Capítulo 25

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Sam se me quedó viendo, pero no mostraba ninguna emoción, si le había gustado, si estaba enfadado, era como si hubiera besado a una pared. Pero por la manera en que lo había hecho sabía que tenía tantas ganas como yo, que me quería de la misma forma en que yo lo hacía.

—Creo que deberíamos volver adentro.

Asentí con la cabeza, caminamos adentro.

— ¿Me puedo dar una ducha? —Pregunté mirando mis manos.

—Sí, ¿Tienes ropa?

—No, no creí que esto fuera a pasar...

—Bien te traeré ropa mía para que uses para dormir, mandaré a lavar el vestido para que lo puedas usar mañana.

Fui hasta el que sería mi cuarto y después me quedé como más de una hora sentada en la tina, pensando en todo lo que había pasado.

Lo había besado, ¿Qué diría ahora?, ¿Cambiaría todo?, la verdad eso me ponía muy nerviosa.

Respiré y salí con la toalla en mi cama había una camisa de Sam y un pants. Me puse la ropa interior, después de eso solo me puse la camisa de Sam, tenía su rico aroma.

Destendí la cama y me acosté.

Me quedé viendo el techo por un largo rato, hasta que alguien tocó la puerta.

—Pase. —Dije.

Sam apareció en la puerta, se me quedó viendo con una sonrisa en su boca, la verdad jamás me había visto de esa manera.

—Veo que no te pusiste el pants.

Miré el pants que estaba en la orilla de la cama, la verdad me quedaba muy grande, apenas daba un paso y se me caía.

—Me quedaba un poco grande, así que decidí dormir solo con la camisa.

Sam caminó hasta la cama y se sentó, tomo mi mano y los dos nos quedamos viendo, era como si tuviéramos mucho que decir, pero a la misma vez nada.

—Sabes eres muy hermosa.

Con la otra mano puse mi pelo detrás de mí oreja.

— ¿Crees eso?

—Sí, siempre lo he creído.

— ¿Por qué no me lo habías dicho nunca?

Comenzó a acariciar mi mano, haciendo que no pudiera respirar con normalidad.

—Bueno tú no eres la clase de chicas que les tengas que decir que son hermosas, las tienes que hacer sentir hermosas.

Bajé la mirada mientras sonreía.

—Pues muchas gracias, pero creo que de vez en cuando a las mujeres nos gustan las dos.

Tomo mi mejilla y me hizo mirarlo.

— ¿Alexa hay alguien que te gusta?

—Sí, tú.

Entonces lo besé con pasión, él se puso arriba de mí, mientras yo lo tomaba del pelo mientras lo besaba.

—Alexa. —Dijo Sam viendo fijamente.

— ¿Qué?

—Qué si te gusta alguien.

Creo que no debería dejarme llevar por esos pensamientos, la verdad sería lindo decirle que él, pero ¿Qué ganaba con eso?, tal vez él no sentía lo mismo por mí, saben el amor es un asco, enamorarte de tu mejor amigo es un asco, porque pasas mucho tiempo con él, pero sabes que nunca será tuyo, porque, aunque me duela Sam jamás será mío.

—No me gusta nadie... —Admití finalmente.

—Bien... Oye podemos hablar sobre el beso.

Asentí con la cabeza, bien tal vez esto podía mejorar, tal vez ahora mismo se me declaraba, podíamos estar juntos, juntos al fin.

—Quiero que lo olvidemos.

Me quede mirándolo como si fuera una clase de broma. Mi cerebro tardó un momento en procesar la información y cuando lo hizo, sentí que se me detuvo el corazón.

— ¿Es real?

—Sí.

Debía de decir que estaba bien, pero yo y mi inmensa bocota habló.

— ¿Por qué quieres que olvide eso?

—Porque fue un error, algo que jamás debió de haber ocurrido.

¿Un error?, nuestro beso para él solo era un error, mientras que para mí había sido lo mejor que había sentido. Sentí como un nudo se formaba en mi garganta.

—Sí, un grave error. —Escupí las palabras con mucha frialdad.

Sentía como las lágrimas comenzaban a salir, descendieron con mucha facilidad, pero antes de llegar a caer por completo las limpiaba.

—Pero eso no es todo... Quiero que nos demos un tiempo, no quiero que hablemos ni nada.

— ¿Estás diciéndome que ya no quieres que sea tu amiga?

—Solo por un tiempo, mi vida es un desastre total ahora...

Me mordí el labio para no sollozar, eso era una vil excusa, su vida siempre había sido desastrosa y eso no evitaba que fuera mi amigo.

—Bien, no sé porque estés tomando esa estúpida decisión, pero quiero que sepas que aun te puedes retractar, dime que es una broma y te creeré pero si no me dices esto, te daré todo el tiempo que necesites, pero cuando te sientas mal no vengas a mí, no quiero visitas inesperadas, ni llamadas, ni cartas para mi tu habrás muerto.

Tal vez estaba siendo muy dura con él, pero no era justo para mí, ni para él. Sam siempre hacia cosas que me lastimaban, que muchas veces no tenía consecuencias, pero esta no sería una de esas.

—Alexa...

—No, ¿Sabes?, vete del cuarto, mañana en la mañana me iré.

Sam trato decir algo, pero me paré de la cama, abrí la puerta.

—No te lo diré una vez más Sam.

Él se paró y se fue sin decir una palabra.

Cerré la puerta cuando él se fue, después de eso me quedé recargada en la pared llorando, lo odiaba por lo que me estaba haciendo, era un idiota.

No quería volver a verlo, no por ahora, mi corazón no puede resistir tanto, no soy un saco que puedes golpear y no sentir nada, era una persona con sentimientos que le dolía las palabras las acciones.

Esa noche no dormí nada pensando en él, pensando en Sam.

A la mañana siguiente me trajeron mi vestido, me lo puse deje todo en la cama, después cuando me avisaron sobre que el carro estaba afuera, me subí sin mirar atrás y me fui.

Diciéndole adiós a mi primer amor, diciéndole adiós, aunque por dentro estuviera muriendo lentamente, sintiendo como si me encajaran miles de cuchillos porque me había hecho sentir miserable, pero aunque haya hecho todo eso, aún lo amaba y eso nadie lo cambiaría.

N/A

A partir de este momento estamos en la recta final, a partir de este momento solo quedan como 7 (Máximo 8, pero lo dudo) para el final :o

Los siguientes capítulos serán intensos :o demasiado 7u7

Pero bueno, adiós y que tengan un lindo fin de semana 

Princesa Alexa (PE #3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora