No puedo quedarme.

Catorce.

Había llegado el día del examen de Valentín, hace una semana me había besado y desde aquello no habíamos vuelto hablar. Me había dejado claro que no importaba si asistía o no pero yo sé lo había prometido y no quería que estuviera nervioso. Llegué treinta minutos antes de la hora que estaba dicha para el extraordinario y esperé afuera de la escuela, no había más de diez personas pero con el tiempo iban llegando cada vez más.

Valentín bajó de un taxi y se dirigió a la puerta, creí que no me había visto pero justo antes de entrar fue hasta mi.

- Gracias por estar aquí.

- Te lo prometí, todo saldrá bien ya verás.

- Y yo te prometo a ti que si -. Me abrazó.

Yo no pude entrar a la escuela pero lo esperaría a fuera.

Después de casi una hora y media salió, fui con él y sin siquiera preguntárselo podía deducir que le había ido de maravilla.

- Estuvo muy fácil en serio-. Dijo mientras caminamos hacia la parada del colectivo.

- Es por lo mucho que te esforzaste estudiando ¿cuando te dan resultados?.

- Dos semanas.

Llegó mi colectivo de regreso a casa y me despedí.

- Me alegra que te haya ido bien, nos estamos mensajeando.

Me jaló y no me dejó subir.

- Tenemos que ir por algo para celebrar que me fue mejor de lo que esperaba.

Había perdido mi colectivo y no tenía que hacer por el resto de la tarde así que le dije que si.

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Los últimos dos meses se habían pasado tan rápido que ni siquiera habría recordado lo que hice en ese tiempo de no haberlo pasado la mayoría con Valentín. Nos frecuentábamos más no solo nosotros dos sino también con algunos de nuestros amigos lo cual era algo fuera de lo común pero el próximo año escolar no sería lo mismo así que tratábamos de divertirnos lo más que podíamos.

En ese tiempo Valentín fue el mismo chico estúpido del que me enamoré, hacía bromas todo el tiempo y conmigo más, no se separaba de mí y me agradaba que se preocupara tanto aunque no fuera necesario.

A los dos meses y medio de que Fernando entró a la facultad decidimos terminar, al parecer su amor por mí había disminuido o fue lo que quise entender. Me hablaba mucho de una chica, Angélica la vi un par de veces y parecía que moría por mi novio.
Después de todo Fer merecía a alguien mejor que yo, terminamos en buenas condiciones seguiamos hablando de vez en cuando para preguntar cómo estábamos y yo le preguntaba qué tal iba con su carrera.

Me sentía feliz por él y yo ya no me sentía mal por seguir queriendo a Valentín, él no sabía que mi relación con Fernando había concluido ya pero yo quería sorprenderlo o no sé que fuera de lo más lindo darle la noticia.