Me choco de nuevo con el imbécil ese.

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Kiara siguió corriendo hacia su objetivo sin mirar atrás. Era extraño que un unicornio gritara de ese modo, necesitaba saber qué le pasaba para poder ayudarle, pero le daba miedo lo que pudiera encontrarse.
De repente, los gritos cesaron. Aceleró el ritmo.
A los diez minutos de haber echado a correr, ya sin aliento, llegó a un claro. El claro del que le había parecido que procedían los gritos. Pero miró a su alrededor y no vio nada fuera de lo normal en un bosque prohibido. ¿Se habría equivocado de camino? Era muy probable...aunque no le daba esa impresión, no solía perderse en los bosques.

Todo hilo de sus pensamientos fue cortado abruptamente cuando volvieron a empezar los gritos. Pero esta vez eran distintos. Más humanos. Es más...reconocía esa voz. ¿....No sería que....?¿Era posible que la hubieran Seguido?
Desesperada, volvió a correr hacia unos gritos diferentes. Hacia los gritos de sus amigos.
En poco tiempo dio con otro claro, pero este, a diferencia del otro, tenía algo extraño. Charcos de sangre.

—¡¡¡¿¿Al....Al...Albus??!!! ¿Scorp?

—¡AYUDAAAAAA!

La voz venía de un árbol, y aunque Kiara no veía nada, empezó a escalarlo.

Cuando llevaba poco más de un metro escalado, empezó a llegarle un olor raro, el olor de un monstruo. Puede que algunos os preguntéis por qué ella puede oler a los monstruos cuando el resto de semidioses no...fácil, todo tiene sentido si sabes quién es su padre.
En cuanto reconoció por qué el olor le era familiar, se tiró del árbol. Tirar, no bajar cuidadosamente, si no soltar las manos y los pies y abandonarse a la gravedad. Total, no estaba a más de metro y medio.
Cayó de espaldas y echó a correr. Podía ser Gryffindor, y por lo tanto valiente, pero no era estúpida, si ves a un cíclope corres, sino, probablemente mueres.
Corrió intentando no mirar atrás, pero claro, como demuestran todas las películas muggles, eso es imposible. La curiosidad siempre nos puede. Cuando miró por sexta vez hacia atrás, vio que el cíclope ya había echado a correr. Es más, que estaba a menos de cien metros de ella.
Corriendo de ese modo, mirando para atrás y esquivando raíces, no se dio cuenta de que ya había abandonado el bosque, y que por lo tanto ya no había árboles que la cubrieran.
Siguió corriendo, sin darse cuenta de este hecho, y para cuando quiso darse cuenta prácticamente se había comido a James Sirius Potter por segunda vez esa semana.

—¿Otra vez tú? ¿Pero qué carajos pasa contigo? ¿Es que te gusta chocarte con la gente?
—¡Corre idiota, corre!
Sin ni si quiera pararse, Kiara le agarró del brazo y echó a correr, tirando de él.
—¿¡Pero a ti qué te pasa!?

—WARGHJJJ

—¿Qué...qué era eso?

—¡¡¡Qué corras!!!

Ya habían dejado atrás la cabaña de Hagrid, cuando repentinamente el escándalo que organizaba el cíclope al correr cesó.
Kiara se paró en seco, y James, aunque siguió corriendo unos metros más, paró también en cuanto se dio cuenta.
—Oye...¿Qué...qué...qué era...eso?
—Nada, cállate.
—¡Tú no me mandas!
Kiara puso los ojos en blanco, pero siguió atenta al origen del silencio del cíclope.
—Kiara,¿Todo bien?

Kiara se dio la vuelta al origen de la voz, y...

—¿Thalia?
La líder de las cazadoras apareció ante ella, con sus ropas grises, la tiara, y el arco.
—¿Qué...qué haces aquí?¿Está también Artemisa?

—Le habría gustado, pero está ocupada con ciertos asuntos en el...Empire State.

—Ah...

—Ah...Soy Potter, James Potter. ¿Y tú eres?
Thalia le lanzó una mirada incrédula a Kiara.

—¿Está intentando ligar conmigo?
—Eso creo. Pobre ingenuo.

James se quedó mirándolas a ambas, como intentando decidir qué decir o hacer.
—Mhm....
—No te pongas en ridículo, por favor.
—Eh...
—Oye...¿Y qué hacéis por aquí las cazadoras?
—Artemisa nos envió para que vigiláramos un poco la zona, ya sabes, tenerte vigilada ya que...bueno, te están buscando.
—¿Y con qué permiso me vigiláis?
—¿El...de...Artemisa?
—¡¡¡Pues os quito el permiso!!!¡ No me podéis vigilar!¡Es injusto, sé cuidarme sola y lo he demostrado!
—Kiara tranquilízate.
—¡NOOOO!¡No me calmo!
—Está bien, hablaremos con ella.
—Mhm.

—Creo que...

Y con esa única frase, el mayor de los Potter se desmayó.

—Vaya, qué débil...
—A ti todos los hombres te parecen débiles. Probablemente se haya desmayado por la impresión de ver a un cíclope y a una chica con un arco y una tiara.

—Ñeh...

Entre las dos levantaron a James y le llevaron a rastras hasta la entrada del colegio.

—Bueno, lo mejor será que nadie me vea por aquí, ¿Puedes con él?

—La enfermería está cerca, me las apañaré.

—Está bien, hasta la próxima.

—¡Coméntale a Artemisa que tiene que hablar conmigo!

—Se lo diréééé....

Con eso, Thalia desapareció de nuevo, dejando a Kiara con un peso muerto, o mejor dicho, inconsciente, sobre sus hombros.

******
—¡Kiara! No te hemos visto en la cena, ¿Qué te ha pasado? Tienes un aspecto horrible.

—Vaya, gracias Albus, eso es lo que a toda persona le gustaría escuchar.

—No en serio, ¿qué te ha pasado?

—Nada de importancia Scorp. Por cierto, Albus, tu hermano está en la enfermería.

Holaaaa.... Cabe recordar.... Que una estrellita no le cuesta nada a nadie... Puede que los comentarios requieran pensar, pero...¿Un voto?

Nah, vale, gracias a los que leéis mi historia a pesar de que es horrible y tardo la vida en publicar!!! 😂😂

X cierto...287 leídos !!!😱😱😱😱 imposible haberlo imaginado, muchísimas gracias 😘😘

Semidiosa.... Black.... ¿Algo más que quieras añadir?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora