El Poder de AMAR (#2CYTZ)

FIN

Llegamos al castillo, y las princesas vinieron a abrazarnos fuertemente.
Cenicienta se coloco encima del escenario.
-La guerra ha terminado y la paz esta en nuestras tierras. Gracias, pueblo mio, por luchar con valor y energía, sin vosotros nada podría haberse conseguido- paro un poco para tomar aire- ahora, podréis volver a vuestras tierras. Aquí, en el castillo, seréis bienvenidos siempre, pues no soy vuestra reina, soy vuestra mas humilde servidora- el pueblo ovaciono hacia Cenicienta.
Todos se fueron marchando, pero quedaron algunos.
Cenicienta se acerco a Lumia- vete amiga mía, pues se que tu lugar no esta aquí, sino con tus iguales- dijo mientras apoyaba su frente con el hocico de esta.
-No...- no la dejo terminar
-Seréis siempre bienvenidos, además, organizare un baile real cada mes al que estaréis obligados a asistir- dijo Ceni mientras se separaba de ella riendo.
-Estoy orgullosa de ti Cenicienta- dijo para luego irse trotando hacia donde estaban sus amigos.
-Bueno- dijo Tafansy acercandose- me temo que yo también me voy- dijo el.
-No- dijo Ceni- te necesito para gobernar.
-Ay niña mía, creo que dejo mi creación en buenas manos- dijo el haciendo un portal con su cuerno- pero si algún día me necesitas, solo tienes que buscarme- dijo riendo, relincho y salto al portal.
-Adiós....- dijo ella sonriendo. De repente algo se movió en su hombro y vi como sonreía- Añil, ¿tu que harás?- dijo ella.
-Bueno, pues, creo que me tendré que quedar en palacio a ayudarte en los temas reales, ya que vosotros, zoquetes, no podréis solos- nos dijo mirándonos.
-Nunca cambiarás Añil- dijo ella con su risa melodiosa.
-Si fuese distinto ya no seria Añil reinecilla- dijo este bajando de su hombro.
Todos giramos a ver el castillo. Vi como Ceni hacia un pequeño gesto con la mano. No le di importancia hasta que al girar mi cabeza hacia el castillo, vi que ya no era el mismo castillo. Me explico, ahora era mucho mas impresionante. Tenia vidrieras de colores en todas las ventanas, y eso no era lo mas alucinante. En las vidrieras estaba la historia de los Elegidos, nuestra historia.
Me gire hacia ella, miraba su obra orgullosa y sonriente.
-Parece que ya ha terminado toda esta loca aventura- dijo Harris
-¿Esto?- dijo Ceni girándose a vernos- esto solo acaba de comenzar chicos- sonreímos ante su respuesta- ahora, vamos adentro.
-Bueno, yo antes, quiero hacer una cosa- dijo tímidamente Eric. Se arrodillo delante de Scarlet- Escarlata, ¿me harías el honor de pasar lo que resta de nuestras vidas a mi lado?- dijo sacando una caja de su bolsillo. Ella se puso las manos en la boca emocionada
-¡Oh dios!- grito- claro que si- se tiro en los brazos de este y se hundieron en un profundo beso.
-A ver cuando van pidiendoselo chicos, nos haremos viejas a este paso- dijo Caperucita descarada, como siempre, hacia nosotros, haciéndonos sonrojar.
Me gire hacia Ceni y me arrodille. Ella sonreía abiertamente, y de seguro tenia el corazón en la boca, al igual que yo- Ceni, te quiero, desde que te vi, me gustaste, me fascinabas con todas tus facetas. Era un cretino, desde luego- sonreí al recordar viejos tiempos y ella rio- pero ahora, estoy aquí, y he vivido el perderte, el no saber si volverías y el saber que no lo harías, por eso, Cenicienta, se que te amo mas que Tafansy a sus tierras, así que, ¿me harías el honor de casarte conmigo?- dije con los ojos cerrados.
-Si- chillo saltando sobre mi.
Hice aparecer con magia un anillo forjado por enanos de lava con una piedra marina incrustada. Ventajas de tener algunos contactos.
Se lo puse en el anular, justo u talla, le quedaba a la perfección.
Nos besamos y note como el tiempo se paraba. Nos separamos lentamente y entonces vi que literalmente el tiempo, se paro.
-¿Como?- dije extrañado.
-No pensabas que me iba a perder la petición de mis amigas por estar pendiente de la mía, ¿no?- sonrió y chasqueo los dedos.
Justo en ese instante, mis amigos se arrodillaban frente a sus parejas.
La mire fijamente. Era hermosa y única. Noto mi mirada y fijo sus ojos en mi, esos bonitos ojos color mar. La sonrei enamorado. Ella me devolvió la sonrisa y volvió a centrarse en la situación que no quiso perderse.
Y ante el nuevo palacio, tras una dura batalla, después de la salvación de la guerra, vendría la boda de los reyes, y quien sabe, tal vez... ¿Algun heredero?
Desde luego, esta historia no acaba, todavía queda mucho por contar, mucho por vivir.
Pero si algo habíamos aprendido, es que no hay nada mas fuerte que el poder de AMAR, y lo tendríamos siempre presente, y nuestras generaciones futuras, escucharían nuestra historia, y de seguro, lo aprenderían.
Porque si algo tiene de ventaja vivir para siempre, es que podre ser yo mismo quien les enseñe lo que un día salvo a su reino, el AMOR.

                     FINAL