Cudral no me daba miedo ni el ni muchos menos sus vampiros sin embargo me alegraba salir de su Reino, sólo espero que con los lobos me vaya mucho mejor, aunque ahora que lo pienso bien Licaón da un poco de miedo.
Mientras corríamos por el bosque unos lobos enormes comenzaron a rodearnos, Arnol se detuvo y comenzó a rugir, los lobos que nos rodeaban comenzaron a mostrar los dientes y a rugir más fuerte pero Arnol no paraba, tenía miedo pero no se los demostraría por nada en el mundo así que me baje de Arnol y comencé a sobar su cabeza para calmarlo—No quiero hacerles daño, sólo busco a Licaón ¿Pueden llevarme con el?
Agradecí mucho que mi voz no sonará quebrada o algo por el estilo.
Uno de los lobos se acercó un poco más, Arnol comenzó a gruñir más pero hice que se calmara, el lobo comenzó a olerme y aunque moría del miedo me quede quieta para que me reconociera. Pero claro como si la situación no fuera mala Nixie se despertó y comenzó a volar en la cara del lobo—La suavecita y yo ya podemos pasar ¡Quiero ver a Licaón!
—Discúlpenla estaba dormida y se va parando, no le hagan nada
El lobo se transformó en humano, cabello negro, ojos negros y un poco blanco, estaba sin camisa y con un pequeño pantalón
—Hueles a Ambar ¿quien eres?
—Soy Celeste Naris, hermana de Ambar
—La princesa perdida...
—¡Si! Suavecita y yo ya podemos pasar
—Si disculpen, pasen, ellos los guiaran, yo volveré pronto, Bienvenida a casa Celeste
—Gracias
Me monte en Arnol mientras el seguía a los lobos, Nixie volaba a toda velocidad, parecía conocer el camino y ahora que lo pienso nunca la había visto volar tan rápido, ahora si que demostraba ser un hada del aire
Llegamos cómo a una pequeña aldea con cabañas en todos lados, en medio una enorme fogata apagada, también por todos lados que uno veía habían niños caminando y otros transformandose en lobos bebés, habían madres con hijos en brazos, casi no había hombres, me pareció muy raro, los más pequeños comenzaba a acercarse así que me baje de Arnol
—Arnol y si te quedas a jugar con ellos
—Si quieres
—No les hará nada jugará con ellos —dije a los lobos que comenzaba a tranformarse en personas
Deje a Arnol con los niños y seguí a Nixie a la cabaña más grande, toque dos veces y espere en la puerta.
Se abrió rápido y vi a Nixie abrazar la cara de Licaón que estaba en su forma humana, pensé que Licaón se enojaria o algo pero lo contrario la recibió muy felizmente—¿Se conocen?
—Si suavecita, los lobos y la hadas se llevan muy bien y el ha ido a él reinó y yo he venido, una vez que me enferme el me llevo algo con lo que mejore
—Nixie es una buena hada
Me daba hasta risa, como un hombre tan grande y fuerte que daba la impresión que podía matar a todos los lobos del lugar podía ser tan tierno con las hadas, era hasta adorable
—Bueno, Bienvenida a mi Reino
—¿Donde están los hombres? Vi muchas mujeres y sus hijos, pero ¿y los hombres?
—Vuelven en las noches con comida mientras que otros protegen a su gente, uno nunca sabe si los demonios se escapan
—¿Los demonios? ¿No todos están en armonía, siendo felices y la paz y eso?
—No soy el mejor para contarte esa historia, estoy ocupado pero eres libre de hacer lo que quieras, los lobos como dije están a tu disposición, Chao Nixie
Licaón acarició el cabello naranja de Nixie y entró de nuevo, juntas salimos de allí para buscar a Arnol pero cuando lo vimos no pudimos dejar de reírnos, estaba boca arriba con dos cachorros de lobos sobre el mientras que otro jugaba con su cola, era tan gracioso que lo dejé allí un rato mientras yo hablaba con las madres de los bebés.
Todas eran mujeres agradables y sanadoras que les gustaba ayudar, me contaban historias de ellas y de sus amores, por un momento me hicieron sentir envidia al escuchar tan lindas cosas, es que aunque no parezca yo quería también un día encontrar a mi pareja o a alguien, ya que había salido muy lastimada de mi última relación, pero bueno eso ya era pasado y el presente y el futuro de esta aldea era hermoso—¡Arnol! Despídete ya tenemos que irnos
Arnol se despidió de los pequeños y sus madres, luego tomé a Nixie y la acomode en mi para subirnos en Arnol.
Cuando llegamos al Castillo ya era de noche y aunque estaba muy cansada no podía dormirme aun.
Caminaba por los pasillos y de nuevo como en la noche anterior vi a Ambar viendo la luna por una gran ventana—Arnol, quiero hablar con Ambar a solas ¿puedes acostar a Nixie? Y esperarme en el cuarto
—Si eso quieres
Arnol se fue con Nixie en la cabeza, así que entre, vi a Susan antes de entrar y la llame
—Susan quiero hablar a solas con Ambar podrías salir
—¡Si! Pero... No la lastimes o ¡te pegare!
—Trato
Entre y cerré la puerta para asegurarme que nadie entrará
—Tenemos que hablar
—¿Pasó algo? —dijo Ambar sin quitar su vista de la ventana
Me acerque a ella para luego tomarle las manos y hacer que me mirara
—Disculpa por lo que pasó temprano, se que te preocupo y bueno... No debí ponerme brava
—Discúlpame también se que estuvo mal y todo, pero Celeste, pase buscándote muchos años, lloraba sola y pedía que estuvieras bien, ahora que te tengo no te perderé por nada en el mundo...
—No me perderás Ambar
—No se que pasó contigo y esa bañera, sólo se que... Te veías tan... No lo se... Pálida, sin vida... Sentía tanto miedo
Ambar no aguantó y se puso a llorar, había sido muy cruel y ella sólo estaba preocupada, yo había tenido una vida maravillosa, con padres maravillosos, pero ella... Ella había crecido sola en un mundo muy diferente al mio, me sentía muy mal por ella así que abrace a Ambar, lo suficientemente para que entendiera que no me iría a ningún lado
—Te amo hermana... —dije
—Te amo hermana
—Oye ahora sonríe hay una bonita luna viéndonos
—La luna nos reunió de nuevo Celeste y se lo agradezco tanto
—Sabes, la luna siempre me pareció hermosa, todos me llamaban la loca de la luna, por que aunque no lo creas amaba hablar de ella
—Lunaris no existiría sin ella
—Oye Ambar, cambiando de tema ¿que pasa con los demonios?
—Que tal si te cuento luego las historias, ahora mejor ve a dormir hermana
—Claro, hermana, descansa
La abrace una vez más para irme, al salir encontré a Susan mirándome con una cara de felicidad, me dio un besito y se fue con Ambar, mientras yo fui a mi cuarto, fue gracioso, cuando llegue me encontré con Nixie cruzada se brazos frente a la puerta y a Arnol ya acostado bostezando
—Ella Esta enojada
—¡Claro que si suavecita! Tengo que dormir contigo
—Lo se, pero deja las rabietas, ven es hora de dormir
La tomé y camine hasta la cama, Arnol me dio un ladito y Nixie se acostó en mi cabeza, ya era hora de dormir y si que me lo merecía
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Buenooo, ¿Que les parecen Cudral y Licaón? Aunque los conocimos poco ahora que lo pienso(sigo queriendo un tigre de mascota)¿AQUIN LE GUSTA ANGEL? Es sexy ;) jajaja
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Lunaris
FantasyCeleste es una chica normal, con una vida tranquila y padres ordinarios, lo único fuera de lugar es aquella rara fascinación por la Luna que sólo está tiene. Sin embargo la vida da muchas vuelta y ni siquiera está chica se podrá imaginar todo lo que...