hablando de eso... - añade – Revisé los planos de la casa y ahí sale que hay 5 habitaciones más un baño en el segundo piso pero, hay cuatro...
- ¿Cómo?
- Sí, venga
La mujer va tras él en ese recorrido que no parece estar segura de qué significa.
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[ Memorias de un Invierno ]
Romance•2Min• Él solo tenía un sueño, uno que le pertenecía. Era un sueño sobre una vida pasada, un amor olvidado y sin futuro. Era un sueño que tenía una forma, eran sombras de las memorias de un pasado que se aproxima pero luego, vuelve a desaparecer. Ta...