Mi teléfono móvil estaba petado con mensajes de "Porque no fuiste" o "Te perdiste un buen conciertazo, que lastima" o "No puedo odiarte porque no soy así, pero me hubiese gustado verte en nuestro concierto" y otros más de ese tipo, lo más raro de todo es que no tenía nada de Blas y de Dani. Enciendo un rato mi reproductor de música, así me relajo y dejo de pensar en ese tema cuándo de pronto se detiene la canción y suena el tono de llamada.
—Hola, ¿Sofi?
Escucho su voz transmitiéndome una pequeña emoción a mi estómago, ¿qué hacía hablándome?
—S-si, soy yo.
¿Porque tartamudeo?
—¿Podemos vernos? -dice a través de la línea.
—¿Pasa algo? Te escucho raro, ¿todo bien? -pregunto con cierto temor de saber la respuesta.
—Si. -dice y puedo seguir respirando con normalidad. —es sólo que no puedo decirte esto por teléfono. Te veo en mi casa.
Y cuelga así, dejando dudas en mi mente. Sin pensar dos veces, me visto encima de mi blusón largo un abrigo de color negro que llega a mis rodillas, me calzo unos botines con tacón y mi bolso.
—¿A dónde vas? -Ela desde su habitación me ve y respondo con prisas.
—Al rato vengo.
Salgo disparada a casa de Dani, cualquier cosa que sea debe de ser importante o me estaba tirando una broma porque no estaba para esas cosas y menos de mi ex. Es la primera vez que tengo una llamada de él después de todo lo ocurrido, estoy un poco nerviosa y no por el simple hecho de que quiere que vaya sino porque hablaremos por primera vez después de días, voy a verlo.
¿Estaba haciendo lo correcto? ¿Estaba bien correr tras su llamada? Tenía preguntas divagando por mi cabeza. El bus camina lento, y no sé si seguir andando o quedarme aquí que está calentito en el bus pero a la vez tengo pereza de caminar. Por fin para y yo bajo para andar unas cuantas calles para llegar y tocar el timbre una vez. Siento como si hubiera corrido mucho tiempo pero no, es que estoy muy nerviosa por verlo de nuevo y mi corazón late cada vez más fuerte. No podía volver atrás. Justo cuándo iba a volver a tocar el timbre, Dani abre la puerta. No sé si saludarlo con un beso en la mejilla o un abrazo. ¿Qué es mejor?
—Pasa. -dice en un pequeño murmuro. Antes de entrar a su casa que antes también fue mi hogar un beso en mi mejilla es suficiente para saber que a pesar de todo, seguiremos siendo aquellos amigos como lo fuimos desde un principio.
Mientras más paso el tiempo aquí ya no siento mis nervios como los de antes. Parece ser que antes de que yo llegara, estaba tocando la guitarra, sobre la mesita hay unas cuántas hojas con letras y algunos borrones en ellas, como si estuviera componiendo algo nuevo.
—Me gusta tu camiseta. -digo después de haber visto lo suficiente aquellas hojas.
¿Es que no tenias algo mejor que decirle?
Su camiseta es gris, con botones en el cuello y de manga larga, hacía frío afuera pero aquí estaba calentito.
—Tu me la regalaste. -responde mordiéndose los labios.
—Bueno dime por que vine seré sincera, me asustaste un poco cuándo me hablaste. -me da la risa tonta por dos segundos. Creo que voy a odiarme por estar tan nerviosa aún.
—Estoy seguro que vas a odiarme pero le dije a mi madre que voy a llevarte a mi pueblo cuándo tenga algún que otro descanso de la gira.
Me sorprendo cuando termina y abro los ojos como platos. No sé si darle algo a este, pero es que ya no estamos juntos, joder.
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Quédate conmigo, siempre [Dani Auryn]
Фанфик¿Quien iba a imaginar que iba a terminar así? ¿Cuantas cosas no hemos pasado los dos juntos? En verdad no acabaría de contar...