-Høla. Mi nømbre es Tyler Jøseph, un chicø tøtalmente cømún y cørriente, atrapadø entre mi sueñø de ser músicø, mi familia, mis inseguridades y miedøs. Sufrø de depresiønes cønstantes øriginadas pør la vøz en mi cabeza, que le da vida a mis peøres d...
Me encontraba conduciendo con mi radio a todo volumen, rumbo a la universidad de Robinhood, la cual estaba al otro extremo de la ciudad a 3 horas y media de mi hogar. Tuve suerte que no estuviera tan lejos como imaginaba hace unos años que sería el irme a estudiar, algo como tener que viajar a otro estado o hasta irme del país. Doy gracias al cielo que por lo menos en vacaciones de verano y en invierno podré ir a ver a mi familia.
El auto era un Mustang '67 usado que mis padres habían ahorrado para poder regalarme en mi cumpleaños número 19, mis hermanos colaboraron en darme un hermoso radio. Desde que tengo el auto, me he desahogado conduciendo para matar el tiempo y mis pensamientos junto con la música que sonaba sin parar. Creo que a sido una retribución positiva, Blurryface no me molestaba mientras lo hacia y ni qué decirles, lo disfrutaba.
Estaba escuchando un poco de música variada. En ese momento, My Chemical Romance con su canción ''Cáncer'' comenzó y no pude evitar cantarla al instante. Esa melodía, cuando la escuché por primera vez me trajo un enorme sentimiento de empatía, a pesar de no tener ni la menor idea de lo que es padecer de esa enfermedad, pero sí, me tocó; alguna vez me gustaría hacer un buen cover de ellos, algún día. Mientras el radio sonaba, comencé a imaginar cómo serían mis primeros días en la universidad, cómo sería tocar en el estudio de música de ahí y hasta cómo sería la gente que conocería. Tal vez sí me emocionaba un poco vivir una nueva experiencia, aunque también había un poco de temor tras ello.
Sin darme cuenta había llegado. Estaba tan sumergido en el ambiente que creé que no me había percatado que ya estaba en los terrenos de lo que sería la nueva etapa en mi vida. Veía por las ventanas a los chicos que estaban caminando por las aceras en el campus, los que estaban estudiando sentados en el pasto, los típicos tipos en sus skates y también los que se encontraban con los audífonos puestos. Se veía genial, algo parecido a lo que imaginaba. Estacioné mi auto en el estacionamiento privado para los alumnos y me dirigí a la dirección para preguntar por la información de dónde me quedaría y pedir las llaves de mi habitación, solamente espero que los que vayan a ser mis compañeros de cuarto sean buenas personas y no vayan a hartarse de escucharme practicar en mi viejo piano y tocar hasta el cansancio el ukelele. Me acerqué con algo de inseguridad a la recepcionista de la oficina quien acababa de colgar el teléfono.
- Buenas tardes, Soy Tyler Joseph -dije con una voz un poco temblorosa mientras entregaba los papeles- Vengo por el mapa y las llaves de mi habitación.
- Bienvenido, señor Joseph- dice con una gran sonrisa mientras revisaba mi documento- ¿está algo nervioso, no? Tranquilo, siempre pasa en la primera vez que se llega a la universidad, no se preocupe. Sé que le encantará, y mire lo que tenemos aquí.. ¡Le toca en la habitación D-13 con dos chicos geniales! - entregándome el mapa del lugar y las llaves - le deseo suerte y espero que tus compañeros te ayuden a adaptarte rápidamente.
- Gracias, señorita. Espero sea así.
Me guié por el mapa para poder llegar al edificio donde quedaba mi habitación, no quería pedirle direcciones a nadie y sólo rogaba al universo porque no me perdiera. Entré y subí por el elevador al piso D, y caminé hasta la puerta que tenía el número 13. Tomé un gran bocado de aire y me armé me valor a mi mismo para finalmente tocar la puerta.
- ¿Quién es?- dijo una voz algo ronca detrás de la pared.
- Hay por favor Salih, ni que nos fueran a asaltar- de repente quien dijo esa última oración sarcástica abrió súbitamente la puerta antes de que tan siquiera yo hubiera podido contestar.
- ¡¿Tyler?! -dijeron al unísono los dos chicos.
-¡Thomas! ¡Salih! Rayos, ésto no me lo esperaba.
- Nosotros menos, ven aquí 'smol bean' -Nos abrazamos rápidamente y entramos a la habitación.
- Así que el pequeño Tyler es nuestro nuevo compañero de cuarto. Es para celebrar el volverte a ver. -dice mientras despeinaba mi cabello como solía hacerlo siempre en secundaria el sobre protector Thomas.
- Menos mal, estábamos rogando que no fuera un tipo raro que nos tocara.. Bueno, al menos es un tipo raro que conocemos.
- No nos vemos desde que te mudaste y cambiaste de escuela Ty, ¡La pandilla unida de nuevo!
- Los eché de menos ¿Cómo rayos hicieron para quedar juntos?
- Nuestros padres tuvieron que sobornar a la rectora de habitaciones para que nos dejaran juntos- dijo entre risas Salih mientras tomaba una soda de la pequeña refrigeradora que tenían ahí.
- Shhh, no hables de nuestras corrupciones así, Salih. Jajaja, pero ciertamente fue así - aventándome una soda a mi también y abriendo una para sí mismo.
- Tomé un sorbo de soda- Ustedes dos.. Siempre me sorprenden.
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