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El primer día de vacaciones con el, tan solo caminamos para conocer un poco el lugar en el que estábamos.
Cenamos en un restaurante muy excéntrico pero elegante, use un vestido flojo de playa y el unos short caqui con una camisa azul marino, se le veía muy bien.
Tan solo cenamos y fuimos un poco a la playa a caminar para que se nos bajara la comida y volver a dormir a la casa, íbamos caminando y una ola un poco grande choco con la orilla haciendo que mi vestido se mojara. El tan solo se moría de la risa, me moleste y metí hasta las rodillas a la playa y comencé a patear para  mojarlo. Se metió rápido y se aventó sobre mi hundiéndome con el. No estaba hondo ya que estaba cerca de la orilla pero aun así, salimos a la superficie y yo moría de frío, me abraze de su cuerpo como un koala, el río y me tiro el agua, yo chille y me fui sobre el, salí rápido y corri a la orilla, aunque moría de frío ya había mucha arena en mi cuerpo.
Lo vi divirtiéndose un poco así que tan solo me senté a verlo, salio y se tiro sobre mi.
Lentamente me fue besando, y yo seguía sus besos anciosa, comenzamos a usar la lengua y el era el mejor en ese tipo de besos, bueno en todo. Mordí su labio y subí mis manos hasta su cuello jalando un poco su cabellera.
-No, no, no, perdon- dijo y se levanto y me ayudo a levantarme extendiendo su brazo ante mi.
-Pero que?- dije demasiado confundida.
-Quiero tu cuerpo, pero en verdad, ya no lo haremos- dijo y comenzó a caminar.
-Pero de que hablas?- dije caminando tras el.
-Te lastimo cada vez que lo hacemos- dijo acomodándose su hermosa melena húmeda.
-Es por eso?- dije y lo jale, provocando que el parara.
-Si, después de que lo hacemos siempre puedo ver que caminas diferente al otro día...- dijo sin mirarme a los ojos
-Pues es normal... Me dejas cansada, es genial...- dije tratando de ver sus ojos.
-No es normal, estas muy estrecha y no quiero hacerte daño, me encantaría tener tu piel contra la mía, pero se que te lastimo.- dijo se jaloneo y se safó de mi mano.
-No te mentire... Si me has dejado algunos moretones en los muslos... O tu mano marcada en mi culo, esos chupetones en mi cuello o en mis pechos- dije y lo tome de nuevo.
-Ves... Me pones mucho y en ese momento tan solo quiero darnos placer, pero no le pongo limites...-
-Pero amo que lo hagas... - dije y lo solté.
-En verdad te gusta?- dijo viéndome arquenado la ceja.
-si, si no, no te dejaría hacerlo... Me encanta como lo haces...- dije algo avergonzada ya que no hablábamos de eso.. Tan solo lo hacíamos y ya...
-Es que, estas estrecha y siento que no quieres hacerlo y por eso no te dejas llevar...- dijo mirando hacia la arena.
-Tan solo lo estoy... Ni siquiera creí que todo esto- dije y puse mi mano sobre "su miembro" en esos shorts ahora cafés ya que estaban empapados. -Pudiera entrar- al ver lo que le hice el tan solo cerro los ojos y los abrió lento.
-Tienes eso que me encanta Cate... Es muy dificil resistirme a ti- dijo y deslizo su mano por mi mejilla, la hizo llegar hasta mi nuca y ahí la dejo rodeando la mitad de mi cuello y me beso, de esa forma que no muchas veces se besa. Estábamos fríos, empapados, pero nuestros cuerpos se calentaron poco a poco durante ese beso.
Con su otra mano la paso por mi cintura y me pego a el bajándola lento hasta llegar a mi culo y a apretarlo.
-Vámonos-Dije terminando de besarlo.
-Con gusto- dijo mordiéndose el labio inferior.
Estaba destinado que pasaría esa noche.
Llegamos a la casa de sus padres, una casa preciosa y grande, color café claro, puertas negras y con algo de cristales, era hermosa y espaciosa, y Seb me mostró una bañera, la mas grande de la casa.
Tan solo quite mi ropa ahí y el tan solo disfrutó de eso, el igual se quito la ropa, y los dos entramos a la bañera. Teníamos que ver que tan grande estaba.
-Estas tan buena- dijo al verme agachar para abrir la regadera, pegándose a mi cuerpo, su miembro quedaba justo en mi culo, mi espalda al levantarme tocaba su torso y pecho.
-En verdad? En la ducha?- dije riendo.
-Que mas da el lugar cuando se tienen ganas- dijo susurrando en mi oído algo que lograba exitarme muy rápido y mucho mas esa voz tan fuerte.
Me gire y la agua comenzó a salir callendo suavemente sobre nosotros.
-Al menos quitemosno la arena- dije a risas y lo bese, puse algo de shampoo en mi pelo y el igual lo hizo. Me comencé a enjabonar lento y el muy rápido. Comencé a lavarme mi zona y el tan solo paro de hacer lo que el estaba haciendo. Tomó algo del jabón que uso especial para esa zona y me abrazo por la espalda, deslizó sus manos por mis muslos y hasta llegar a mi zona. Llego a mi clit y comenzó a mover su mano de arriba a abajo, movió mi cabello del cuello y comenzó a morderlo hasta el hombro.
-Por favor sigue- dije algo agitada por el movimiento de su mano, se detuvo en mi clit y comenzó a darle pequeños masajes lentos. Mi respiración comenzaba a acelerarse. Deslizó su mano por mi pecho, sujetando mi pezón entre sus dedos y moviéndolos lento, puse mis manos contra la pared, en mi cuerpo había un choque  de electricidad y el lo sabía. Comenzó a mover sus dedos sobre mi clit aun mas rápido y a estirar mi pezón lo mas que se podía.
-Te gusta?- dijo excitado en mi oído.
-Si, sigue sigue- dije sintiendo como sus dedos se llenaban de mi jugo y comenzaban sus dedos a chocar con el causando un sonido ahogado.
-Amor, ya ya ya para- dije pero fue tarde, mis ojos se pusieron en blanco y mi espalda se curvo chocando contra su cuerpo y mis piernas temblaban con desesperación.
-En verdad quieres que pare- me giro obligándome a verlo, su miembro comenzaba a ponerse erecto.
-Hasme tuya- dije sin pensarlo siquiera. El agua seguía callendo, chocando con nuestra piel ardiente.
-Claro- dijo pícaro, me cargo de la cintura poniéndome sobre sus piernas, me puso contra la pared del baño provocando que algunas cosas que había ahí calleran, pero no nos importo, lo bese, después paso sus labios de la barbilla a mi cuello y lamió, su pene debajo de mi, sientiendo como se levantaba y chocaba contra mi zona.
Me volvio a besar, nuestras lenguas chocaban jugando una con otra. Las gotas de agua que caían sobre nosotros se sentían frías a pesar de que el agua estaba muy caliente.
Con una mano sosteniendo mi culo y la otra sobre mi pecho apretando muy fuerte, de sorpresa tan solo lo metió provocando un gran grito de placer salir de mi, tal vez los vecinos lo escucharon y despertaron.
El tan solo río y me tomo del culo, yo tan solo pase las manos por sus hombros hasta su cuello. Saco su polla y volvió a meterla, comenzó a hacerme dar saltos sobre su ella. Se metía todo y yo mordía su cuello y jalaba su cabellera de tan bien que se sentía.
-Estas tan mojada- dijo y volvió a hacerme bajar, me azotó tan fuerte que mi culo se sentía caliente. Junte mis piernas tras su cadera y hice que la penetración fuera aun mas profunda. Me bajo y me puso dándole la espalda, curve un poco mis caderas y su gran miembro lleno de venas entro despacio, comencé a hacer la boca en "0" y a respirar aun mas agitado, cada vez que metía y sacaba había un gemido cada vez mas fuerte saliendo de mi, paso las manos por mis muslos llego hasta mi culo y lo volvió a azotar.
-Avisame cuando - dije agitada y me llegue estremeciendo todo mi cuerpo, pero el siguio penetrando una y otra vez provocando una segunda venida.
-Llegate una vez mas para mi- dijo exitado sin parar de meterla.
-Ya no puedo- dije agotada y sintiendo como mis músculos se contraían. Y mi clit latía tan fuerte.
-Estoy... Seguro ...que si...-Dijo pujando un poco.
Deslizó sus manos por mi zona y movió su mano rápido sobre mi vulva. Hizo mi cabellera en una cola  con su mano y me hizo levantar la cabeza para poder ver mi reacción.
Con todos sus movimientos llenaba mi cuerpo de energía y placer, estaba al tope cuando tan solo dijo
-Me vengo- dijo pujando y soltando un gran gemido. Salia y entraba lento causando que yo me viniera de nuevo y salio de mi.-Gracias- dijo saliendo completamente eh inclinándose un poco para besar mi mejilla.
Nuestra piel estaba sudada y ardiente, recuperamos un poco el aliento, nos ayudamos a lavarnos. Salimos y tan solo nos secamos, cepille mi cabello y lavamos nuestros dientes. Nos acostamos desnudos, y nos abrazamos como lo habíamos hecho la noche anterior.

Mi cuerpo estaba muy cansado, mis muslos y culo dolían, era doloroso pero placentero. Creo que deberíamos cuidarnos, aunque llevamos mas de 6 meses juntos, habíamos usado protección solo un par de veces, seria bueno quedar embarazada de el, no lo niego, pero se que todo lo que tenemos ahora se arruinara, debemos terminar los estudios y tener un trabajo seguro, claro si seguimos juntos...
Quería dejar de pensar mientras sentía como respiraba y roncaba un poco, pero no podía parar de pensar todo lo que la anciana dijo y que este subiendo de peso, lo envolví aun mas en mis brazos y cerré los ojos, dejándome llevar por su respiracion quedando dormida entre sus brazos.

Besos A La LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora