XII

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Inas y Ghealach se miraron, en la cima del monte todos miraron el planeta de arriba, si bien Adabbas era La Muerte todos le temían a esta, incluso el mismo Lucifer, al parecer el niño de los recuerdos de Adabbas había llegado hasta donde ellos, su camisa morada y corbata negra, se movían rápidamente al son del viento de la montaña, esta brisa era acompañada con el suave aroma del mar, este niño era una copia de Lucifer en miniatura, la única deferencia era el tamaño de sus ojos y su color escarlata, su pelo castaño mas corto que el de Ghealach y su cuerpo mucho mas pequeño, Lucifer o Ghealach se acercó a el y le acarició la cabeza suavemente, VO-017 estaba al lado del niño y no le dejo solo, de la boca del niño surgió la sugerencia de bajar, alguien los esperaba en el pueblo ahora abandonado, todos bajaron, llegaron a una casa de fachada teñida celeste, la puerta se abrió y mostró la figura del hombre que apareció en la esfera y abrazó a La Muerte, este mostraba un esmoquin negro, su camisa blanca mostraba una corbata rojo sangre, su pelo blanco caía en el piso, sus guantes hicieron la señal de pasar, todos pasaron hasta el robot, pero las dos ultimas, Leti y Adabbas fueron detenidas por el tipo.

-Las dos bellezas no son admitidas, lo que ocurrirá será de tal magnitud que ni la que yo cree ni mi hija soportarían, además, por que no disfrutar su día entre amigas- dijo el tipo.

-¿Y donde quieres que vayamos?- dijo Leti.

-La playa es hermosa ¿la conocen?- cerró la puerta tras de sí.

Un suspiro de resignación surgió de ambas y la blanca armadura de la pequeña fue removida, dejando a esta en paños menores, Leti hizo lo mismo ya que nadie las veía, bajo su ropa traía un bikini (Menuda suerte) blanco con diseño.

-¿Oye?- le dijo Adabbas mientras caminaba- ¿Qué traes en ese bolso?

-Esos paños no están a la moda**- abriendo el bolso Leti le dio un bikini blanco con lineas celestes.

-¿Cómo sabes que me queda?- dijo mientras se desnudaba y se cambiaba, sus alas negras rociaban plumas cual árbol en otoño. 

-**Es de niña, de seguro te queda**- siguió caminando.

-¿Qué me habrá querido decir?- pensó al terminar de cambiarse.

Después de un camino polvoriento, llegaron a una bajada, al final de esta se veía, la playa resplandecía con la vaga luz del sol, este se coordinaba con el mar del otro planeta, dejando un paisaje maravilloso, sin más Leti corrió al agua como niña que la ve por primera vez, mientras Adabbas preparaba las toallas y se tendía sobre la suave arena, Leti ya nadaba por la orilla, Adabbas se paró en la orilla tras un rato.

-¡Se supone que eres un gato maldita sea!- gritó desde la orilla- ¡Por qué te gusta tanto el agua!

Las orejas negras de Leti se movieron, su cola estaba mojada, recién se daba cuenta de que lo que decía Adabbas era verdad, el agua le dio una mala sensación, rápidamente y corriendo con las manos por los aires, llegó gritando hasta la pequeña ángel, abrazándose a ella, ambas tiradas en la orilla se miraron, Adabbas era realmente plana de busto, Leti aprovechó la oportunidad, sus manos agarraron los senos de Adabbas fuertemente, la pequeña gritó.

-¡Qué haces maldita loca!- trató de sacársela de encima, pero Leti era mas grande y fuerte.

-¡Que tiernos pechos tienes **! ¿Sabes dicen que manosearlos los hace crecer?- Leti continuaba.

Adabbas abrió los ojos y vio el gran busto de Leti contra su cara, se logró escapar y rápida como un rayo se refugió en una pared de arena, Leti se levantó y se acercó, tomó a Adabbas de la mano y se sumergieron en el agua a pesar de lo ocurrido.

Estuvieron bastante tiempo, pero algo resbaladizo se movía entre sus piernas, un pequeño tuvo apareció, Leti gritó, pero Adabbas sabía que ocurría, tomó el tuvo y con su dedo bloqueó el pequeño agujero de este, segundos después, asomó pelo rojizo, un mechón blanco a la vez, era Inas que estaba bajo el agua, ambas se colocaron rojas de impresión y vergüenza, la cabeza de este flotaba en medio de ambas y su cuerpo sumergido se mostraba.

-¿Se... señor Inas? ¿Que hace aquí?- dijo Adabbas mientras intentaba ocultar su pequeño busto con sus manos.

-Sacaba fotos con esto- Inas con cara sería mostró en su mano una cámara submarina, su brazo se volvió a sumergir.

-I..Inas que pervertido- dijo Leti dándole la espalda.

-No son para mí- Inas se levantó dejando ver su cuerpo bien moldeado por las batallas y entrenamientos- son para ellos- señaló un arbusto en la orilla pero las miradas de ambas se dirigían hacía Inas.

Desde el arbusto la cabeza de Ghealach asomó, no solo el el tipo del pelo largo también, ambos con cámaras y luciendo trajes de baños.

-¡Eres un traidor Inas!- le gritó Ghealach a Inas lanzando la cámara hacía la cara de Inas, le acertó.

-¡Misión fallida! ¡Misión fallida! ¡Aborten, aborten, aborten!- gritaba el tipo por una radio.

Desde otro arbusto VO-017 salió con el niño encima a toda velocidad.

-¡Se olvidan de nosotros malditos!- gritaba Lucifer mientras corría tras ellos, a su lado el tipo de pelo blanco lo imitaba.

Un cable lanzado por el robot alcanzó a Inas y lo arrastró tras el.

Tanto Adabbas como Leti quedaron atontadas por el cuerpo de Inas, seguían imaginándolo, sonrojadas ambas se veían desde debajo del agua, algo se movía, algo escamoso, el pie de Leti fue sujetado, esta miró hacia atrás, uno grandes dientes la aguardaban.  



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