✎C A P I T U L O C U A T R O✎

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❝ NOTA ❞

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Cuatro años contados con dedos inocentemente.
La gentil de Jill me festejo por primera vez mi cumpleaños a escondidas de mi padre, invito a Pinkamena y a un niño que ahí era su amigo, ella me preparo un pastel (Si sigo vivo es porque no tenia nada defectuoso) hizo aparecer una velas que se contaban cuatro. También tuve mi primer regalo de cumpleaños y fue un peluche algo tétrico, pero que para mi aun tiene mucho significado sentimental.
Fue muy tierno de su parte festejarme aquel cumpleaños, porque descubrí la felicidad en ellos de alguna forma...

A mi padre en absoluto no le interesaban, al él mis años de vida le daban igual, solo los contaba esperando la perfecta edad para liberase de mi.
Lamentablemente para él a esa edad estaba lleno de energía de alguna forma y me volví más insoportable de lo normal. De pasar a estar llorando como imbécil comencé a tomar 'venganza' sobre mi progenitor.
Con una conciencia que de apoco se preparaba para brindarme recuerdos de buena cálida (porque aclaro que la mayoría de las cosas hasta esta edad las descubrí por fuentes como Jill, mi padre o incluso terceros) comencé a molestar a mi padre más de lo que podía hacerlo. Atrás de él cada vez que me ignoraba, pidiendo que me diera de comer o incluso me diera un abrazo cuando tenía miedo, pero él no pudo ser más frío conmigo cuando se lo proponía. Había días que yo me ponía tan impotente y molesto al no recibir esa atención que merecía que le gritaba cosas que, no sé si serán normales para un pobre niño de 4 años. Le decía algo como «¿¡Por qué no me mataste!?» «¡Quiero morirme!» «¡Quiero irme con mamá lejos de vos!» «¿¡Por que no puedo estar con Jill!? ¡Ella es mejor que vos!» tal vez lo último se me hacia más común en inconscientes palabras de un niño de, en ese entonces, cuatro años.

Jill me enseño a escribir a esa edad, supuso que como no iba a ir a convivir con más niños ni cosas por el estilo, decidió brindarme cierta educación que sorprendería a cualquier persona que se considera dentro del ámbito de normalidad, ya que ella aun así era asesina, pero como habré dicho ella detestaba más a adultos que a niños.
Para mi padre el hecho de que supiera tales cosas solo traerían más problemas a su vida, pero eso a Jill no le interesaba. Al parecer en mis momentos de infancia hice que Jill y Jack se llevaran tal vez peor de lo que alguna vez se llevaron, a ella ya le importaba poco mi padre, quiero decir que si alguna vez ella sintió amor por él fue la cosa más ridícula, absurda e ingenua que pudo haber sentido, llegando así a decir que mi madre biológica tuvo buenas razones para alejarse de él cuando se entero de mi...

A pesar de todo yo aun trataba de buscar el lado amable y dulce de mi padre, aun que pareciera estúpido lo hice por bastante tiempo. Aun buscaba apreció y cariño por su parte aun que solo recibía insultos y palabras que me lastimaban como niño que era.
Siempre trate de jugar con él, pero cuando aceptaba sus juego me hacían llorar... Prácticamente supe que era morir desde muy chico, aun que no de la forma más adecuada, quiero decir que no aprendí porque me contaron que un familiar falleció o una mascota querida o incluso un amigo, si no porque él traía niños los destripaba frente a mis inocentes ojos y luego me obligaba a ponerles dulces dentro de sus tripas mientras el pobre niño que, a veces eran de mi edad, agonizaba moribundo.

Siempre luego de esos 'Juegos' me desvelaba traumado y decía que escuchaba las voces gritando y pidiendo ayuda de aquellos niños, en otras palabras me sentía acosado por los espíritus de aquellos. Pero aun así buscaba a mi padre para que me consolara... Era tan insistente...
Al fin y al cabo los únicos que me consolaban, por más raro que suene, eran los proxys que aun supervisaban a mi padre, normalmente era Hoodie ya que a Toby no le agradaban los niños y Masky...él lo hacia debes en cuando, pero no era muy tolerante. Hoodie siempre decía que fue una lastima que me condenaran a tal vida con mi padre, pero que había sido una decisión de su jefe y no podían desobedecerle. Así que con esas palabras él se despedía y me dejaba solo con mi padre... Que siempre vigilaba desde lejos esperando a que ellos se larguen para volver a invitarme a jugar a esos 'Juegos'...

Clown (Laughing Jack)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora