XXIII: Nombre clave.

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CAPÍTULO 23

Junio 15.

La marea subía y bajaba, pero la temperatura solamente subía, estaban entrando en pleno verano y cada día era más caluroso que el anterior. Harry cargó a Jackie en su espalda mientras ella protestaba, corrió por la orilla de la playa cuando de pronto se tropezó y los dos cayeron al agua.

—¡Mi pierna! —Gritó Jackie, fingiendo dolor.

—Mentirosa, tu pierna ya está curada—Le dijo él levantándose primero—Y ahora por mentirosa, sufrirás las consecuencias...

—¿Qué...? —Jackie se interrumpió a sí misma al comenzar a reír, debido a que él le había empezado a hacer cosquillas—¡Por favor, para!

—No, pequeña mentirosa—Rio él.

Ella era la persona más risueña del mundo hablando de cosquillas, entonces como ya no podía resistir más, tomó el rosto de Harry y le dio un pequeño beso, acción que hizo que parara y que se quedara atontado.

—Siempre funciona—Dijo Jackie riéndose mientras se levantaba para escapar.

Pero él fue más rápido y alcanzó a tomarla de la mano, ella se regresó por el tirón y cayó al lado de él. Sus labios se unieron de nuevo, era un beso muy salado y la arena les calaba en los ojos, pero eso no los detuvo.

Harry nunca había experimentado una sensación así, sentía una necesidad inentendible dentro de él. Que ella tocara su rostro mientras se besaban era un gesto que a él le fascinaba.

Pero fueron interrumpidos, como siempre, cuando Chris llegó diciendo que se había caído de un árbol.

Harry bufó molesto, pero se tranquilizó, porque le había prometido a Jackie que ahora sí controlaría su temperamento, Chris era solamente un niño y necesitaba atención.

—¿Cómo que de un árbol? ¿Qué hacías arriba de un árbol? —Preguntó ella preocupada mientras se levantaba de la arena.

—Quería agarrar un mango—Dijo él.

—Nos lo hubieras pedido—Le dijo Harry.

—Estaban muy ocupados—Dijo Chris y los dos se sonrojaron.

—¿No te pasó nada? —Le preguntó ella.

—Solamente me duele el pie—Dijo él.

—Bueno solo tendrás que descansar, ahora vamos a desayunar, vamos Harry.

* * *

—Tú te pareces a mi mamá—Dijo Chris mientras mordía su mango—Ella también es muy cariñosa y se preocupaba por mí, de hecho, ha de estar muy preocupada porque nunca pudimos volver.

—Vas a volver, ya lo verás—Le dijo Jackie sin saber qué decir respecto a que la comparaba con su madre.

—Y tú no te pareces a mi padre—Dijo Chris volteando a mirar a Harry—Él era más valiente.

—Y por eso lo devoró una pantera ¿no? —Preguntó él.

—Harry...

—Él empezó—Se quejó.

—Ninguno de los dos tiene que estar diciéndose nada—Dijo Jackie y siguieron comiendo.

Después de un rato, Chris se fue a jugar a la orilla con la arena, mientras Harry se reía porque no le salían los castillos.

—A mí tampoco me salen—Dijo Jackie.

—También me burlo de ti—Dijo Harry con una sonrisa divertida.

Marine HavocsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora