Emma.

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EMMA

Cuando son las once de la mañana el profesor se despide y nosotros comenzamos a salir del salón para buscar el almuerzo, excepto Vee, quien tiene otra clase hasta la una de la tarde. Así que hago mi camino hasta la cafetería principal, la que tiene el restaurante consigo, y hago la fila para conseguir mi almuerzo. Cuando tengo mi bandeja llena de comida en mis manos, busco con la mirada una mesa vacía. Pero entonces Clayton aparece en mi campo de visión y me toma de la muñeca. Tengo que sostener un poco más fuerte la bandeja para que no se caiga.

—Hey, ven con nosotros.

— ¿A dónde?

—A almorzar —comienza a caminar y yo le sigo, porque todavía tiene mi muñeca sujetada—. Shawn me ha dicho que te busque para que almuerces con nosotros, porque sabe que Vee se desocupa hasta dentro de tres horas.

Llegamos a una mesa casi vacía y me siento junto a él. Está también un chico de ingeniería de sistemas y una chica de ingeniería mecánica, que supongo es amiga de Shawn y Clayton.

— ¿Ya te contó Shawn que se pasó a música? —Menciona la chica, mordiendo su sándwich. ¿Quién almuerza con un sándwich tan pequeño? —. Ya sabía yo que en algún momento iba a pasar, ese chico se la pasa cantando todo el tiempo.

—Sí, ¿te lo has encontrado, Emma? —me pregunta Clayton. Frunzo el ceño y niego con la cabeza.

—No, ¿a qué semestre entró? Dijo que las electivas de música le homologaban las materias...

—Está en segundo, creo —Clayton cuenta con los dedos y hace una mueca de estar pensándolo—. Sí, segundo.

—Quizá me lo encuentre en un par de clases, estoy en tercero, pero todavía veo asignaturas de segundo —me llevo una cucharada de sopa a la boca. No me he encontrado a Shawn estos días, aunque solo han pasado tres desde que me llevó al concierto.

— ¿Eres la novia de Shawn, cierto? —La chica me sonríe, emocionada—. Shawn nos ha hablado mucho de ti. ¿Emma, verdad?

—Sí —asiento con la cabeza con una sonrisa tímida. Vaya, esto todavía es nuevo para mí.

—Eres más linda de lo que él te describió. Dile a Shawn que si quiere componer canciones describiendo personas, va por mal camino —me dice. Sonrío avergonzada, sintiendo mis mejillas más calientes de lo normal, mientras trato de mirar a otro lado que no sean los ojos de la chica. Vaya...

—Gracias —trato de decirle, aunque suena algo más como un susurro.

La mesa se queda en silencio, aunque por el rabillo del ojo puedo ver cómo Clayton sonríe gracioso mientras intercala miradas entre la chica y yo, que, por cierto, no sé su nombre.

— ¿Cómo te llamas? —decido romper el hielo. Ella levanta su mirada del sándwich, con un trozo dentro de su boca, y me sonríe, tratando de que no se le note la comida entre los dientes.

—Soy Danielle. Veo que el idiota de Shawn no te haló de mí —pone los ojos en blanco, sonriendo. Termina de masticar y tragar su sándwich y me extiende una mano—. Mucho gusto, ya sé que eres Emma. A comparación, debo decir que Shawn es una cotorra cuando se trata de ti.

—La estás asustando, Danielle —menciona Clayton al tiempo en el que le recibo la mano a la chica. Ambas reímos y minutos después de que sigamos almorzando, Shawn aparece junto a la mesa.

—Dios, esto es más difícil de lo que pensé —es lo que dice. Dejo la cuchara a un lado de mi plato y mi sonrisa se extiende al verlo. Él le sonríe a Clayton y a Danielle, asintiendo con la cabeza; y después me ve a mí. Y juro que me siento en el cielo cuando veo que sus ojos brillan y que las esquinas de sus labios se elevan mucho más.

Algo dentro de mí revolotea sin parar al ver que camina a mi lado, hasta sentarse casi encima de mí. Todo pasa muy rápido, sus manos van a mi rostro y a mi cuello, me acerca al suyo, sin dejar de sonreír, y me besa. Lo que parece solamente un roce de labios se convierte en una batalla entre su boca y la mía. Lo siento reírse sin dejar de besarme, lo que provoca que todo mi cuerpo se estremezca. Escucho a Clayton y a Danielle silbar en la mesa, mientras Shawn no deja de besarme: no me da tiempo de separarme, tiene mi rostro en sus manos, y la verdad es que no quiero.

—Consíganse una habitación —se ríe la chica, lanzándonos una papa frita de su almuerzo. Finalmente Shawn suelta mi rostro, pero ahora pasa una de sus manos a mi cintura, pegando su cuerpo al mío, y con la otra toma la mía y hace que se entrelacen.

Todo esto va demasiado rápido. Escucho decir a mi yo interior. Va a acabar demasiado pronto.


—... Y ahora estamos aquí. No pasó mucho, la verdad —escucho decir a Clayton. Sacudo mi cabeza, siendo totalmente consciente de que no escuché una palabra de lo que dijo, y me hace sentir culpable—. Pero no importa, ¿cómo te fue a ti?

—Bien, creo. Las clases están perfectas, pero el papeleo me tiene de un lado al otro —se queja, jugando con mi mano.

— ¿Qué no habías hecho el papeleo ya hace rato?

—Sí, pero hubo algunos papeles que negaron y tuve que volver a empezar. Pero por lo menos estoy viendo las clases —levanta los hombros y deja de mirar al frente para mirarme a mí, sonriente—. ¿Y tú? ¿Cómo estuvo tu día hoy?

—Bien, bastante aburrido, pero bien.

—Yo sé cómo arreglar eso —Clayton sonríe de lado—. ¿No le has contado, Mendes?

— ¿No me has contado qué?

—Esta noche hay una fiesta, en la terraza del edificio de los chicos.

—Las fiestas están prohibidas en el campus.

—Lo sabemos, pero ya sabes lo que dicen... las reglas están para romperlas —Danielle levanta los hombros, terminándose su sándwich de un último gran mordisco. Volteo a ver a Clayton y lo encuentro asintiendo con la cabeza.

—Vee irá, así que...

— ¿Qué dices? —Shawn besa mi mejilla con rapidez.

—Pues, um... yo no soy muy de fiestas, así que...

—Pero esta será LA fiesta. Escuché que uno de los Dj's es de Latinoamérica, así que la música estará... espectacular.

—No te preocupes, Emm, vas a estar conmigo, no voy a dejarte sola, y a la hora que quieras irte, te acompañaré a tu dormitorio —se acerca a mi rostro, específicamente a mi oído—. Anda di que sí, quiero bailar contigo esta noche.

Listo. Soy así de facilona. Acaba de convencerme. Ya fue.

—Sí.

Debajo de las rocas ; Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora