"La Mayor Prueba de Mi Amor"

Capítulo Tercero

Pasaron los días, llegó el viernes y la fiesta de Cassandra, Victoriano se mostraba tenso, los problemas de la oficina sumado al hecho que Inés lo rechazaba en las noches con cualquier pretexto. Se estaba anudando la corbata cuando su esposa salio del vestier sosteniendo su vestido a medio poner. 

- ¿Puedes subirme la cremallera por favor? - Le mostró la espalda, Victoriano pasó su mano por la espalda descubierta y posó sus labios en el cuello de Inés. Ella gimió y Victoriano se excitó velozmente, la apretó contra el, haciéndole sentir su erección, 

- No deberíamos ir. Quiero quedarme y hacerte el amor. 

- ¿Vas a llamar tu a Cassandra? - Inés se oía excitada y Victoriano maldijo al saber que era un compromiso ineludible. Suspiró y subió la cremallera. Inés se devolvió al vestier. 

Llegaron a la hacienda Las Dianas, la fiesta había comenzado, Victoriano caminaba tomado de la mano de Inés y sintió como ella apretaba su mano, volteó a verla y la vio palidecer un momento. Siguió su mirada y vio a Diana María acercarse a ellos con una sonrisa. 

- Hola, que bueno que vinieron, Victoriano ¿cómo estas? 

- Bien, ¿y tu Luna? - Así le decía Victoriano de cariño e Inés sonrió forzosamente. 

- Excelente, y tu Inés... ¿cómo has estado? - Diana María se acercó y beso a Inés en la mejilla. 

- Estoy bien gracias, linda decoración. 

- Sabes como es tu hija - Eso lo dijo sonriendo pero su mirada viajó a Victoriano. Inés pensó, esta claro que aun lo ama. Se mordió los labios y forzó desviar su mirada para que ni Victoriano ni Diana María pudieran percatarse del dolor que le causaba ser sólo la segunda en la vida de Victoriano. 

- Por cierto, ¿dónde está?

- Está con sus amigos, pero por favor, pasen adelante, tomen algo... ¿Un Tekila Victoriano? ¿Como siempre? 

- Si, gracias. 

- ¿Y tu Inés? 

- Un... Un coctel gracias. - Victoriano miró a Su esposa porque su voz se mostraba tensa. Diana María se fue a buscar las bebidas. 

- ¿Ocurre algo mi vida!?

- No. Para nada, ¿por qué no vamos a buscar a Cassandra para felicitarla?

- Esta bien, vamos - Victoriano volvió a tomarla de la mano y recorrieron la fiesta, se encontraron a Cassandra con un grupo de amigos. 

- Buenas noches...

- Papá..- Cassandra se lanzó a los brazos de su padre y el riendo la beso y abrazó. 

- Feliz cumpleaños princesa, ¿cómo estas? 

- Ahora mejor que sé que viniste.

- No me lo perdería por nada 

- Hola Cassandra, Feliz cumpleaños - Inés le sonreía y extendía una caja de regalos para ella. Cassandra la miró fijamente y tomó el regalo. 

- Gracias... - Se dio la vuelta y miró a su padre, dando la espalda a Inés- te presento a unos amigos. 

Cassandra hizo las debidas presentaciones. Mientras Inés recorría con la mirada la fiesta. Observó a Diana María quien traía las bebidas que les había ofrecido, fue abordada por una pareja, conversaba y reía amenamente, era una mujer hermosa, siempre lo había sido. Cuando estudiaban juntas en el colegio, era la chica mas popular, y todos los chicos estaban pendientes de cada movimiento suyo, incluido Victoriano. Por eso se casó con ella. Inés no podía creer que Victoriano la hubiese dejado. Y que luego se hubiese casado con ella. Diana María aún lo amaba, y ver la amistad que aun se tenían, hacía que se preguntara si lo que hubo entre ellos realmente había terminado. Inés sacudió la cabeza, estaba loca, claro que habían terminado, Victoriano era su esposo. Y él la amaba... Ella lo amaba más que a su vida, y por eso quería con fervor darle un hijo.