XIII

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Desperté en la cama junto a la niña, Ayato estaba sentado en una silla a lado de la cama observando.

Ayato: como te sientes?

Anne: estoy un poco cansada pero estoy bien. Por cuanto tiempo dormí?

Ayato: no mucho, una hora y media. Lo siento no me pude contener más.

Anne: se notó, entonces significa que tus hermanos también son vampiros
¿no?

Ayato: si- dijo con la cabeza abajo.

Anne: increíble, y yo que creía que solo eran cuentos.

Ayato: espera no estás asustada?

Anne: porqué?

Ayato: tal vez porque vives con seis vampiros.

Anne: tal vez tengas razón, pero no importa, porque hasta ahora tu has sido el único que me ha mordido.

Ayato: y no te sientes preocupada por que te mordí?

Anne: pues ni tanto, un poco porque me dolió pero no me preocupa-dije tranquila- he estado viviendo aquí desde ya hace tiempo y ninguno me a hecho daño

Ayato: creí que te ibas a espantar como todas.

Anne: todas??

Ayato: olvídalo.

Anne: mmm, desde cuando no tomaba sangre?

Ayato: desde hace ya casi un mes

Anne: un mes!??- dije sorprendida y tratando de no despertar a la niña. -te admiro

Ayato: tu sangre es dulce, es especial.

Anne: porqué?

Ayato: el sabor es fuerte pero dulce y llena de energía.

Anne: me debería de sentir halagada?- dije en tono burlón

Ayato: el sabor de tu sangre me es algo familiar pero la tuya es mucho mejor.

Anne: ya veo

Me levanté y camine a mi armario pero sentí un mareo y de no ser por Ayato estaría en la suelo.

Anne: gracias

Ayato: debes de tener más cuidado.

Anne: si, ya estoy mejor.

Me iba a separar de el pero me jalo del brazo y me cargo como recién casados.

Ayato: baka, hasta crees que te dejaré ir por ahí en este estado, tu te quedas en cama hasta que te sientas mejor. -dijo acostandome en la cama.

Anne: pero tengo que cuidar de la niña.

Ayato: alguien más la cuidara.

Anne: a si, quién?

Ayato: pues Reiji no, yo lo cuidare.-dijo decidido

Anne: estas seguro?

Ayato: te he visto como la cuidas y además te lo debo. Lo siento

Anne: te diré dos cosas,una, no se si de verdad te estás arrepintiendo y dos no estoy enojada o asustada porque me mordiste además te entiendo, no habías tomado sangre en mucho tiempo y te estuviste conteniendo todo este tiempo.

Ayato: tienes razón, no me arrepiento y me he estado conteniendo desde tu primera semana aquí.

Esto es serio-pensé- nunca me daba la razón y se decía Ore-sama.

Ayato: dejemos esto en secreto.

Anne: si eso será lo mejor. Voy a dormir un rato.

Ayato: no te preocupes, no me iré de aquí.

¿Novia o niñera?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora