¡No Somos Novios! [Cameron Boyce y Tú]

Capítulo 47.

—Yo...

Chris y Cameron me observaban espectantes. Hace una hora hubiese dicho “¡Yey, solo falta un día para que Cameron y yo volvamos a ser novios!”. Pero ahora, con la llegada de Chris y todos esos sentimientos olvidados que volvieron a mí, no pienso lo mismo. Estaba Chris, que fue mi primer amor de niña y mi mejor amigo por más de nueve años; y estaba Cameron, el nuevo mejor amigo (con el cual llevo una amistad desde los 11), mi primer novio y el chico de quien estoy enamorada ahora. Pero, al ver a Chris, ya no sabía qué pensar.

¿Y aun así quieren que elija?

Tenia a dos de los chicos más importantes en mi vida frente a mí, esperando una respuesta que no salia de mi boca.

—Es para no causar problemas, hermana —me interrumpió Jake—. Te das un tiempo para pensar mejor las cosas...

—O eliges volver a ser novios —finalizó Cameron—. Pero no hay presión. Si tengo que pelear por ti, lo haré.

—Igualmente yo —declaró Chris y lo miré—. ¿Que? ¿Quieres que te lo grite? Si, si estoy enamorado. Jamás dejé de estarlo.

Sentí una extraña sensación de reír, pero decidí reprimirla. Cameron lo miró por unos segundos, para luego volver a mí.

—Ya lo oíste. Tienes a dos tipos enamorados de ti —suspiró, como si dijese «Raios»—. Creo también que tu cabeza está hecha un remolino, así que mejor elige darnos un tiempo.

Pestañeé, viéndolo incrédula.

—¿Estas diciendo que elija que terminemos oficialmente?

—No te veo afligida por el hecho —respondió como si nada, aunque sabia que por dentro quería morirse. Bajé la cabeza en respuesta—. ¿Ves? Calamar, te conozco. Mejor elige la primera y tiremos la moneda a ver qué cae. Es mejor para ti.

—Y si en algo estamos de acuerdo éste y yo, es que queremos lo mejor para ti. ¿O me equivoco? —Chris miró a Cam.

Él negó con la cabeza.

—Por algo estamos aquí, ¿no? —respondió.

Genial, tengo que elegir. Quedarme de novia con Cam o darle una oportunidad a ambos para conquistarme. Viéndolo así, suena estúpido; ¿elegir que dos chicos se peleen por mi amor? Es que no quiero lastimar a ninguno con la decisión que tome en un futuro.

Me siento Bella de Crepúsculo, we. Tan mal estoy.

Pero siendo sinceros, ¿qué quiero yo? Decir que les daré una oportunidad a ambos tiene sus pros y contras. Por ejemplo, hacer eso significaría que los dos, Chris y Cameron, tienen una oportunidad de conquistarme. Pero eso significaría que todo por lo que Cameron luchó por ser mi novio, se tiraría al retrete de no elegirlo a él. Y lo mismo pasaría con Chris, ya que él tampoco se olvidó de mí e imagino que estar separado de tu primer amor por muchísimos kilómetros, no saber si éste tiene novio o no, o que si tan siquiera te recuerda (algo que yo no hice) no ha de ser fácil.

Además, ¿competir ellos para ganar mi amor? Que estupidez. No soy un premio y mi amor tampoco. Si quieren competir, los mando al coliseo en Roma para que se masacren entre ellos mismos. De resto, no quiero que luchen. Eso sería muy cliché.

Los encaré.

—¿Les digo qué es lo que vamos a hacer?

—¿Que? —los tres (Jake, Jake, Jake, sal de aquí, Jake) dieron un respingo al escuchar mi voz.

Al parecer ya me daban por muerta y decidieron hablar entre ellos, pero los sorprendí cuando hablé en ese tono.

Miré a cada uno de ellos y me detuve en Cameron y Chris, que estaban uno al lado del otro, frente a mí.