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Tyler estaba shockeado, él permanecía inmóvil sentado en el sofá.

—Me negué a ese favor que era acabar contigo, el problema es que Debby pago por no haber cumplido el favor. – informe.

—¿Que pasó con ella? – preguntó con voz ronca.

—Le dispararon, ahora debe estar en el hospital... solo espero que este bien, ahora me siento culpable por todo.

—Ellos me encontrarán, ya no sé a dónde ir, Josh. – dijo preocupado. – si me encuentran a mi, encuentran a Taissa.

—Todo esto es mi culpa, Tyler. – tome mi cabeza angustiado. Ambos nos quedamos en silencio con las miradas perdidas.

Debería acabar con todos ellos, debería mandar a cada uno al infierno, pero aparecen por todas partes, están en todos lados apareciéndote con armas y amenazándote de muerte.

—Josh, si yo muero...

Rápidamente interrumpí. —Tu no morirás, Tyler ¡No!

—Escúchame, Josh, si yo muero, Taissa quedará sola, ella no sabe nada de esto, sería mejor alertarla y que le digas todo.

—No, no... ella no me querrá ver más y si eso sucede ella se irá sola y e ahí donde la podrían atrapar.

—Maldicion, estamos todos jodidos. – murmuró.

Las escaleras comenzaron a crujir se oían pasos bajar, mire paranoico creyendo que era alguno de "ellos" pero era Taissa. Me levante del sofá para poder abrazarla.

—Josh... – sonrió. – Me alegra ver que esos policías no lograron atraparte.

La mire preocupado, ella tenía un moretón en su rostro, rápidamente mire a Tyler y después volví a dirigir mi vista a Taissa. —¿Que te sucedió en el rostro?

Ella suspiró pesado. —No pasó nada. – sonrío.

—Si, si pasó algo, Taissa, dime que sucedió.

—Mi padre... Mi padre me golpeó, solo fue eso, nada grave. – respondió con sonrisa apenada en el rostro.

Abracé a Taissa fuertemente, ella correspondió el abrazo escondiendo su rostro entre mi cuello. —Juro que cuando lo vea lo golpeare. – afirme.

Ella soltó una pequeña risa. –No es necesario. – murmuró.

Me alejé de ella unos centímetro para mirarla, mirar cada detalle de ella, cada detalle que me hace feliz, esa sonrisa, esos ojos. Solo quería estar con ella, poder dormir con ella como cuando vivíamos juntos, desayunar, almorzar junto a Taissa era lo único que pedía en este instante, pero tenía que sacar a Taissa y a Tyler de aquí. —Taissa, necesito que salgas de aquí. - advertí

Ella me miró confusa. –¿Por que, josh? Primero Tyler me saca de mi apartamento y ahora tú me quieres sacar de casa de Tyler. ¿que está sucediendo? Pedo notar en tu rostro que algo sucede.

Ella es muy astuta, es increíble cómo logra percibir algo. –Solo confía en mi ¿aún confías en mi?

—Claro que si, Josh.

—Entonces tú y Tyler tienen que salir de aquí.

Tyler se levanto del sofá aún medio shockeado con todo esto. –¿A dónde iremos, Josh? Yo ya no tengo más lugares en donde podamos alojarnos.

—Aún no entiendo porque debemos salir de aquí. – expresó taissa. – Es como si estuviéramos huyendo de algo.

—No es así. – mentí.

—Pero eso parece, Josh.

Todo quedo en silencio sumido en la angustia, nuestros rostros solo expresaban preocupación y duda.
Tyler comenzó a caminar de un lado a otro perdiendo su cordura poco a poco, él mordía sus uñas constantemente. Taissa no entendía nada pero lo podía sospechar en cualquier momento, sus preguntas pronto serían frecuentes  y yo no sabría cómo responder a cada una. Yo aún estaba parado en el mismo lugar observando a ambos, sin saber que hacer, sin saber a dónde huir, sin saber a dónde llevarlos para que estén protegidos. Todo esto comenzaba a perder el control, si no hago algo pronto ellos ya no estarían más en este mundo.

Todo aquel silencio comenzó a hacer interrumpido por el ruido de una bocina que se oía afuera de la casa. Me asomé por la ventana para observar, era Alex quien insistía en que saliera de la casa. Me tome un minuto para pensar, mire a Taissa, el gran amor de mi vida ¿La dejaría sola con todo lo que está sucediendo? Además mi mejor amigo, mi hermano, no podía dejar a ninguno solo sin embargo yo no puedo permanecer mucho en el lugar, el padre de Taissa en cualquier momento aparecería y me encerraría  de nuevo en la carcel quitándome la oportunidad de proteger a su hija.

—Ya vuelo. – dije mientras salía de casa.

Alex al verme bajo el vidrio del auto dejando al descubierto su rostro.
—¿Que pasa colorín? – preguntó al ver mi rostro.

—Estoy perdido, alex, no se a donde llevar a Taissa ni a Tyler, y yo solo quiero estar con ella.

—Amigo, ¿Te puedo ser honesto? – interrumpió brendon. – Si estas perdido y no sabes que hacer, lo único que puedes hacer ahora  es pasar tiempo con esa chica que tanto amas. No puedes pasar toda tu vida escondiéndola y menos si estás prófugo y escapando de esos matones, Josh... lamento decirlo pero no tienes salida alguna.

Sus palabras daban vueltas por mi cabeza, él es frío pero es honesto y tiene razón, estoy jodidamente perdido.

—Me quedaré con Taissa unos días, ustedes pueden marcharse y esconderse sin mi, yo solo soy un estorbo, chicos.

Alex bajo del auto cerrando la puerta fuertemente. —¿Crees que te dejare solo? ¡no! ¡no te dejaré solo con todo esto!.

—No sabes lo mucho que te agradezco, Alex... pero brendon tiene razón, ahora debería estar con Taissa.

—¡Ignora a Brendon! No te dejaré solo. Te ayudaré a esconder a tu amigo, estaré con él... Cuenta conmigo para eso.

—Sería un fugado más, yo no quiero eso para Tyler.

—Pero estaría más seguro con nosotros que estando solo ¿No crees?, mira tal vez el auto sea chico pero conseguimos otro más grande y nos vamos todos de este maldito lugar, empiezas una nueva vida con tu chica, anda Josh.

—¿Estas seguro de eso, alex? – cuestionó Brendon. – No demorarán en encontrarlo.

—¿Tu como lo sabes? – pregunté curioso. – Cada vez que dices algo así ellos aparecen, Brendon, no me hagas dudar de ti y de tu presencia ¿Está bien?

Él asintió molesto y no dijo ninguna palabra más. — y bien ¿Te arriesgaras a tomar a tu chica y a tu amigo para sacarlos de aquí? – preguntó alex.

—No tengo otra opción, alex.

Él me abrazo fuertemente por haber tomado la decisión correcta según él y Brendon, su actitud seria y silenciosa era intacta no dijo ninguna palabra al respecto.

Entre nuevamente a la casa, Taissa y Tyler estaban sentados en el sofá mudos. Tyler al verme entrar rápidamente se levanto esperanzado.
—Tyler, Vamos a salir de aquí, necesito que hagan sus maletas y lleven todo lo importante, en menos de una hora nosotros ya no debemos estar aquí.

—Esta bien, bien. – Tyler estaba exaltado, él hubiese aceptado cualquier propuesta para poder estar a salvo con Taissa.

Me acerqué a Taissa lentamente mientras Tyler arreglaba sus cosas.
—Tu irás conmigo, ya no te alejare de mi lado. – ella hundió su rostro entre sus manos luego volvió su mirada a mis ojos suspirando pesado.

—Mi padre me había dicho que eras un asesino, yo por supuesto que no le creí... pero te veo huyendo, quieres irte lejos, pero tú no solo estás huyendo de la policía... estás huyendo de algo más, Josh, dime la verdad ¿Que está pasando?

Forgive Me|| Josh dun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora