MY WAY - (Carl Grimes)

✴Capítulo 27: En honor a nuestros héroes caídos.✴

Capítulo 27.
"En honor a nuestros héroes caídos."

Al salir de la ducha voy hacia mi habitación. Carl está acostado en mi cama mirando la foto de mi hermano y yo. Le sonrío y tomo el cepillo comenzando a quitar los nudos de mi cabello.

-Son bastante parecidos.-dice y sonrío más.

-Eres la primera persona que lo dice. Todo mundo decía que se parecía a mi madre.- y a mi me decían que era “cagada por mi padre” bueno, si lo vemos retorsidamente, si, fui cagada por mi propio padre, pero no quiero pensar en él ahora, hay quienes dicen que si piensas en cosas malas, las atraes.

-¿Cómo era ella? -pregunta con interés.

-Mmhmm, bueno, era atractiva, pero sencilla, muy sencilla. Prefería la vida de campo que la de ciudad, y siempre decía que mi hermano y yo éramos sus tesoros. Solía ser muy silenciosa, algunas veces aparecía en la habitación sin que nos percataramos de su presencia. Siempre fue vergonzosa, pero tenía su carácter cuando algo no le gustaba. Desprendía dulzura por los poros y todo lo que le rodeaba para ella era precioso, incluso si fueras una persona detestable, ella te consideraría valioso.- me encojo de hombros-. Creo que eso en vez de una virtud es un defecto, pero bueno… era así.

Carl me sonríe aún más.

-¿Y tú papá?

Suspiro con pesadez.

-De él no puedo decir lo mismo. Sólo te diré que era lo opuesto a mamá. Antes no entendía porqué estaban juntos, pero ahora lo comprendo. Él creía ver en ella lo que él nunca podría ser, y creyó que teniendola, se convertiría en alguien mejor, pero no fue así.- me giro lejos de Carl-. Él nunca fue digno de una familia.

Carl se levanta de la cama para venir hacia mí.

-Lo siento, no tocaré el tema otra vez.- besa mi mejilla.

-Eso suena bien, en serio no quiero recordarlo.

-Ven aquí.- toma mi cintura acercandome a él y besa mis labios.

-Debo ir a ver a Denise.

-Sí, lo sé… ¿quieres que te acompañe?

-No, no es necesario.

-¿Segura?

-Si.- me suelto de él y abro la puerta de la habitación.

-¿Has visto a Enid otra vez?

Me volteo hacia él frunciendo el ceño.

-¿Por qué preguntas eso?

Quiero decir: ¿Por qué preguntas por ella?

-Porque la última vez que se vieron, discutieron. ¿Por qué otra cosa lo haría? -dice confundido y niego con la cabeza quitándole importancia.

-No, no la he visto.

-Genial.

-¿Genial por qué o qué? -entrecierro mis ojos hacia él con sospecha.

-¡Alice! ¿Estás celosa?

-¿Yo? ¡¿Yo?! ¿Celosa? ¿De esa? - Me río con una risa que suena más a “¡JÁ JÁ!” irónico, que otra cosa-. Jamás.

-¡Oooooh! ¡Mi pastelito está celosa! -exclama con voz chillona y me alejo de él para esquivar un abrazo de oso.

-¡No lo estoy! -me quejo y corro hacia la sala para evitar que me abrace, ¡por supuesto que sí lo estoy! ¿Qué hace el nombre de esa en los labios que beso cada día? ¡eso sí que no!