Dime que me amas

Bienvenida a mi nueva vida

Era claro que Luke parecía tener buenas intenciones conmigo, me trata muy buen, prácticamente me salvó la vida y me dió una nueva ahora estoy empezando a convivir con él y su hermoso perrito, no hay cosa que no se parezca al dueño. Sigo intrigada en los motivos que lo trajeron a todo esto, ¿Haber venido a este pueblo fue una simple casualidad? Es algo que todavía tengo que resolver con él, por el momento tengo que terminar de bajar mis cajas, salí bastante cargada de mi casa y parece que los paquetes siguen apareciendo, pero Luke parece una persona fuerte y sin miedo, no me deja llevar muchas cosas para no hacer más esfuerzo del que debería hacer, es muy tierno conmigo, no estoy acostumbrada a recibir este tipo de tratos amables por parte de un hombre, se siente lindo, espero que se vuelva cotidiano. Por suerte veo al hermoso chico del cuerpo tallado a mano trayendo la última bolsa con ropa para el cuarto, y ya damos por terminada mi mudanza. Se nos hacía tarde y comencé a preparar la cena, no me podía librar de las tareas cotidianas así de fácil, no lo quería tan rápido el cambio, estaba preparando pollo frito, por gracioso que suene, el día fue bastante cansador y queríamos algo rápido, al diablo con las cenas románticas, esas cosas son de películas, pediré disculpas pero me encanta comer con la mano, pierdo un poco de femineidad pero así nací y no puedo cambiar.
La cena está lista, era el momento decisivo, debía saber todos los motivos que tenía Lu, ahora o nunca, entonces estábamos empezando la cena y le pregunté.
- Luke, me debes una explicación, siento ser insistente pero muero de intriga.
- Te entiendo -se limpia su boca de una manera provocativa- Ri, ¿Recuerdas cuándo éramos compañeros?
- No tengo muchos recuerdos escolares, no me quedó nada en lo absoluto, ni amigas, ni siquiera colegas.
- Yo si lo recuerdo, de hecho, nuestro trato siempre fue cordial, éramos buenos compañeros que no teníamos relación de amigos pero cuando uno de nosotros necesitaba algo, el otro estaba para ayudar, fueron tiempos que nunca me voy a olvidar, el hecho es que tu siempre tuviste un carisma único, eras una chica feliz, tu sonrisa no se te quitaba por nada, tus ojos hermosos hacían que me pierda en tu mirada, para serte sincero, éramos cordiales compañeros pero yo estaba enamorado de tí, veía en tu figura a la madre de mis hijos, la abuela de mis nietos, la mujer que me llevaría a una vida de felicidad interminable, pero nunca tuve coraje para ir a hablarte y tener algún tipo de relación ajena a la escuela, me tuve que conformar con ser solo un chico más del curso, pasaron años y nunca pude olvidarte, quería todo contigo, hijos, un casamiento, vivir juntos y despertar felices por mirarnos el uno al otro. Cuando nos graduamos perdí una parte de mí, ya no te vería más en mi vida, sin tener relación no sabría a dónde seguirías tu vida entonces era prácticamente como perderte, fue horrible, me sentía vacío. Una parte de mí decía que no debía rendirme, pasaron años hasta que pude tener alguna lejana oportunidad de saber dónde estabas, pero ya no podía  pretender tener una vida feliz de la mano contigo, era muy posible que tú tuvieras una familia o un hogar bien establecido, mis sentimientos se mantuvieron por años y fue una alegría enorme para mí saber que te podía encontrar, no tenía nada que perder en mi vida así que pedí un traslado en mi trabajo y me lo concedieron entonces eso fue algo importante para poder venir. Las condiciones se me dieron de manera excelente para venir a verte después de tanto tiempo, nunca hubiera imaginado que tu vida era tan... disculpa mi expresión pero, tu vida era tan miserable, no podía dejar que sigas viviendo esa pesadilla y ver que él te había herido así fue como la chispa que encendió la mecha, la furia se apoderó de mí y no iba a dejar que se salga con la suya, tú decidiste irte de la casa entonces pensé que sería buena que vivieras conmigo. Querías una explicación sobre todo lo que estaba pasando, bueno, no tengo mucho más que decir.
El silencio se apoderó de mí, su confesión me dejó petrificada, estaba mirando a sus ojos directamente y tenía una terrible de cara decepción, comencé a llorar y entre lágrimas pude decirle.
- Perdón Luke, por favor perdóname, nunca quise herir tus sentimientos, lo siento.
Entonces él se levanta y viene hacia mí para contenerme en un cálido abrazo.
- Está bien hermosa, no te preocupes, eso ya es parte del pasado, ahora estoy aquí para darte toda la ayuda que necesites, nunca dudes que siempre voy a estar presente para tí, nos pueden pasar todo tipo de cosas pero jamás dudes en que yo voy a olvidarme de tí, ya eres parte de mi corazón, recuerda que ante todas las adversidades, me puedes odiar pero yo seguiré al lado tuyo para brindarte el apoyo necesario, ¿Está bien? Deja de llorar, las chicas hermosas como tú no pueden perder la compostura llorando, debes seguir adelante como has hecho siempre, vamos a terminar la cena y a dormir que nos espera un largo día mañana.
- Gracias Luke, insisto en pedirte perdón, eres una muy buena persona y ahora que lo dices, también eres perseverante, me dejas sin palabras, lo que has hecho por mí no tiene precio, me quedaré contigo a vivir por mucho tiempo si así lo quieres, te ganaste mi confianza y mi respeto, créeme que tu espera valió la pena completamente, te admiro, puedes confiar en que nunca te olvidaré y siempre serás parte de mí como tú lo has dicho conmigo, eres una persona adorable, ya no se lo que estoy diciendo, estoy muy emocionada Lu, perdóname.
- Está bien, tuviste un día muy difícil Ri, vamos a terminar la cena y dormiremos juntos, ya no tienes que tener miedo de nada.
- Gracias -se me cae una lágrima-