Capítulo 12

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[En la actualidad]

Aún no tenía demasiado claro que era lo que había ocurrido dos noches atrás, desde ese instante me había encerrado en mi cuarto, temerosa de cruzarme con Bucky y enfrentarme a la realidad que nos rodeaba. ¿Era cobarde? Por supuesto. Pero también estaba asustada.

Todavía podía sentir el suave tacto de sus labios sobre los míos, su dulce calidez... Igual que años atrás. Igual que nuestro primer beso. 

Unos leves golpes en la puerta me sacaron de mis pensamientos, temerosa de que se tratara de Bucky me acerqué de forma sigilosa a la puerta, casi aguantando la respiración para que no se me escuchara, volvieron a petar de nuevo en ella, esta vez un poco más fuerte.

-Em, sé que estás ahí dentro - la voz de Steve me relajó. Pero solo en parte. Tiré del picaporte, dejando que la luz del pasillo se colara en el interior de la habitación, brindando un poco de luz. Me hice a un lado, y sin pensárselo dos veces Steve se adentró en el cuarto.

Se sentó sobre la mullida cama, en completo silencio. Observándome.

-No sé que es lo que ha ocurrido entre tu y Buck, pero no puedes permanecer encerrada aquí para siempre. Además Bucky está insoportable, ¿habéis discutido?

Me quedé completamente quieta, Bucky no le había dicho nada acerca del beso a Steve, y la verdad es que no sabía como sentirme al respecto, ni si contárselo yo. Si lo había ocultado, y más a su mejor amigo, querrá decir algo.

Estaba sacando las cosas de quicio. Llevé mi mano hasta mi rostro, suspirando de forma cansada.

-Emma, te conozco demasiado bien como para saber que pasa algo por esa cabecita tuya...

Tomé asiento a su lado, descargando otro suspiro.

-Ayer Bucky y yo no nos peleamos - bajé mi vista hasta mis manos, a la vez que jugaba con mis dedos de forma nerviosa. El calor invadió mis mejillas, imagino que tiñéndolas de un color rosado. Agradecía que en la habitación no hubiera mucha claridad.

-Sé que es complicado Sully, hace demasiados años que no os veíais cara a cara, que él no te reconocía. Esto es duro, pero Em, tienes que...

-Me besó... Nos besamos... - solté de pronto. Pude ver como la sorpresa se apoderaba del rostro de Steve. Y el calor de mis mejillas.

-¿Entonces se pude saber qué haces aquí encerrada? 

-Dios Steve, estoy asustada, ¿vale? - me levanté y caminé de forma nerviosa hasta la ventana, todo estaba oscuro, solo las luces de la calle y de los edificios brindaban un poco de luz. Esa noche no había luna.

-¿Asustada de qué, Em? - sentí como también se levantaba y caminaba de forma lenta hasta donde yo me encontraba - Eres muy afortunada, ¿sabes? Tú al menos tienes una segunda oportunidad para vivir una vida junto a Buck, sin embargo yo no la tengo para estar con Peggy.

-Lo siento, pero no es sencillo. Y ten por seguro que daría lo que fuera para que tú y Peggy pudierais estar juntos y formar una preciosa familia... Pero por desgracia no puedo hacerlo - tenía ganas de llorar, me sentía mal por él.

-Perdóname, no debería haberte dicho eso... Es que... Solo quiero que seáis felices... 

-Lo sé - lo abracé - pero es complicado. Sí, el universo nos ha brindado una segunda oportunidad, ¿pero a qué precio? Hydra sigue ahí fuera, no solo detrás de mí, sino que también tras el Soldado de Invierno... Si nos llegan a capturar, a mi matarán, y a él... A él prefiero no saber que le harán si lo llegan a coger.

Steve se quedó pensativo, analizando cada una de mis palabras, y asintiendo para sí mismo.

-Iremos tras Hydra, lo hicimos una primera vez y no salió como esperábamos, pero ahora la destruiremos. 

Wintry ShadowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora