Era nuestra ultima noche en la cabaña, mañana al amanecer teníamos que volver a la cuidad. No queríamos pero aun así debíamos hacerlo.
Estábamos cocinando los dos haciéndonos una cena algo grande para festejar todos los momentos que hemos pasado juntos.
Alguien toco a la puerta, algo extraño estando tan lejos de la cuidad, aun así Seb se quedo tan solo revolviendo algunas cosas así que yo fui a abrir la puerta.
Era un hombre alto y de piel pálida. Abrí un poco y el solo sonrió.
-Casa de la Familia Roshbert?- dijo con una voz algo profunda pero amable.
-Am si, es aqui- dije nerviosa y mire de vuelta a la cocina para ver si Seb salia pero no lo hizo.
-Podría firmar aquí de recibido -me dio una tableta con un papel y un lapicero. -Por favor?- la tome y el se devolvió a la Van que manejaba.
La firme y el volvió con una caja algo grande.
Abrí la puerta aun mas para que pasara y la colocará dentro.
-Tome. Muchas gracias- le devolví la tablilla y el la tomo y sonrió.
Cerré la puerta al ver que salio y volví a la cocina.
-Le llego algo a tu madre- dije y volví a picar las zanahorias que picaba antes de que tocaran
-Que te hace pensar que es para mi madre?- dijo y lo volte a ver, el solo sonrió pero no dirigió la mirada a mi.
-Juegas no? No sera para mi, lo es?- dije parando de picar.
-Ve a ver- dijo sonriendo y se giro llendo hacia en lavamanos. Se enjuago las manos un poco pero no me vio. Limpie mis manos con una toalla roja que estaba a un lado de la el plato donde colocaba las zanahorias.
Me devolví deprisa a la sala donde había quedado la caja y la abrí lo mas rápido que pude.
Dentro de esa caja simple de cartón había una plateada con un moño gigante.
Rompí el listón del moño y abrí la caja plateada.
Salio un globo blanco enorme acompañado de dos globos pequeños rojos flotando. Me aleje un poco al ver que salieron muy de golpe y me espante.
Al alejarme un poco mas, mire que algo estaba escrito en el globo blanco.
"Te casarías conmigo?" en letra cursiva.
Mi pecho se calentó y deje de respirar por un momento. El listón del globo blanco tenia algo colgando de el.
Me acerque... Tapando mi boca y comence a llorar, caí sobre mis rodillas y tan solo me tire al piso llorando. Esto era tan especial...
-Sebastian!- grite llena de emocion levantandome y tomando el anillo que colgaba del listón.
-Te gusta?- dijo riendo parado en la puerta de la cocina con las manos en sus bolsillos traseros.
-Eres un idiota...- dije levantándome y corriendo hacia el, me colgue de su cuello y entrelace mis piernas en sus caderas.
-Entonces que dices? Te casarías conmigo?- dijo sosteniendome del trasero para que no me callera.
El anillo seguía en mi palma.
Era tan brillante y esos hermosos diamantes haciendo una linea a la mitad del anillo.
-Por que me haces eso?- dije llorando sobre el.
-Hacer que?- dijo riendo.
-Sabes que no necesitabas hacerlo así. Con globos tonto?- dije riendo y me separe un poco de su pecho. -Y claro que quiero ser tu esposa.- Sonreí y lo bese con fuerza.
Me baje de el y el tomo la mano donde estaba el anillo. Lo tomo y luego lo deslizo por mi dedo corazón.
-Cuanto estuviste planeando esto?- dije abrazándolo fuerte sumergiéndome en su pecho.
-Como dos meses- dijo riendo hermosamente.- Desde que lo hicimos en la casa y mi padre estaba ahi- dijo sonriendo.
Comenzó a oler a quemado y tan solo nos soltamos y corrimos a la cocina, apagamos todos los quemadores de la estufa y nos pusimos a checar la comida. La pasta se había secado y la salsa para la pasta estaba quemada.
-Deberíamos preparar otra salsa?- dijo sacando la cazuela de la estufa.
-Preparemos la ensalada y pues hay algo de salsa enlatada. - dije encogiendome de hombros.
El solo se me quedo viendo y al anillo.
-No te quedes ahí, ayudame a hacer de comer- dije arrojándole el trapo para secar los trastes.
-Y si encargo una pizza?- dijo riendo y fue a los cajones a buscar la salsa.
Tan solo tome otra caserola y encendí la estufa.
-Hoy festejaremos bien- dije viendo la demás comida.
-Habrá hasta alcohol- dije riendo.
-Trajiste alcohol?- dijo girándose rápido para verme.
-Vodka esta bien?- dije riendo sacando la botella de un cajón bajo el lavatrastes.
-Eres una mala influencia- dijo tapándose los ojos con la mano izquierda.
-Algo así-, saque unos vasos, el jugo de arándano del refrigerador y algo de hielo. Puse algo de Vodka en el suyo y hielo y al final el jugo. Para el mio le llene hasta medio vaso de Vodka y un poco de jugo.
-No tomes tanto- dijo y le dio un sorbo a su vaso.
Nos tomamos eso mientras terminamos de hacer la comida, prepare otras dos bebidas iguales y coloque todo en la mesa.
Comimos y tomamos hasta acabar con la botella.
Mis labios comenzaron a adormecerse, y sabia que ya el alcohol se me estaba subiendo. Ni siquiera limpie la cocina solo fui ayudándome con la pared a llegar al sofá. Me senté ahí y Seb fue tras de mi.
-Te dije que no tomaras tanto- decía pero ya su voz sonaba diferente.
-Estoy bien, deberíamos ir a comprar otra- decía a carcajadas. Era incontrolable no reirme.
-Vamos, ya estas muy borracha- me dio la mano para levantarme.
-Mejor vente aqui- tome su mano y lo jale sobre mi.
-Cate, controla- dijo riendo acomodándose sobre mi.
Me recoste y el seguía sobre mi.
-Eres un cabron- dije y comencé a quitarle la camisa.
-Cate- dijo molesto y me beso despacio, coloco su dedo índice sobre mis labios y solo hizo un "shu shhhh" para que guardara silencio.
-Vamos a la recamara, si?- dije coqueta poniendo mis manos en su abdomen y bajándolas lento.
-Te emborrachare mas seguido- dijo y se levanto lento -Wuuu todo se mueveeee- dijo gritando a carcajadas.
-Ayudameee- dije extendiendo mis manos para que el me ayudara a levantarme.
Extendió sus manos y me cargo. Fuimos caminando despacio con miedo de caernos. Abrazados pero caminabamos de lado a lado, y sólo moriamos de risa.
Llegamos a la recamara y el me levanto y me aventó sobre la cama.
-Con cuidadooo, sigo con vida, no me maltrates- dije quejandome y el solo se me trepo lento. Quito toda mi ropa y yo encantada de la vida. Solo reía y daba vueltas por la cama.
-Quedate quieta.- dijo y se quito la camisa de prisa, y se bajo el pantalón de golpe.
-Obligame- Dije riendo a carcajadas y moviéndome de un lado a otro.
-Eres una loca- dijo y rápido me detuvo y me jalo los pies, y se subió lento sobre mi.
-Te amo- dije al verlo subir. Esto de hacer el amor era tan divertido y lindo, excitante y tan placentero.
-Yo mucho mas- sonrió un poco con cara coqueta.
Abrió mis piernas lento y se puso entre ellas, deslizo sus manos suavemente por mis muslos haciéndolos erizarse, desde las rodillas hasta mi parte, bajo suave sonriendo y comenzó a besar mi abdomen besando lento para abajo.
Paso su lengua despacio desde mi clit hasta mi cuello, comenzó a morder suave y a besarlo, con su mano izquierda manteniendo el equilibrio y con la otra tan solo dándole unas buenas caricias a mi cuerpo.
Sin nisiquiera pensarlo dos veces tan solo se levanto un poco y lo introdujo lentamente, haciendo que mis ojos se pusieran en blanco. Sintiendo ese placer incomparable.
-Oh Dios...- dije en un susurro con la respiración cortada al notar como la metía y sacaba.
Se recargo en sus dos manos y dar las penetraciones aun mas profundas y fuertes.
Cerré los ojos, pero algo ocurrió. Al cerrar los ojos no sentía que fuera el, no sentía que fuera Seb, me llene de miedo y tan solo abri lo ojos y de alguna forma tan solo me senté ayudándome de las manos teniendo a Seb frente a mi mirándome extrañado.
Junte las piernas y me hize bolita.
El no sabia que hacer. Maldito alcohol... Me había hecho recordar cosas que no quería recordar...
-Estas bien?- dijo con su voz aun algo distorsionada.
-Perdón, no puedo- dije metiendo la cabeza sobre mis rodillas y el gatio hasta donde yo estaba y se sento a un lado de mi.
-Que pasa?- dijo tocando mi cabello suave.
-Perdón pero, amm tan solo... Iré a darme una ducha- dije aun sientiendo mis labios adormecidos, me levante lento por que todo se movía, y me sentía muy mareada.
-Quieres que te ayude a llegar a la ducha- dijo levantándose tomando mi codo.
-No!- grite al sentir sus manos sobre mi.-Perdón.. No, yo puedo llegar- dije tratando de olvidar todo eso en lo que había pensado.
Sus ojos se abrieron muy grandes al ver mi reacción, y tan solo me soltó y volteo al piso, se sentó lento en la cama y yo solo seguí caminando hacia la bañera de la recámara.
No sabia que había ocurrido, tan solo sentí las manos de aquellos hombres... Tan solo fui y abrí la agua tibia y me senté en la taza de baño esperando a que la bañera se llenara. Mire con detalle el anillo que Seb me acababa de dar... Mire que el estaba detrás de mi pero no dije nada y tan solo me metí a la bañera ya estaba un 75% llena. No lo volte a ver ni nada.
-Sabia que esto algún día pasaría, bueno los dos lo sabíamos- dijo y se lavo la cabeza con agua fría en el lavamanos.
-Perdón...- fue lo único que pude decir. Lo vi recargado en el lavamanos con unos shorts rojos flojos puestos.
-No te disculpes, sabes que no tienes ni tuviste la culpa de nada- se seco la cara con la toalla que colgaba a un lado del lavamanos.
-Me harias un café?- dije tratando de que saliera y me dejara sola...
-Claro...- fui hacia mi y beso mi cabeza y salio.
Por que siempre algo nos arruina la felicidad... Realmente quería lidiar con esto toda mi vida. Y si el no me aguantaba mas tiempo...
Esto es confuso... Amo a Seb no quiero que el este con alguien como yo... Pero que debo hacer si realmente lo amo... Y no quiero dejarlo de nuevo...
Todo ese tipo de pensamientos pasaban por mi cabeza hasta que lo vi pararse en la puerta con una taza de café en mano sobre un plato.
Tan sólo camino hasta mi y me lo dio.
-Toma- dijo ya no tan mal como sonaba antes..
-Gracias..- dije tomándola pero sin verlo a los ojos.
Se sentó en la orilla de la bañera cerca de donde mis rodillas se encontraban.
-Te sientes mejor?- dijo tratando de verme a los ojos...
-Mjm- dije dándole un sorbo al café.
-Que paso?... Dime para que al menos te pueda ayudar...- sonaba triste.
-Y si nos damos un tiempo?- dije sin verlo.
-Como un tiempo? No entiendo- dije sentándose erguido.
-Pues que tu andes con otras chicas y que intentes con alguien mas...- volvi a tomar del café.
-Estas jugando no?- dijo colocando la cabeza sobre sus manos y poniendo los codos en las rodillas.
-No.. Por eso te pregunto, no quiero forzarte a quedarte conmigo antes de que intentes con alguien mas- decía mientras miraba el anillo detenidamente sosteniendo la tasa.
-No nos vayamos a extremos. Sabes que yo te amo a ti y sabes bien que no eres la primera novia que tengo, además ya me conoces Caitlin- al decir eso yo lo volte a ver ya que nunca me llamaba Caitlin. -Yo si ando con alguien es por que encerio quiero que este conmigo... Y no no quiero intentarlo con alguien mas, pensaras que tan solo no te querré por lo que te paso pero aun después de eso yo te amo mas cada día que pasa y...y... No quiero volverme a alejar de ti... Ya a sido un año, no lo entiendes?- decía sin mirarme...
-Es que.. Es que... No, no quiero que pase esto de nuevo...- tome un sorbo del café para que el nudo de la garganta se quitara.
-Que pase que?- su voz estaba molesta y triste... Me miro y sus ojos estaban algo rojos.
-No senti que tu eras el que... Pues me... Tocaba- no quería verlo... No quería ver su reacción al decir eso.
-Explicate..- dijo y bufaba un poco. -Sentías que eran aquellos cabrones no?-
-Si...- dije y puse la tasa de café casi llena en el suelo mojando algo el piso al salir un poco de la bañera.
-Puedes ir a terapia... O hacer algo para olvidarte de eso...- no se a cual de los dos nos dolía mas este tema...
-No sera fácil.. Pero lo olvidare yo sola, tranquilo tan solo necesito tiempo...- me sumergí lento en el agua dejando mi cara a flote.
-Con eso quieres decir que no andemos mas? O solo un tiempo... Pero estando juntos?- dijo volteando me a ver...
-Toma- deslice mi anillo por el dedo y saque la mano del agua estirando el brazo para que el lo tomara.
El solo lo tomo triste...
-Daselo a alguien quien lo merezca- y sumergí la cara.
Sentí como el metió su mano y tomo mi mano poniendo el anillo en mi palma.
Yo salí del agua deprisa al sentir eso, el se levanto y me sonrió.
-Ya se lo di, se lo di a alguien que realmente lo merece- y camino fuera de la bañera.
Me hizo soltar una sonrisa. Volvi a ponerme el anillo en el dedo y me salí del agua.
Abrí la coladera y me enrrolle en mi toalla.
Salí y entre a la recamara.
El tan solo levantaba toda la ropa que habíamos tirado, ya la cama estaba acomodada, fui hasta el closet y tome la bata rosa claro que el me había comprado.
Tan sólo tire la toalla y me puse la bata. El junto la toalla y yo ate la bata a mis cintura. El me abrazo por los hombros poniendo sus manos juntas sobre mi pecho.
-Te amo Cate, de pendejo te dejo ir... Borremos esos recuerdos entre los dos... No quiero que nos volvamos a separar.- me gire para tenerlo de frente.
-Ya se... Yo tampoco quiero que terminemos, ya hasta se me bajo la borrachera- dije con cara triste.
-Vengase pa'aca- me abrazo por la cintura y me beso, coloco mi cabeza en su pecho y me mantuvo ahí, alisando mi cabello empapado. Era tan hermoso escuchar sus latidos.
A pesar de todo lo que había pasado el día de hoy, sabia que lo amaba. Que el era parte de mi vida y no quería que el volviera a pasar por lo mismo.
-Es hora de dormir- dijo y se separo de mi caminando hacia la cama.
Saco unas cobijas de bajo de la cama y su almohada. Camino hacia la puerta y yo me quede parada.
-A donde vas?- dije con una voz de niña.
-A dormir a otra recámara- abrió la puerta.
-Quedate aquí, si?- estire mis manos hacia el y el sólo se giro despacio a verme.
-No quiero que te sientas incomoda- camine hacia el y me le colgué como koala.
-Vamos a dormir- dije acorrucandome en su cuello como una niña pequeña.
-Vamos- dijo y camino conmigo hasta la cama recostandome ahí y después el, nos metimos a las cobijas y nos acorrucamos como hace mucho no lo hacíamos. Esa forma linda y tierna de dormir juntos cada vez que alguno de los dos tenia miedo por algo... Era increíble.
-Mañana sera otro dia- dijo, beso mi cabeza y me abrazo aun mas, era increíble poder sentirme protegida con el, aun después de todo esto...
El era el amor de mi vida.
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Besos A La Luna
Teen FictionEras, eres y seras especial... Sebastian Roshbert y Caitlin Werwood tal vez no sean el uno para él otro o tal vez lo sean?.