Londres (Rita x Ryuunosuke fanfic)

Capítulo 21: "Con su hermana"

El chico se dirigió a la habitación que le tenían destinada, mientras su madre se dedicaba a preparar el almuerzo y el novio de su madre se encontraba de compras. Realmente parecían haberlo querido recibir bien hasta ese momento, e incluso parecían tener preparada alguna especie de celebración.

Mientras ordenaba sus pertenencias alrededor de la habitación, escuchó la puerta abrirse. Supuso que quizás se trataba de su madre, y miró en dirección a la entrada, pero se sorprendió al notar que su vista tuvo que bajar algunos centímetros para contemplar a quien había ingresado... se trataba de la pequeña Aida.

Ryuunosuke exhaló un suspiro de decepción al imaginar lo complicado que sería tenerla allí, y pensó en sacarla de la habitación. No le agradaba la idea de tener hermanos, y menos una hermana... detestaba a las chicas, y aún si eran niñas pequeñas le parecían problemáticas. Sin embargo, prefirió observar qué hacía, creyendo que decidiría marcharse sola cuando se aburriera. Pero se sorprendió al notar que la pequeña caminó directamente hasta él, avanzando a paso lento y le aproximó un juguete de un robot hecho de piezas plásticas. El chico lo recibió sin saber qué otra cosa hacer, y la miró sin entender por qué se lo había entregado. Aida simplemente sonrió ampliamente, en forma risueña y salió caminando de la habitación.

El programador contempló el robot durante un momento y lo dejó sobre el escritorio para continuar ordenando la distribución de sus pertenencias en el cuarto. Pero no pasó demasiado, para sentir que algo jalaba su pantalón suavemente. Al alzar la vista vio a Aida una vez más, sonriéndole. La pequeña esta vez le pasó un peluche de un león. Ryuunosuke lo tomó e hizo una mueca de incomodidad... ¿cuántas cosas más le pasaría? El chico no lo pensó dos veces e intentó devolverle el león, pero la pequeña lo dejó caer al suelo y se alejó nuevamente por la puerta para regresar en dos minutos con una muñeca esta vez.

Ryuunosuke en esta ocasión decidió ignorarla, pensando que de esa forma se aburriría, y encendió su laptop para comenzar a jugar alguna cosa mientras tanto. Sin embargo, Aida no se rindió, y comenzó a jalar de su pantalón una vez más. Pero una palabra, hizo que Ryuunosuke interrumpiera su actividad.

— ¡Toma! — exclamó la pequeña poniendo sobre las piernas del chico a la muñeca con cierta dificultad, estirando su brazo. Ryuunosuke la miró sorprendido.

— ¿Que lo tome? — le preguntó observándola. Apenas ahora había notado que la niña ya empleaba un poco el lenguaje.

— Sí — respondió claramente la niña. Ryuunosuke tomó a la muñeca con sus manos y la dejó sobre el escritorio.

— Estoy ocupado — le mencionó el chico, esperando que de ese modo se marchara.

Pero en lugar de conseguir que la niña se marchara, ésta se aproximó más a él e intentó alzar la vista para observar el monitor de la laptop. Aunque por desdicha, no alcanzaba a distinguir bien lo que se visualizaba desde esa altura.

— ¿Juego? — preguntó la niña apuntando al monitor. Ryuunosuke volvió a impresionarse.

— S-sí... es un juego — respondió el chico.

En ese momento, se escuchó la voz de su madre llamándolos a comer.

— Ven — dijo la pequeña con una sonrisa.

Aida comenzó a caminar tomando a Ryuunosuke de su dedo índice, para jalarlo mientras se dirigían afuera de la habitación. El chico, sin atreverse a interrumpir la acción de Aida caminó junto a ella, un poco inclinado debido a cómo ésta caminaba sujetando su mano derecha.