Undertale: IN-determinados.

Cap35: El accidente

PoV Narrador

Fueron 5 golpes secos, a pesar del dolor, Frisk no fue capaz de emitir sonido alguno, lo único que se llegó a escuchar fue un quejido, para cuando su cuerpo ya había parado de caer. Todo se mantuvo en un armónico, pero agonizante silencio, el mundo pareció darle vuelta y antes de que sus párpados se cerrasen, alguien gritó, entonces perdió la consciencia.

Una auxiliar, quien guiada por el ruido de los golpes, se acercó dudosa al final de las escaleras, encontrándose con un pequeño río de sangre, proveniente de una desafortunada estudiante. Primeramente, miró hacia todas partes en busca de ayuda, su vista fue a la derecha, luego a la izquierda y nuevamente a la derecha.

--¡¿Pasó algo?!-- desde el principio del pasillo, las figuras de Joseph, Chara y el profesor Peres sen asomaron, la auxiliar por su palidez les llamo la atención.

--Una... estudiante...-- sus palabras no salían fluidas, haciendo difícil entender lo que decía, pero bastó con esa frase, para encender una alarma en el alma de Chara, sin siquiera pensarlo, corrió hacia donde la auxiliar.

--¡Frisk!-- chilló, al ver el cuerpo de su "amiga". Esa imagen la llenó de un sin fin de emociones y de un único pensamiento.

"A ella debí defender".

Joseph sujetó por detrás a una temblorosa Chara, preocupado observó tomar el control de la situación al profesor, quien lo había acompañado todo el tiempo a buscar a ambas chicas, luego de que salieran en persecución.

[...]

La noche caía, y en el hospital más cercano a la escuela de las humanas, todo esperaban nerviosos noticias de Frisk, a ratos doctores y enfermeras salían, avisando de algún avance en su estado, pero hacía casi una hora que eso no ocurría.

--¡No estoy llorando!--

--¡Sí estás llorando!--

--¡Qué no!--

--¡Qué sí!--

--¡Qué...! ¡Tú también estás llorando!--

--¡Yo siempre lloro!--

Los hermanos Dreemurr lloraban y peleaban a pesar de la situación, distrayendo a todos un poco. Chara tenía la cabeza escondida en el pecho de Asriel y este le abrazaba a la altura de los omóplatos, se veían tiernos a pesar de las cosas que se estaban gritando, el personal de lugar no tardó en llamarles la atención por vigésima vez.

Joseph y Ñono se encontraban en el lugar, ambos con el mismo nivel de preocupación, sin embargo el aficionado a los "best seller" ardía en ira, todos se mostraron afectados al enterarse de la caída de Frisk y eso le molestaba, hasta hace uno minutos antes la estaban atacando por haber hecho simple comentario, eso Amaranto no podía tolerarlo, así que él personalmente se encargo de evitar que el resto del grupo de Chara viniera al hospital, diciendo un buen par de verdades.

El mayor del grupo miraba su celular, preguntándose como pudo haber sucedido. Según la auxiliar, probablemente se habría resbalado, pues todavía el piso de aquel piso yacía un tanto húmedo, sin embargo, ese nivel de torpeza no se lo atribuía a Frisk, pero entonces, ¿qué pasó?, sinceramente Joseph lo tenía claro y sentía culpa, por no haber protegido a alguien que en tan poco tiempo se volvió importante para él.

De los monstruos, Toriel, Asgore, Sans y Alphys se encontraban presentes, el resto de cercanos estaba ocupado y vendrían a penas pudiera, ya en camino o simplemente no se habían enterado del accidente. Los 4 eran consientes de que la caída fue provocada, ni a patadas se creerían lo de un tropiezo o resbalón, no si el infortunio era una imitación camuflada de casualidad, una simple y pobre imitación de lo sucedido a la hermana Loreto. 

Las cuencas del esqueleto se encontraban concentradas en el profesor Peres, quien hablaba con Toriel, sobre lo que debía hacer en un caso como este y demás, Alphys miraba a Sans, intentando descifrar lo que pensaba y Asgore miraba a sus dos hijos, quienes seguían en lo suyo.

Por otra parte, no sólo un inmenso dolor de cabeza atormentaba al intento de pacifista, si no también la angustia de encontrarse rodeada de un mar blanco, tan blanco e incluso más que la habitación que llevaba ese color por nombre, extrañamente se encontraba sola, el médico y las enfermeras se tuvieron que retirar por la repentina llegada de un paciente crítico, dejándola a pesar de las complicaciones que pudiesen surgir, pero hablamos de un hospital público, el ajustado presupuesto no permite la contratación de más personal, ¿verdad?

Como si volviera a ser una niña, entró en pánico, se levantó de golpe, sin embargo algo en su interior, algo más profundo y antiguo que su determinación la detuvo.

Su experiencia. 

Tal vez sólo era una infante la última vez que estuvo en una habitación de hospital, pero su cuerpo recordó bien que siempre una vía intravenosa la acompañó en sus estancias, así que sin más se miró el brazo, a poco y se hubiese sacado a la fuerza el catéter. Podría sacárselo sola, pero el riesgo de romperlo, infectarse o sufrir una embolia no lo valía.

Aún así, siempre existía su "determinación" para estos casos.

No tardó en sacárselo, se levantó haciendo presión en la zona alta de su antebrazo y simplemente buscó un pedazo de gasa entre los utensilios de la enfermera, cubriendo la zona. Se miró y vio que todavía llevaba el uniforme, recorrió con la vista el alrededor percatándose de que realmente la blancura que presenció eran cortinas, estaba en la sala de emergencias y recién se daba cuenta.

Irritada, salió de entre las cortinas, tambaleándose por un leve mareo, quería salir ya del albo lugar y nadie se lo iba a impedir.

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*Aparece con una escopeta en la mano* muere teoría *dispara*

#OKNo

Hola mundo. Pues he roto una teoría, y en el próximo capítulo romperé otra más, se los aseguro. Por otra parte, cabe aclarar que al final es la determinación quien está en control.

Y eso sería todo, hasta la próxima.