MY WAY - (Carl Grimes)

✴Capítulo 23: Haz algo, ¿no ves que apenas respira?✴

Capítulo 23.
"Haz algo, ¿no ves que apenas respira?"

Abro los ojos sintiendo que la cabeza me pesa cien kilos, me cuesta mantener los ojos abiertos, como si los tuviera hinchados.

Estiro mi mano hacia la mesita que tengo al lado para tomar el vaso pero una mano la toma, me asusto y la saco rápidamente.

El rostro de Carl entra en mi campo de visión, tiene ojeras y no lleva el sombrero, su cabello está despeinado. Parece que no ha dormido nada. El me alcanza el vaso de agua, lo agarro y tomo todo el líquido. Miro hacia mi alrededor, estoy en la enfermería, hay una camilla a mi lado, en ella está Tara, sus ojos están cerrados.

A sus pies, sentado en una silla está Eugene, algo dormido. Cerca de Carl hay dos sillas más, una está vacía y en la otra está Abraham inclinado hacia adelante. Puedo ver a Daryl recostado contra la pared con los ojos cerrados, Michonne le hace compañía, imitando su postura.

Glenn y Maggie también están allí, observando hacia la ventana, abrazados.

Miro hacia mis piernas, una está tapada y la otra no, mostrando una gran venda con una que otra mancha de sangre.

Carl acaricia mi mano y la retiro, no quiero que me toquen. No ahora.

-¿Te sientes mejor? ¿Qué te duele?

Al escuchar la voz de Carl, todos se giran a verme, pero no los miro, sólo observo hacia la ventana.

-Entró en estado de shock.- anuncia una voz, pero tampoco me importa saber quién es -. No va a querer hablar, comer, tomar, o moverse de su posición hasta que supere el ataque de nervios que vivió.

¿Yo? ¿Está hablando de mí?

-¿Qué podemos hacer? No puede estar así.- dice Maggie.

-No se puede hacer nada. Le inyectaré vitaminas para que no pierda fuerzas, pero forzarla sólo lo empeorará.

-¡Haz algo, imbécil! ¡¿No ves que apenas está respirando?!

-¡Daryl!

Yo sólo quiero que se vayan, que dejen de hablar como si no estuviera aquí y que me dejen sola.

-Tara está despertando.- dice Eugene.

-¿Eugene? ¿Qué haces ahí? -susurra la voz de Tara-. Le diré a Noah que me estás molestando.

Ante la mención de su nombre, me giro hacia ella como si fuera un robot, la miro fijamente.

-¿Alice? ¿Estas bien? ¿Qué sucedió? -me dice, mirándome confundida.

Intento levantarme de la camilla, pero tengo tantos cables conectados que se me hace imposible. Los arranco todos, haciendo que me salga sangre de los agujeritos.

-¡Alice, no! ¡No te levantes!

-¡Espera, te harás daño!

-¡No dejen que se levante, se va a caer!

Me desconecto de todo, y me destapo por completo, llevo una de las remeras negras que tomé del almacén, y levanto la vista por inercia para ver si se las pusieron. Si, Maggie y Michonne la llevan puesta. Es un hermoso gesto, quiero decirles, pero la voz no sale.

Me levanto, me cuesta apoyar la pierna, pero lo hago. Carl intenta tomar mi brazo para detenerme pero golpeo su mano para que no lo haga. Camino lejos de ellos, sintiendo que caminan detrás de mí. Siento que mi corazón llora, pero mi rostro se mantiene intacto.

Empujo a Pete y abro la puerta de la enfermería, salgo de allí sintiendo la fresca brisa de la tarde. Me pregunto cuanto estuve dormida.

Camino por la calle de Alexandria, algún que otro miembro se detiene a verme y preguntarme qué me pasa, otro sólo me mira como si fuera loca. Pero no me importa, camino directo al portón, Sasha está haciendo guardia, miro hacia ella para que me abra pero niega, así que lo hago yo.