Te quería,
te quería solo a ti sin que nadie se interpusiese
te quería cada noche, cada luz de mañana
y nadie iba a impedirlo,
aquí era tormenta hecha tinieblas
y puedo suponer que en tu casa sucedía lo mismo;
Por eso me pediste que escapáramos de ahí,
prepare mi mochila con lo necesario y cerramos la ventana al salir.