Un par de pelinegros se encontraban platicando mientras se miraban fijamente.
¿Qué tipo de trato?, dijo Vegueta desconcertado.
Si tú me permites ayudarte a dejar tú vicio, yo prometo hacerte los pastelitos más deliciosos que hayas probado en tu vida todos los días hasta que me vaya de tu casa, dijo Milk sonriendo.
Crees que por unos ridículos pastelitos dejare de beber, dijo con ironía Vegueta.
No me des la respuesta ahora, te prepare unos cuantos para que los pruebes y luego me das la repuesta, mis pastelitos son los mejores de mi pueblo, cada vez que los preparo mi papá y mis amigos piden más, dice que soy buena repostera, dijo Milk sonriendo.
Vegueta al verla tan segura de su propuesta la miro y no dijo nada solo continuo con su búsqueda.
No encontrarás nada porque ya se te terminaron, mejor pon tu habitación en orden en 1 hora regreso con los pastelitos, dijo Milk saliendo de la habitación.
Pastelitos, dijo irónico Vegueta mientras continuaba con su búsqueda.
La pelinegra fue hacia la cocina y pidió a las empleadas que le den la bolsa con los ingredientes que les había pedido comprar para que empiece a preparar los deliciosos pastelitos con los que pretendía conquistar el paladar del joven cabello de flama.
1 hora después:
La bella pelinegra colocaba en una pequeña fuente los pastelitos para llevarlos a la habitación de Vegueta.
Habitación de Vegueta:
El joven cabello de flama cansado de que su búsqueda no dio resultado de mala gana volvió a acomodar su habitación y luego decidió acostarse en su cama a ver un programa de luchas, cuando en eso la puerta de su habitación sonó.
Toc toc toc
Adelante, dijo Vegueta con molestia.
Ya estoy aquí, dijo Milk entrando a la habitación del joven y sonriendo al ver que todo estaba de nuevo en orden.
¿Qué quieres?, dijo con molestia Vegueta.
Te traje lo que te dije, decía la bella pelinegra acercando la pequeña fuente con pasteles para que el joven cabello de flama tomara uno.
Vegueta tomo un pastel de mala gana, mientras Milk lo observaba.
¿Pruebalo y luego me dices si hacemos o no el trato?, dijo Milk mientras miraba la pantalla del televisor con tristeza al ver una competencia de artes marciales.
Vegueta llevado por el delicioso olor del pastelito decidió probarlo, mientras Milk giro su rostro a ver la reacción del joven cabello de flama al probar el pastel.
Luego de algunos minutos:
¿Qué te pareció?, ¿hacemos el trato?, ¿me dejas ayudarte?, dijo Milk sonriendo.
Todos los días me harás estos pastelitos adictivos, dijo Vegueta tomando otro de la fuentecita que tenía Milk en la mano.
Sí, dijo la pelinegra con firmeza.
Están muy buenos, pero no creo que con estos olvide mis problemas, dijo Vegueta.
Pues todos tenemos problemas pero si no los exteriorizamos con nadie, nadie nos podrá ayudar, dijo Milk.
¿Qué contienen estos pasteles?, dijo Vegueta con curiosidad tomando otro pastel.
Ese es mi secreto, no te lo puedo decir por ahora, dijo Milk riendo.
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"Me cambiaste la vida"
RandomVegueta Ouji, un joven amargado y resentido con la vida, conocerá a una bella jovencita y se hará novio de esta de la manera menos adecuada, lo que este no imagina es que esa simple acción cambiaría su vida por completo.