Desperté por el ruido que venía de afuera, toque toda la cama y no encontré a Arnol, me pare despacio ya que Nixie dormía en mi cabeza aún, me pare fui al baño, la acomode en la bañera y abrí la regadera está vez no quería relajarme sólo quería bañarme rápido para buscar a Arnol, terminé y salí rápido para buscar mi ropa, me puse un pantalón y una blusa marrón, puse a Nixie en mi hombro y salí.
El Castillo contaba con tres pisos, el tercero era especialmente para Ambar y para mi al parecer, mientras que los dos de abajo eran para las clases que había echo Ambar. Para mi sorpresa en el camino vi que Ambar venia con Arnol a un lado—¡Arnol! —dije mientras lo acariciaba
—Me alegra que estés despierta, te presentaré ante el alumnado, también quería decirte si quisieras tomar algunas clases, claro con muchachos de tu edad, sería bueno que te llevarás con más seres mágicos, tampoco te obligare mucho a esto puedes entrar y salir cuanto quieras
—Ambar —llamó el lobo que se había ido cuando había llegado al Reino de Licaón
El parecía sorprendido y sonrojado, no creo que haya esperado verme allí con mi hermana y bueno sin mencionar a Ambar que estaba roja ¿será que le gustaba el lobo? O algo más, bueno en fin, sólo se que no pude evitar reírme con su cara, pero claro como toda buena hermana mayor se la cobró golpeándome en el hombro y echándome malos ojos
—Te gusta el lobo ¿no?
Le susurre para que el no pudiera escucharnos
—¡Tu cállate! tienes que presentarte, pero... ¿Podrías hacerlo sola, prometo ir pronto, hazme este favor ¿si? Arnol te acompañará
—No te preocupes, te dejare sola con tu lobito
Me volvió a empujar y me fui con Arnol, cuando le pase por un lado vi a Susan sobre el y me causó más risa, pero ya era momento de seriedad tenía que bajar y presentarme con más personas
—¿A donde vamos Arnol?
—Los alumnos están en el patio del Castillo, allí hablaras y los conocerás, me adelantare para arreglar unas cosas, Nixie sabe el camino
—Claro, ve
Vi a Arnol correr, y desaparecer de mi vista muy rápido, yo en cambio caminaba normal y tranquila, no tenía ninguna prisa, estaba distraída y pensando en que tenía que decir o hacer que no me di cuenta cuando tropecé con alguien
—¡Yo! Lo siento de verdad, no venía viendo, bueno si, sólo que estaba distraída y eso
—Eres tonta, casi nos caemos por las escaleras, bueno, ya da igual ¿Estás bien?
Primero me llamaba "Tonta" y luego preguntaba si estaba bien, a el era al que teníamos que preguntarle si estaba bien, aunque no se, no podía enojarme con alguien tan lindo tenía cabello marrón y unos muy bonitos ojos azules
—Si estoy bien, de verdad disculpa, soy Celeste un placer
—Ayperos.
—¿De verdad ese es tu nombre?
—Igual a uno de los demonios más poderosos, así que cuidado conmigo preciosa
—¿Y no tienes un lugar a donde ir?
—Tengo que ir al patio, pero me da igual lo que hagan o a a quien enseñen
—También tengo que ir oye y ¿si vamos juntos?
—Me da igual
Camine con Ayperos hasta el patio, había mucha gente, tanta que no me había dado cuenta cuando Ayperos se había alejado, sólo se que Arnol me llamó y me subió en una pequeña "tarima" para hablar
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Lunaris
FantasyCeleste es una chica normal, con una vida tranquila y padres ordinarios, lo único fuera de lugar es aquella rara fascinación por la Luna que sólo está tiene. Sin embargo la vida da muchas vuelta y ni siquiera está chica se podrá imaginar todo lo que...