C A P I T U L O ♦ 15

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Estaba bastante frustrado por lo de aquella discusión y no quería volver a casa, no sabiendo que él estaba ahí esperandome. Así que fui con Pinkamena, si realmente le dije que mi padre me ahuyentó, tiempo después de aquel día, aparte Jill me llevaba ahí a pasar el rato y pues le perdí un poco el miedo.

Toque la puerta de su hogar y ella me abrió tal vez con mala gana, hasta que noto que era yo.

-¿Jake? -Me miro confundida.

-¿No te molesta que me quede contigo? -Agache la cabeza un poco avergonzado.

-¿Y tu padre? -Pregunto.

-No quiero volver a casa con él, por hoy... -Segui mirando mis pies.

-Esta bien, mocoso. Pasa -Dijo y se abrió paso.

Le comente de la discusión y pues entendió que mi objetivo era dormir ahí, así que no pregunto y me hizo una cama improvisada.
Agradecí a Pinkamena por su paciencia, en la noche y me fui a dormir. Aun que no pase solo esa noche, estuve ahí hasta el cumpleaños de Jessica.

Luego de asistir Jill apareció preocupada por mi, preguntando donde me había metido.

-Estuve con Pinkamena todo este tiempo -Sonreí para que entendiera de que estaba a salvo por ahora.

-Eso es un alivio, pequeño, pero deberías volver a casa -Me miro nerviosa.

-¿Por qué? Si pudiera viviría solo, lejos de ese payaso estúpido -Gruñi un poco.

-Jake...es tu padre...y sabes que siempre estuvo bajo la amenaza de Slenderman... -Trato de convencerme.

-¡Si, porque el se lo busco, él se busco estar así! ¡Yo no hice nada más que tener paciencia con él! Y ya no quiero seguir... Jill por favor no me hagas volver, no con él. Puedo ir contigo, pero no con él.

Pero sin embargo regrese por mi cuenta, me termine comiendo la cabeza en la noche, pensando que tal vez se sentía solo o mal, aun que otra parte me decía lo contrario, volví...

-Hasta que te dignas a regresar -Escuche nuevamente a mi padre luego de un par de semanas.

-No hagas que me vuelva a ir, porque esta vez si que no volveré -Dije un poco molesto y fui a lo que era mi cuarto.

Nada había cambiado, todo era igual de apestoso y triste que siempre. Claro que no esperaría algún cambio de mi padre, al fin y al cabo siempre se ve viviendo en el pasado, supongo que la única vez que toco el futuro fue con mi madre o con alguna que otra mujer.
No había curiosidad absoluta respecto a lo que estuvo haciendo en mi ausencia, solo tenia ganas de irme de nuevo de aquel lugar que siempre me pareció un infierno desde pequeño.

La verdad suponía que ya era mayor para cuidar de mi, aparte Jill podía estar conmigo en cualquier caso, pero sin embargo él era celoso y posesivamente molesto cuando se trataba de que Jill quisiera cuidar de mi. Nunca entenderé el problema, el por que no, si bien me entere que apenas llegue a su vida quiso entregarme a Jill como si fuera un simple objeto al cual no tendría problema en regalárselo a cualquiera. Sin embargo se le dio vuelta la moneda y cuando ella me apreciaba, suplicando mi custodia al payaso, él simplemente se negaba receloso... ¿Qué me haría ella?

Cuestionandome en mi 'cama' se apareció de la nada Roma, es decir, mi padre. Sin decir nada simplemente me tiro aquel dije por el cual se había creado la anterior discusión.
Yo lo observe mientras tomaba el dije en mis manos y él solo se apoyo contra el mástil de la puerta, arrugando un poco el rostro molesto, pero note que iba a hablar tal vez sobre aquel dije.

—Mira, odio hablar respecto a esa parte de mi pasado, siempre odie hablar de mi pasado —Tal vez no era la primera vez, pero se sentía así, él me estaba hablando de forma normal e intentando buscar tranquilidad en sus palabras, eso era sorprendente —Pero supongo que si no te cuento ahora, entonces, seguirás molestándome con ese tema —Su mirada se notaba bastante seria para ser sincero, no parecía él, no estaba siendo el padre que yo conocía.

Aclaro su garganta y pidió si tenia alguna clase de objeción o pregunta antes de que comenzara su narración. Su voz ahora era gravemente suave y tranquila, estaba realmente extrañado que se dio cuenta de que no estaban entendiendo su comportamiento, pero no reclamo nada y volvió a preguntar lo mismo. Ahora si reaccione.

—Bueno...¿Por qué te molesta tanto que mencionen o hable de mamá? Si tu mismo la has tratado como si hubiera sido una maldita perra —Pregunte primero —¿Quién era? —Fue mi segunda pregunta y observe el dije para volver a la seria mirada de mi padre.

—Ella era...humana como el padre de tu 'amiga' —Bromeo un poco con lo de amiga, no podía faltar su esencia en sus narraciones —Y ese era el problema, nadie la aceptaba, nadie que fuera de nuestro mundo. Claramente yo tampoco por un tiempo, no puedo decirte quien era ella con certeza, sino como era cuando la conocí. Si la odiaban era porque especulaba mucho de nosotros y era una adulta joven que trabajaba en la policía. Pero el estúpido fui yo, cuando ella se estaba rindiendo para probar existencias como nosotros, quise presentarme y darle el susto de su vida, pero solo lo empeore... —Se cruzó de brazos y gurño entre dientes —...lo empeore tanto que me...me... Ahg ya sabes —Hizo un gesto hastiado con su brazo y mostrando pequeño sonrojo que me sorprendió ¿Padre sonrojado? Ahora si lo había visto todo —Conclusión que pase tiempo con ella, fue...divertido, se sentía bien, no era la primera vez, pero nunca estaba de más volverlo a intentar con gente nueva, de las nuevas épocas. Soy un loco asesino, pero te puedo decir que con todas las personas con las que he estado durante mis dos siglos de existencia, eran todas diferentes y por mas cursi que te suene, niño, eran únicas —Una leve sonrisa orgullosa se asomo en el rostro pálido de mi padre, esta me asustaba y sorprendía a la vez.

—Pero supongo que mamá fue más especial ¿no? —Comente sabiendo a lo que me refería y note una respuesta con la cara de pocos amigos que mi padre me presento.

—Que gracioso eres, imbécil —Contesto con hostilidad, pero retomo su anterior postura y siguió su narración —Pero es exactamente lo que dices, si no hubiera sido por ti, ella se quedaría con el resto de personas que pasaron por mi vida amorosa, personas que se fueron felices sin ninguna clase de crió que estorbara —Sonrio amargamente mirándome a mi —Pero bien, ella era bastante parecida a ti, hablando en aspectos psicológicos casi en un 50%, sin embargo siempre tuvo presente el hecho de quien era y en su mayoría de tiempo se mostraba a la defensiva, la única vez que bajo la guardia fue cuando terminaste en su óvulo, siendo nada, un extraño y misterioso nada. Que ni yo se como llegaste ahí —Arqueo una ceja y sus ojos miraron desconcertado a un punto recordando lo dicho —La cosa fue que...tu madre, como tantas otras personas con las que he vivido, querían un niño, pero parecía dispuesta a evitar tal cosa con tal de estar conmigo como aquella gente, pero no se quien de los dos se equivoco que ahora te tengo aquí en frente —Me apunto con desprecio, por lo que gruñi mientras fruncía un poco el ceño —Si tu, bestia horrenda. Así que tu madre se entero de ti y se marcho, dejándome con rabia y rencor tanto hacia ti como a ella. Decidí restarle importancia hasta que llegaste siendo un llorón y horrendo bebé humano a mis brazos y bajo amenaza de un ente sin cara —Saco la lengua disgustado, lo estaba haciendo a propósito para molestarme.

—¿Como te enteraste que mamá murió? —Cuestione y su mirada se volvió algo melancólica y molesta.

—Slenderman me lo anuncio cuando llegaste, eso hizo que me enojara y que hiciera un escandalo provocando que me quedara contigo... —Estaba diciendo eso con su mirar en en suelo, pero con aquella pausa algo dramática el me miro con oscuridad —...pero ¿Sabes porque me enoje? Si hubiera sido una muerte natural tal vez hubiera sido lo de menos, Jake... —Su voz cambio de nuevo, ahora era la que siempre oía de pequeño cuando me invitaba a 'jugar' o le hablaba a sus víctimas, comenzando a acercarse a mi rostro aun con ese mismo mirar —...¿Sabes por qué me molesta que tanto Jill como Slenderman hablen de ella?... —Yo negué algo nervioso ante el acercamiento intimidante de mi padre y él rió por lo bajo algo molesto —Porque ellos, mi querido hijo, la mataron... —Se alejo sonriente viendo como mi rostro se mezclaba ente la confusión y la ira.

—¡¿Qué?! ¡¿Qué carajos dices?! —Abri mis ojos confundido y queriendo una explicación inmediata a lo que acaba de decir —¡¿No lo estas diciendo porque ambos, sobre todo Jill, están conmigo?! ¡¿Verdad?! —Me levante de aquella cama para acercarme más a mi padre en busca de una desesperada respuesta.

—No, claro que no miento respecto a eso...Jake...

Clown (Laughing Jack)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora