BAJO LLAVE

IX.

-¿Es que me sigues?

-Pero si es la preciosidad que casi me llevo por delante el otro día...-Dijo con una sonrisa.

-Deja de enviarme rosas, ¿vale?-Dije intentando  sonar  no muy borde.

-¿Por qué? ¿No te gustan?

-Sí, sí que me gustan. Son preciosas pero mi mejor amigo se ha enfadado conmigo.

-¿Por las rosas? Yo creo que está colado por ti.

-No lo está.-Repliqué irritada.

Últimamente me estresaban más de la cuenta ese tipo de comentarios respecto a Álex y mí.

-¿Estás enfadada conmigo?

-No.

-Entonces aceptarás ir a dar una vuelta conmigo, en mi moto.

-En realidad, no.

-Joder, ¡¿por qué eres tan difícil?!-Cuestionó impaciente, cosa que me hizo sentir mal. En este día de mierda, además de haber hecho enfadar a mi mejor amigo también le había enfadado a él.

-¡Si tan difícil soy, no me hables y punto!-Grité harta.

-Sí te voy a hablar porque me gustas y mucho.

Mierda. Me sonrojé al escuchar aquello y él no lo pasó por alto, porque sonrió. Besó mis labios castamente y antes de que pudiera reaccionar, me cogió de la mano.

-¿Vamos?

De nuevo dudé. Aunque pensándolo bien, si no me secuestró la primera vez, ¿por qué lo iba a hacer ahora? Sin duda tenía que dejar de ver tantas pelis de miedo con Álex. Deseché esos pensamientos y miré a Dani, el cual esperaba una respuesta por mi parte.

-Vamos.-Acepté sonriente.

Me condujo hacia dónde se encontraba su moto y primero subió él. Acto seguido subí yo y nos colocamos los cascos.

-¿Es la primera vez que montas en moto?

Negué con la cabeza y arrancó.

Mi primera vez había sido con mi mejor amigo.