Ladrón enamorado

Un problema tras otro

- Tenemos un problema- Anuncio con seriedad el mayor de los hermanos ante la mirada atenta de los otros.

- Lo mataron... - declaro Choromatsu con pánico y absteniéndose de gritar - lo sospechaba... Fue Ichi, ¿Verdad? -

- Ichi siempre ha sido tan sombrío que no me sorprende - hablo esta vez Totty con un rostro de terror.

- ¿Qué dicen? - Kara les miraba confundido - no, no matamos a nadie, lo dejamos inconsciente solamente - los otros dos hermanos suspiraron aliviados.

- ¿Y por qué asumen que yo mataría? - pregunto Ichimatsu ofendido y con una mirada fría.

Los tres hermanos le esquivaron la mirada evitando responder.

- Kara... - Choro retomo la conversación - ¿Cuál es el problema? -

- Jyushimatsu está encerrado en una pequeña bodega detrás del almacén, sólo le custodian dos tipos -

- Eso es bueno - se alegró Choromatsu - será fácil rescatarlo -

- ... ¿Qué hay de Osomatsu? - pregunto Totty temeroso de la respuesta.

- Ese es el problema... - Kara parecía realmente preocupado - el lugar donde lo tienen no es de fácil acceso... - se acercó a la ventana seguido de sus hermanos - en donde está el sofá, el pilar que está detrás... - los otros ubicaron el lugar rápidamente, Tougo seguía en el mueble aun con una cerveza y ahora también con un puro en la otra mano - Osomatsu está atado en ese pilar... -

Volvieron a esconderse, ahora entendían el problema, ¿Cómo podrían sacar a Oso si prácticamente estaba en el centro de todos esos maleantes? ¿Debían ir por su hermano y llamar a la policía?

- ¿Cuál es el plan? - Ichimatsu rompió el silencio.

- Lo principal es Jyushi... - Kara agachó la mirada sintiendo un nudo en la garganta.

- ¿Insinúas que lo abandonemos? - Totty pregunto refiriéndose a aquel joven ladrón, después de todo él lo salvo.

- Se los dije antes, no quiero involucrarlos en algo peligroso... Pero, tampoco puedo dejarlo... Yo amo a mis hermanos pero Osomatsu, también tiene un lugar importante en mi vida... Aunque sea un criminal... - Karamatsu no podía mirar a sus hermanos, admitir algo tan importante en un momento como este era un golpe de emociones. Después de todo, no sabía nada del pasado de aquel ladrón, ni la relación que este tenía con ese hombre y hasta donde había notado sus hermanos no lo apreciaban.

- Detesto romper el momento cursi - Ichi se colocó de pie cuidando de no estar cerca de la ventana - pero eso deberías decírselo a Osomatsu, no a nosotros... - se sonrojo un poco, ni loco diría que por un par de horas de convivencia el ladronzuelo ya le agradaba, aunque tal vez sólo fue el hecho de que le consiguió aquel gato de peluche.

- Ichi... - Kara le miro enternecido entendiendo que aprobaba una posible relación.

- Ichimatsu niisan tiene razón - Totty le sonreía al mayor - además, le debo una por salvarme - el menor estaba dispuesto a pagar su deuda a la vez que ansiaba tener otra oportunidad para fastidiar a Oso, realmente eso le divertía.

- Gracias chicos - Kara sonrió al contar con sus hermanos, se giró a ver a Choro quien parecía indeciso.

- Sigo pensando que no es más que un maldito pervertido, un ladrón tal cual que no tiene nada de bueno... Pero, también intento salvarnos, supongo que es justo regresarle el favor - en efecto aun no confiaba en el ladrón, pero fuera del incidente en el callejón no había dado señas de querer dañar a su familia.