"La Mayor Prueba de Mi Amor"

Capítulo Decimoctavo

Cassandra tuvo su bebé unos días después, y Victoriano la acompañó en cada momento, sufriendo cada momento, aunque el parto de Inés había sido preocupante por lo prematuro, la rapidez con la que había sucedido y lo asustado que estaba, no le había dado chance de procesar la magnitud del trabajo de una madre. El bebé de Cassandra, su nieto había torturado a su madre durante  nueve horas de trabajo de parto, el tomándole la mano a su hija le dijo al oído. 

- Debiste aceptar la anestesia querida. - Cassandra respondió riéndose y soltando un grito de dolor que terminó por traer al mundo a Víctor Manuel. Cuando lo pusieron al pecho de su madre, succionó y Cassandra lloró de emoción, y Victoriano no pudo mas que soltar una lágrima al ver que su pequeña ahora era mamá. Cargó en brazos a su nieto y lo besó en la frente. - Todo un Santos

Cassandra agotada por el esfuerzo solo asintió y sonrió a su padre. Esa noche Inés había regresado a la Finca Santos, ya recostados en su cama matrimonial, después de dar de comer a sus gemelos, ella lo abrazó y el se recostó sobre ella. 

- Definitivamente es una Santos 

- ¿Cassandra? 

- Así es!... La hubieses visto, estoy tan orgulloso de ella. Aunque quise matar al medico en más de una ocasión, mira que dejar que mi muchacha sufriera todo eso. 

- ¡Pobre Casandra! Menos mal que los gemelos eran pequeños. Aunque igualmente fue doloroso creeme

- Lo sé... Admiro a las mujeres. 

- Ustedes los hombres son unos cobardes. - El acarició su vientre y se dio cuenta de un detalle que había pasado por alto. Se levantó rápidamente y miró alarmado a Inés. 

- Ines... No usé preservativo la noche pasada cuando hicimos el amor. - Inés palideció sin embargo recordó que el medico había hablado que la lactancia materna figuraba como anticonceptivo. 

- Creo que el hecho de que esté lactando puede protegerme... Pero no puede volver a ocurrir Victoriano, no puedo tener un bebé otra vez. 

- Lo sé... Lo sé... Te prometo ser mas cuidadoso. Amo verte embarazada, pero no quiero que te pase nada, así que no creo que soporte verte de nuevo sufrir por un parto. Esa noche no podía pensar más que en tenerte, pero haré lo posible por cuidarte.. - Él la besó suavemente y metió sus manos bajo la pijama. Ella lo sostuvo. 

- ¿Tienes preservativos? 

- Mujer... Tuve meses de abstinencia, ¿por qué iba a tenerlos? 

- Entonces deja tus manos quietas. - las sacó con desgana y trató de desviar su atención, sino terminaría embarazando a su mujer otra vez. - ¿Has averiguado algo del fraude? 

- No... Pero ahora se añade otra preocupación a mi lista. 

- ¿De qué se trata.? 

- Diana Elisa... - Inés se tensó y el lo notó. - Quiere hacerse cargo de sus acciones. 

- ¿Diana Elisa? Pero si nunca ha tenido el menor indicio de interés. 

- A eso me refiero con mi preocupación ... Vicente y ella están saliendo. - Inés levantó la ceja - No estoy muy seguro de que eso esté bien, Diana María hasta hace poco estaba seduciendome. 

Inés se levantó de la cama y se asomó a las cunas de sus hijos. Victoriano se dio cuenta que estaba disgustada. Se levanto y pasó sus manos por sus brazos. 

- Eh ... ¿Qué sucede? ¿Estas bien? 

- No quiero que estés cerca de ella... Me muero de celos - el la volteó y le miró los labios