Un Amor Inesperado [#UAI1]

Capítulo 2

Kyle's POV
Como cada mañana, la característica melodía que tengo como alarma empieza a sonar, algo irritante y monótono que demuestra lo emocionante que es mi vida. Abro mis ojos lentamente, y la detengo dando un bufido.

Hoy no ha hecho falta que mi hermana me despertara, ya que me he levantado más animado debido a que por fin no es lunes.
Así que después de cumplir con mi rutina y llegar a la universidad, Connor me mira con una sonrisa de emoción. Lo conozco tan bien que rápidamente deduzco que algo bueno le ha pasado.

—¿Cuál es tu buena noticia, Connor?—le pregunto devolviéndole la sonrisa.

—Cómo me conoces...—me dice riendo— Pues verás; ¿te acuerdas de que te dije que me gusta Alice?

Alice es una chica proveniente de Italia, de la cual mi amigo se enamoró rápidamente, y por lo que he escuchado es la mejor amiga de Kelsey. Su personalidad es un estilo al de su amiga, pero no es para nada problemática. Ella y mi amigo se conocieron de una forma un tanto peculiar, pero la verdad es que se llevan fenomenal.

—Sí —le respondo yo.

 —Pues verás; ayer por la tarde le confesé mis sentimientos y...ahora somos novios —me dice sin poder contener su felicidad.

—¡Enhorabuena, amigo!—le digo dándole un abrazo, al cual corresponde al instante.

Me alegro mucho por Connor, debido a que antes le rompieron el corazón sus dos exnovias, pero ha vuelto a ilusionarse. Aunque por otra parte, creo que ahora soy el único solterón de la clase. Y supongo que así seguiré por el resto de mi vida...
Cuando era un niño de tan sólo 12 años me enamoré de una chica muy amable y con la que me llevaba genial, pero justo el día en el que iba a decirle que me gustaba, la vi besándose con un chico, y desde entonces no supe nada más de ella. Sí, se podría decir que me mandó indirectamente a la friendzone, como si mi fortuita confesión ya la esperara.

El timbre nos sobresalta, y nos indica que las clases ya comienzan.
Pero claro, después de unas dos primeras horas nada malas a tercera hora toca precisamente matemáticas.

Frunzo el ceño desconcertado al no tener ni la más remota idea de cómo solucionar una problema, por lo que decido preguntarle a Connor por si sabe cómo solucionarlo.

—Oye Connor, ¿sabes cómo es la actividad 7 de la página 52? Es que no sé ni por donde empezar...

Veo que mi amigo pasa olímpicamente de mí. Desde esta mañana se dedica a divagar y pensar en su querida novia, eso seguro.

—¿Connor? ¿Me estás escuchando?—le pregunto para llamar su atención, aunque sé de sobra que me está ignorando por completo.

—Sí, amigo, me alegro mucho por ti —me contesta él, supongo que para que me dé por satisfecho con la respuesta, pero eso confirma que ni siquiera está centrado en hacer las actividades.

Blanqueo los ojos y dejo escapar un suspiro pesaroso. Así que tras mi intento fracasado de pedir consejo a mi gran amigo no vuelvo a decirle nada y sigo con mi tarea.

Poco después me encuentro en un grupo de compañeros de clase junto con Connor. Ni siquiera soy muy amigo de ellos, pero no nos llevamos nada mal.
Les digo que voy un momento al servicio y me dirijo al interior del edificio. Este está desierto, ya que todos los estudiantes están en el patio. Aunque justo cuando voy cruzando un largo pasillo, alguien choca contra mí y caigo enseguida al suelo.

—¡Mira por dónde vas, imbécil! —me grita una voz femenina que me resulta familiar. Alzo la vista para encontrarme con la mismísima Kelsey Evans.

—La única imbécil que tiene que mirar por dónde va eres tú —espeto cortante mientras me levanto del suelo. Y tengo razón, ya que fue ella quien iba corriendo por el pasillo.

Kelsey me mira enojada, y puedo ver que hay rabia en sus grandes ojos azules.

Me agarra del cuello de la camisa y bruscamente acerca mi rostro al suyo. Estamos demasiado cerca y ella me observa a los ojos fijamente, por lo que puedo ver a la perfección la furia que emana de todo su ser.

—Vas a lamentar haberme dicho eso, niñito bueno —me amenaza con voz intimidante.

Genial, ahora me he metido en un lío del que voy a salir perdiendo.

Sé defenderme, pero me veo incapaz de golpear a una chica. Es algo que nunca haré, y me parecen lamentables esos hombres que sí se atreven.

Aprieta con fuerza su puño, dispuesta a golpearme, y justo cuando este iba a impactar en mi mejilla, un grito la detiene.

—¡SEÑORITA EVANS, NI SE LE OCURRA GOLPEAR A SU COMPAÑERO!

—¡Ugh, mierda!—exclama ella, y de un empujón me aparta de su camino para marcharse con paso apresurado. 

La profesora que antes le llamó la atención no se esmera en perseguirla, simplemente se limita a acercarse a mí y decirme:
—Lamento no haber llegado antes, Adams.

—No se preocupe profesora—alego con sinceridad—, ha llegado justo a tiempo y se lo agradezco.

—No hay de qué —suelta un suspiro y continúa—. Cuánto me gustaría que esa chica tuviera tanta educación como tú. En el fondo no es una mala persona, pero sí demasiado impulsiva.

El timbre suena entonces, dando por finalizado el recreo.

Vale, todo esto ha sido jodidamente raro. Si la profesora no hubiera llegado, Kelsey habría sido capaz de darme una paliza por el simple hecho de haberle dicho la verdad a la cara.

Connor viene hacia mí corriendo, enseñándome una mirada inquisitiva.

 —¿Por qué has tardado tanto? —me pregunta extrañado.

Yo sin dudarlo de cuento todo lo sucedido, y cuando termino de relatar mi extraña historia él me mira sin poder esconder su sorpresa.

—Joder, te has librado de una buena, chaval.

—Lo sé, he tenido suerte esta vez —respondo con una breve sonrisa.

En las tres últimas horas Kelsey se dedica a mirarme amenazante, ataladrando con la vista mi nuca. Tengo el mal presentimiento de que esta chica no me dejará en paz hasta salirse con la suya...
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Y aquí finaliza este tercer capítulo, espero que os haya gustado y gracias por leer :)
P.D: Kelsey en multimedia 😊