Llevo un dos meses acostada aquí. Mi panza sigue creciendo así que vale la pena.
Mi madre y padre vendrán hoy después de su viaje a España. Hoy será el día en el que les diré que serán abuelos.
Mi suegra fue por ellos para que no se fueran tan pronto ya mis suegra se los llevaría cuando ella quisiera.
Me ayudaron a darme una ducha y a vestirme lindo para la ocasión.
Mis padres llegarán en un dos por tres y me maquille un poco para no mostrar las pocas manchas que el embarazo me ha sacado por la cara.
Escuche como mi suegra reía fuerte así que imagine que era con mi madre.
-Ella está en la recámara de Sebastián- dijo y comencé escuchar los tacones de mi madre subiendo las escaleras.
Tome un cojín de la cama y lo puse sobre mi panza.
-Pasen- dijo mi suegra y abrieron la puerta.
-Cate no sales ni a saludar a tus padres- dijo mi padre algo molesto.
-Perdón pero no puedo- dije riendo un poco.
-La flojera no te deja- dijeron riendo y entrando a la recámara.
-La panza no me deja- dije pero ellos ni le pusieron atención.
-Engordarás mucho con esa vida sedentaria- dijo mi madre acercándose a mi y me jaló tratando de levantarme.
-Son órdenes del médico- dije riendo y hay fue cuando los dos me vieron.
-Por que?- dijeron los dos al mismo tiempo.
Descubrí mi panza y mi madre tan solo se tapo la cara con las manos y comenzó a llorar, derramando todo el maquillaje que usaba.
Mi padre tan solo me abrazo la cabeza fuerte y tocaba mi vientre muy brotado.
-Cuando pensabas decírnoslo?- decía mi madre emocionada brincando y abrazándome.
-Cuando estuviera segura de que lo tendríamos- sonreí y los mire así de emocionados.
-Pero por qué tienes que estar en cama?- dijo mi padre confundido.
-Me caí de senton hace unos meses y pues estoy en riesgo de perderla- dije encogiéndome de hombros.
-Haces muy bien, cuídate mucho por favor- mi padre decía y se sentó en la cama junto a mis piernas.
-Y donde está Sebastián, debería de estarte cuidando- miraba de un lado para otro en busca de Seb.
-Tiene que trabajar, el parto no estará nada barato y pues mucho menos la vida con una bebe-
-Pero si su familia tiene dinero y nosotros no tanto pero igual podemos ayudar- mi madre le extendió la mano a mi padre y las unieron.
-El no quiere aceptar el dinero de alguien más. Que ahora el es hombre de la casa y el sostén de la familia- trate de acomodarme para dejarles más espacio para que se sentarán.
-Pues si pero igual... cuando ocupen algo no dudes en decirnos.- los dos me besaron la cabeza y se levanto mi padre. -Volveremos en un momento- dijo ya cruzando la puerta.
No se a donde fueron que ya ni mi suegra estaba gritando y riendo fuerte como solía hacerlo. Me preocupé y le llame a Dalia.
-Que pasó Señorita?- dijo entrando deprisa a la recámara.
-De señorita no tengo nada- dije riendo a carcajadas provocando que ella igual.- a donde se fue mi suegra y mis padres?-
-No se. Tan solo salieron- se acercó a mi- puedo tocar tu panza?-
-Claro, ahorita no patea pero tráeme agua fría si la quieres sentir patear- ella tan solo extendió su mano pero al escuchar lo de la agua fría tan solo salió corriendo de la habitación gritando "Ahora lo traigo"
Llego a la habitación un momento después con un vaso lleno de hielos y agua.
-Toma- me lo dio y de inmediato puso sus manos en mi estómago.
Tome un poco de el agua y la bebe comenzó a moverse demasiado rápido y todo se notaba y sentía.
-Pero que feo- dijo con ansias.
-Espérate a que tengas uno tú- dije sonriéndole tocando mi panza para tocar igual la bebe.
-No yo no quiero. Además se me acabaría el trabajo - eso realmente la detenía?
-Tienes novio o estás casada o algo? Perdón que lo pregunte- dije algo tímida y avergonzada de habérselo preguntado.
-Tenía novio... terminamos hace un par de meses- dijo triste.
-Quieres hablar sobre eso?- dije tomando su mano y la puse sobre mi vientre.
-No tan solo... no son para mi las relaciones- al escuchar eso tan solo recordé como yo muchas veces decía eso mientras lloraba al terminar una relación.
-Encontraras a alguien-
-Siempre dicen eso, ya a mis años ya no es tan fácil- sonrió falsamente y se levanto de la cama.
-Te presentaré a unos amigos- como si realmente los tuviera.
-No tranquila. Por ahora así estoy bien- sonrió pero sabía que le dolía.
Escuche que abrieron la puerta de la entrada y entraron mis madrey mi suegra platicando.
-Llegaron... debo irme- dijo y tan solo se alejó de mí dejándome sola.
Mi madre subió corriendo las escaleras y entro viéndome extraño y con una sonrisa algo rara en ella.
-Por que me miras así?- dije cerrando los ojos un poco.
-A que horas sale Sebastián de trabajar?- dijo sin moverse de su lugar.
-A las 8 más tardar, por qué?- dije algo preocupada pensando en todas las posibilidades e ideas que estaban pasando por la cabeza de mi madre.
-Okay- salió deprisa
-Mama vuelve! Madreeee!- dije a gritos para que volviera.
-Tranquila que escándalo- dijo entrando con calma unos minutos después.
-Que está pasando?- dije viéndola con detalle. Algo estaba pasando y me lo ocultaba.
-Nadap- dijo sonriendo sonando como niña pequeña.
-Dime- comenzaba a molestarme.
-Dile a Sebastián que llegue a su casa al salir del trabajo- se sentó junto a mi y sonreía de oreja a oreja.
-Que hicieron?- dije curiosa.
-Nada, tan solo dile que llegue allá- tocó mi vientre y comenzó a besarlo
-Okay- tome mi móvil y le escribí "nuestros padres actúan raro y ahora mi madre dice que llegues a la casa antes de venir a esta." El nunca tardaba en responder era hermoso.
"Por qué? 🙄Debería de hacerlo?" Dijo de inmediato.
"No lo se🤷🏽♀️, pero yo tengo la duda"
"Entonces tendré que ir, espérame un poco más tarde entonces 🤔" "Te amo, cuídate y cuídala"
"Te amo, maneja con cuidado si?"
"Llegare bien tú tranquila"
Tan solo lo leí y lo deje en el buró de la cama.
-Te sientes bien? Todo está bien?- dijo mi madre sacándome de mis pensamientos.
-Si ma, ya todo está mucho mejor. Se mueve muchísimo- dije al sentir como si codo o rodilla pasaban por mi vientre haciendo una montañita a su paso.
-Así eras tú- rayos ya nos pusimos sentimentales.
-Dime que planean- dije tratando de no pensar en otras cosas.
-Como nos dijiste que tenían algo de problemas con el dinero y así... ya después de las 8 sabrás por parte de Sebastian- esto no era bueno. Seb tal vez se moleste si ellos hicieron algo en nuestra casa...
-Necesito saber que hicieron. Tal vez a Seb no le vaya a agradar tanto...- tenía miedo de la reacción de Seb.
-Tú tranquila les gustara. Además somos los abuelos y es nuestra única nieta la tenemos que consentir- mi madre sonreía con gran emoción. Se notaba que al estar aquí mi padre había cambiado muchas cosas en ella.
-Eso espero- me encogí de hombros -Mejor dime. Como van las cosas con mi padre?- dije mirándola pícaramente.
-Demasiado bien, nuestro viaje fue tan hermoso y romántico, y el sexo ufff- la interrumpí
-no necesito saber eso madre- dije a carcajadas.
-Como si tú no lo hicieras- dijo a carcajadas tocando mi vientre.
-Pues es obvio que si pero no te lo cuento- ya extrañaba a mi madre sonriendo.
-Yo me daba cuenta- dijo riendo -supe de inmediato cuando la perdiste y cada vez que volvías a casa, te conozco- esto no era bueno como carajos se dio cuenta?.
-Como te diste cuenta cuando la perdí?- dije demasiado confundida.
-tu mirada cambio, estabas un poco feliz, ya no parecías mi niña después de eso...-
-Y por qué no me dijiste nada?- dije riendo tratando de no ponernos sentimentales.
-Lo iba a hacer por qué ni siquiera tenías novio que yo supiera en ese tiempo, luego me presentaste a Sebastián eh igual me ganaba la misma, no la recuperarías con una regañada.- esto era demasiado confuso. -Y por las cuentas que tengo la perdiste cuando empezaron- esto era demasiado incómodo.
-Y no me arrepiento- dije a carcajadas provocando que ella igual riera.
-Se nota- aclaró su garganta -Y dime, es bueno en la cama?- KHE!???
-Por que me preguntas este tipo de cosas?- esto me ponía nerviosa.
-Solo preguntó, siempre dicen que los morenitos lo hacen mejor- ella soltaba carcajadas pero yo tan solo pensaba en que decirle.
-Ay ma- dije sintiendo como mi cara se sonrojaba.-Pues si lo hace increíblemente bien- me sonrojaba.
-Debería dejar a tu padre por un moreno - dijo mordiendo su labio.
-Madre- dije de golpe tratando de sonar entre molesta y sorprendida.
-Que? - dijo haciendo una cara de inocente.
-Dejemos de hablar de esto si? -ella asintió a carcajadas- mejor dime. Donde está mi Pa?- me asomé a la puerta pero el no se veía.
-Que quieria quedarse en el lugar al que fuimos y comprar cosas que ocupaba.- se encogió de hombros.
-En verdad no me dirán que están planeando?- en mi cara se hacía un enorme puchero.
-No y cambia esa cara que sabes que no me gustan los berrinches- decía riendo de mis pucheros y se levanto.
-Está bien- dije y comencé a llorar demasiado falso.
-Eres una mal actriz- me dio un sape y mi padre entro a la habitación.
-Mireeeen lo que compreeee!- puso las bolsas sobre la cama. La mayoría de bolsas eran ropa para bebe o para madres. Realmente no había pensado en que ocupábamos ropa para ella, Seb si le había comprando unas cuantas cosas pero no eran muchas.
-Mira Cate están hermosos- sacaba mamelucos, baberos biberones shampoo y demás.
-No hubieras gastado tanto Pa- dije viendo el precio de un par de cosas.
-Será mi nieta tendrá todo lo que ella quiera y necesite- decía emocionado sacando todo de las bolsas.
-Gracias, a los dos, muchas gracias- sentía ganas de llorar. Nunca creí que mis padres se emocionarían tanto. De mi padre lo veo algo normal pero mi madre era muy diferente.
-No tienes que agradecer nada- mi madre dijo y comenzó a ayudarme a doblar toda la ropita y guardar todo el talco y shampoo.
Ellos se quedaron a comer, en la mesa pero cuando yo comí igual subieron a la recámara, hasta mi suegra estaba ahí disfrutando de estos momentos. Pero aún así yo estaba muerta de ansia por no saber que pasaba o que habían hecho mis padres y suegra.Pasaba de las 9 y Seb no volvía.. no sabía si preocuparme o tan solo pensar que el estaba bien y era obvio que si le hubiera pasado algo ya lo sabría.
Me estaba quedando dormida cuando el entro.
-Amor- dijo con flojera y viendo si seguía despierta.
-Hola mi vida- me fire para estar viéndolo.
-Nuestros padres se han vuelto locos- comenzó a desvestirse en cuanto cerró la puerta, venía cansado y eso era obvio.
-Por que? que hicieron?- moría de curiosidad
-Compraron toda la recámara para la bebe y ropa a montones me tocó acomodar todo- decía agotado.
-Debiste haberla dejado así, vienes cansado- pobre de él.
-O era yo o eras tú así que prefiero mil veces yo- eso era hermoso lo acepto pero... pobre de el.
-Ven para acá- dije estirando mis manos viendo como se quitaba la camisa.
Ah engordado un poco y tiene los antojos aún peores que los míos, y pues los dos tenemos una vida muy sedentaria ahora, yo sin poder pararme y el sentado en una oficina por horas.
-Nuestros padres no debieron de haber comprado tanto, no sé si enojarme o tan solo agradecerles- decía metiendose lentamente a la cama.
-Tú tan solo no te preocupes y duérmete- lo abrace un poco y acomode mi cabeza entre su cuello.
-Es que no quiero eso... Yo soy el papa yo quería comprárselo...- aclaró la garganta -No me gusta recibir cosas así. Eso es mucho y aunque ella se lo merezca se que yo debí comprárselo-
-Ya, ya- bese su cuello lento y el se levantó un poco y comenzó a besarme.
-Sabes que no debes besar mi cuello así- dijo pícaro y me encantaba. -Muero por tenerte, ya tenemos que esperar dos meses más y ya podré quitarme todas las ganas que te tengo- era hermoso y excitante, me mojaba tan solo pensar en todo esto.
-Un mes- aclare.
-Dos, cuando la tengas y el mes que tienes que descansar para que te recuperes del parto- tenerlo sobre mi era tan uff
-bueno si..- abrace su cuello y lo atraje hasta mi.
-Sabes que te amo?- me besó despacio y yo asentí con un "mjm" al besarlo. - y que te deseo?-tome sus mejillas.
-Sabes que yo lo sé todo- dije sonriendo y el me volvió a besar.
-ya solo faltan dos meses más- río un poco y se dejó caer a un lado de mi.
-Ya pronto la tendremos en nuestras manos- me emocionaba tanto.
-Tan solo eres simplemente perfecta - decía mientras se cobijaba y me abrazo.
-Ya estás delirando. Debes dormir- decía a carcajadas y me giré para meterme entre su cuello y que el solo me acorrucara.
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Besos A La Luna
Teen FictionEras, eres y seras especial... Sebastian Roshbert y Caitlin Werwood tal vez no sean el uno para él otro o tal vez lo sean?.