Nunca fui de demostrar mis sentimientos ni siquiera con mis padres, nunca lloré frente a ellos y creo que eso les creó una idea equivocada de mi "la hija valiente" puede que vivan creyéndolo pero yo, yo también me lo he creido todo este tiempo y en realidad no soy valiente como ellos lo llaman, solo sé controlar mis emociones y aveces está mal porque no te puedes pasar la vida entera huyendo de todas esas cosas que provocan algo en ti ya sean malas o buenas se sienten y yo solo evitaba sentir, evitaba sentir algo en especial llamado amor.
Fue hasta el momento en que lo conocí, nunca me había atraído un chico durante tanto tiempo ¿y si estoy enamorada?, no mierda, no. Hasta el momento tenía 0/0 oportunidades con él y no quería conocerlo más porque sabía que iba a terminar de enamorarme completamente de aquella persona, sí él, que al sonreír me hace sentir miles de emociones por dentro, que al aclarar su garganta llamaba mi atención y no podía dejar de mirarlo por unos cuantos segundos sin que lo notara, imágina sólo que lo note sería una total vergüenza, de hecho toda yo soy una vergüenza y éste es el principio, el problema no era él ni el amor, el problema era yo y solo yo.
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No puedo quedarme.
Short StoryNo es solo una historia de amor adolescente, es una historia de lo que pudo ser.