Ahora tú (Laucy) #NeónAwards2017

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A lo lejos Lauren vio acercarse un par de faros de coche, que sabía eran los de Camila. Y resignada se levantó del suelo para subirse al coche. 

- Hola preciosa. - Le dijo Camila cuando subió al coche, y mientras le daba un beso en la mejilla.

- Hola Camz. - Respondió con la voz abatida Lauren...

- Cómo estás?! Te he echado de menos... 

- Camila... No hemos tenido tiempo de echarnos de menos... - Lauren estaba sobrepasada con los cambios de ánimo que podía tener Camila. Sus palabras cada vez le parecían más repetitivas y memorizadas.

- Bueno, yo lo he hecho de todos modos... Sigues enfadada?! 

- Qué crees Camila?! - Bufó Lauren tras la estúpida pregunta de Camila.

- Lo siento Lauren... Sabes cuan insistente se vuelve Shawn cuando hace tiempo que no nos vemos... Quieres que la gente vuelva a creer que estamos juntas...? - Respondió Camila con la voz algo irritada.

- Camila, yo ya no sé que quiero... - Musitó Lauren mientras una lágrima se escapaba y volvía su mirada hacía la carretera para que Camila no la viese llorar por enésima vez.

Ambas permanecieron en silencio hasta que llegaron al barrio de Camila. 

- Te quieres quedar a dormir conmigo bae?! - Le preguntó Camila rompiendo el silencio que inundaba el coche.

Lauren no tenía fuerzas para nada, mucho menos para negarse a domir con la única persona que la podía llevar a lo más profundo del infierno, y en minutos hacerla sentir que está rozando el cielo. Así que tras fustigarse por todo esto, aceptó asintiendo la cabeza. De todos modos, ella ya no se pertenecía.

Ambas llegaron a casa de Camila, y Lauren saludó a Sinuhe que estaba en el sofa aún mirando la tele con una pequeña sonrisa, mientras ambas iban a la habitación de Camila. 

Al entrar en esta, Lauren rompió a llorar dejandose caer por su propio peso, sus fuerzas ya no le respondían, ella estaba realmente deshecha. Y Camila la sostuvo, acurrucándola con ella, y quitándole la camiseta de tirantes deportiva, y las mallas, para meterse ambas en la bañera y ponerse el pijama. Camila sostuvo a Lauren durante todo el rato, la enjabonó, la enjuagó y la secó, para finalmente ponerle el pijama. Todo esto mientras secaba las lágrimas que brotaban sin parar de los ojos de la ojiverde. 

Camila llevó a Lauren hasta la cama y la acunó junto a ella. Reconfortándola y haciéndole ver que todo estaba bien, que ella estaba a su lado. Lauren se recostó finalmente en los brazos de Camila, sin recelo alguno, y así poder por fin descansar muy a su pesar. Como la oveja que duerme junto al lobo, que aunque esa noche lleve piel de cordero, sigue siendo lobo. Y Camila besó a Lauren castamente, transmitiéndole amor, o almenos el amor que muy extrañamente Camila aún sentía por ella. Y así ambas se dejaron llevar por morfeo, para poder descansar después de todo.

A la mañana siguiente ambas despertaron en la cama de Camila. Lauren tenía los ojos hinchados por tanto llorar, y Camila le besaba los ojos haciéndola sonreír. No tenían clases hasta por la tarde, así que ambas permanecieron en la cama curándose las penas con besos y risas, con sus tonterías y barriendo todo el dolor "bajo la alfombra" otra vez, pensando que aún le cabía más polvo debajo. 

Camila le preparó el desayuno a Lauren y se lo llevó a la cama. Llenándola de besos y dándole de comer, terminando reconciliándose haciendo el "amor". Ambas se levantaron para ducharse, y Lauren se puso algo de ropa que tenía en casa Camila, para irse a preparar la comida para ambas. Y así, como si nada, volvieron a la "normalidad", a su normalidad, y recompuestas y otra vez juntas, salieron de casa y se marcharon a la universidad, para seguir con su "vida".

Lauren y Camila llegaron a la universidad para reunirse allí con el resto de sus amigas, Normani, Dinah y Ally. Estas tres no eran de Miami, pero habían ido hasta allí para estudiar sus carreras. Al llegar estas tres les preguntaron que qué fue de ellas ayer, ya que habían quedado para salir a tomar algo por la noche después de cenar, y no aparecieron. Pero Camila rápidamente inventó una escusa y evadió la conversación. Todas se separaron para ir a sus respectivas clases y Normani y Lauren se dirigieron juntas a las clases que compartían. 

- Ey preciosa, qué te pasa?! - Le preguntó Normani ahora que estaban solas.

- Nada... Es solo que ya sabes... otra vez lo mismo... - Le quiso explicar Lauren sin tener muchas ganas de volver a contar lo mismo.

- Otra vez Lauren?!... Esto ya no está bien, me oyes?!... - Le reprendía Normani con un tono de voz bastante apenado, mientras le pasaba un brazo por los hombros y se la acercaba para darle un abrazo. - Lauren... Debes tomar fuerzas y tomar una decisión que haga que podáis pasar página... Sabes que os quiero a las dos, y quiero que seáis felices, pero tu no puedes seguir aguantando todo esto... 

- Ya lo sé... - Le respondió Lauren aguantando las lágrimas que amenazaban con escapar. - Ahora ya lo hemos arreglado, y esta será la última vez... Te lo aseguro... - Bufó. - Pero ahora y está todo bien vale?! Es solo que al hablar de ayer me acordé y ya está... 

- Te quiero mucho, lo sabes?! Y no voy a dejar que estés así por mucho más tiempo... Espero que ya vaya todo bien... Y sino ya se acabo vale?! - Normani le sentenció.

- Esta bien... Ahora vayamos a clase, no quiero tener que volver a pedirle los apuntes a algún alumno que nos chantajee con dárnoslos a cambio de que asistamos a noseque fiesta de nosedonde jajajaja 

- Qué esperas?! Somos las chicas más hot de nuestro curso, es normal... - Respondió Normani con su típica actitud prepotente y bromista. 

Ambas asistieron a la clase de la universidad para darlo todo, y recuperar los días de la semana donde habían decidido no hacer nada. Cuando Lauren recibió un mensaje en el teléfono móvil.

Bebé, quieres que hoy pase por tu casa y nos vayamos a pasar el fin de semana las dos solas lejos de aquí? Te quiero mucho. Camila <3

Lauren suspiró al leer este mensaje de texto, y respondió.

Está bien amor. Vayámonos las dos lejos de todo esto, necesito respirar. Yo también te estimo <3

Y al levantar la cabeza Lauren observó que Normani estaba observando la conversación por mensajes de texto que ambas morenas habían estado compartiendo, a lo que Lauren respondió con una breve sonrisa.

- La vida es tuya preciosa, pero te mereces algo mejor que un fin de semana "lejos de todo esto", para seguir viviendo una media verdad, o media mentira, depende de por el lado que lo mires... - Sentenció Normani.