Deseada por Matt Bomer (Selena Gomez & Matt Bomer)

Capítulo 19.- Obsesionado.

———Selena———

Los días fueron pasando. Matt apenas aparecía por su casa, en la cual me había obligado a permanecer por un tiempo.

Todavía soñaba con aquella pistola apuntando mi cabeza pero ya lo llevaba muchísimo mejor.

Dakota había venido a visitarme, cuando se enteró de todo lo ocurrido llamó para ver cómo me encontraba, aunque de todas formas quiso verlo en persona.

Sentía cierta fobia a salir fuera, aun así consiguió convencerme para dar un paseo y tomar un café en la cafetería que yo solía frecuentar.

Ella me estaba contando qué es lo que había sido de su vida desde nuestro último encuentro cuando en mi teléfono móvil recibí una llamada de Matt.

-Selena, ¿dónde estás?-Sonaba claramente preocupado.

-Estoy dando una vuelta con Dakota.

-¿Y por qué no me avisaste de que ibas a salir? Me asusté.

-Matt, ni siquiera estabas en casa.

-Bueno...-Suspiró.-Tienes razón.

-Luego te veo.-Me despedí antes de colgar.

No iba a mentir, aquello me había molestado. Yo no tenía por qué pedir permiso para salir. Matthew estaba distinto desde que se obsesionó con ganar el juicio contra Jake.

Nunca pensé que llegaría a odiar al que una vez fue mi mejor amigo. La vida es más que inesperada.

Pasé el resto de la mañana charlando sin parar con Dakota, y me estaba sentando bien. Ella me hacía olvidar la situación en la que me encontraba, era agradable.

Me acompañó hasta la casa de Matt y se despidió asegurando que volveríamos a quedar pronto.

Entré y encontré a Matthew sentado en la mesa de la cocina con varios papeles entre las manos.

-Buenas cariño.-Me saludó.

Le sonreí y me acerqué para darle un beso.-Buenas.-Sonreí.

-Contraté unos guardaespaldas para cuando salgas por ahí.

Fruncí el ceño.-Matt, yo no quiero tener gente vigilándome todo el rato.

-Es por tu seguridad.

-Pero estás exagerando...

-Me da igual, ya lo decidí así que no voy a cambiar de idea.

-¿Decidiste algo por mí sin importar mi punto de vista?

-Sólo quiero lo mejor para ti.

-Lo que sea.-Dije con dejadez mientras sacaba de la nevera algunos alimentos para preparar la comida.

Después de comer teníamos planeado sentarnos juntos a ver una película, pero Matt recibió una llamada del trabajo y tuvo que marcharse de nuevo.
Perfecto.

Me pasé el día sola, viendo la televisión sin realmente ver lo que daban en esta. Más bien metida en mis pensamientos.

Fui interrumpida por una llamada entrante en mi teléfono móvil.

-¡Selena! Tengo unas ganas horribles de verte, ¿cómo llevas todo?-Sonó mi amiga Ashley.

-Bien, supongo.-Reí.

-¿Crees que podríamos quedar y dar una vuelta?

-Claro.-Dije animada por tener al fin algo que hacer y poder dejar de lado la soledad que llevaba en la casa.

-Me paso a por ti en media hora.

-Hasta luego, Ashley.

-Ahora te veo nena.-Rió.

Después de dejar mi teléfono móvil en la mesa, me dirigí al dormitorio en busca de algo que ponerme.
Opté por un top blanco con detalles plateados, unos pantalones cortos de tiro alto blancos y unas sandalias de tacón.

Justo como me había dicho, mi amiga estuvo llamando a la puerta media hora después.
Le abrí bastante contenta y ella se lanzó a abrazarme.

Tampoco ella era capaz de afrontar lo que Jake había hecho, pero ¿cómo iba a hacerlo?

Decidí no darle más vueltas al asunto y propuse ir de compras, sabía que eso le encantaba a Ashley.

•••

Poco tiempo después me arrepentí de la idea. Mi amiga me había llevado de un lado a otro sin dejarme un suspiro. Estaba realmente agotada y mis piernas se quejaban ante la idea de seguir caminando.

-¿Sabes? Podrías quedarte a dormir conmigo. La verdad es que te echo de menos.-Dijo mi amiga mientras revisaba todo lo que había comprado por si se diera el caso de que "necesitara" algo más.

-Estaría bien.-Dije sincera. La verdad es que yo también echaba de menos mi cama. Quizá necesitaba un poco de normalidad entre todo este asunto.

Antes de nada, tenía que volver a casa de Matthew para avisarle, por lo que Ashely me acompañó hasta allí y se quedó esperando fuera.

Cuando entré Matt acababa de salir de la ducha.-¿Dónde estabas?

-Fui con Ashley de compras.

-¿Y no te dije que quería que fueras a todos lados acompañada por los guardaespaldas que contraté?

-No pienso sentirme vigilada las veinticuatro horas del día Matt.-Le aseguré mientras metía en una mochila el pijama, el teléfono móvil con su cargador u otras cosas.

-¿A dónde piensas ir a estas horas?

-Esta noche me voy a dormir a mi casa con Ashley.

-Ni lo sueñes.

Fruncí el ceño.-¿Cómo que "ni lo sueñes"?

-Pues eso. De aquí no te vas.

-¿Se puede saber quién te crees que eres?-Me comencé a enervar.

-Tu novio.

-¡Exacto! Eres mi novio, no mi padre ni mi madre ni nadie que pueda darme órdenes. ¿Qué es lo que se te pasa por la cabeza Matthew? No eres el mismo.

Aquello pareció enfadarle.-¿Qué no soy el mismo?¡Estoy haciendo todo esto por ti Selena! Necesito saber que estás a salvo.

-Esto ya no es solo por mí. Te has obsesionado Matt...

Y le dejé allí, con la vista perdida sumido en sus pensamientos, cerrando la puerta de un portazo.