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Llegué algo tarde al gimnasio pero al ver mi cara de pánico, Yachi me tranquilizó diciendo que aún no comenzaba el partido, ellos jugaban un poco más tarde. Mientras entraban en calor Karasuno y el equipo contrario no pude evitar fruncir el ceño al ver los rostros del equipo contrario.

El tan nombrado entrenador Ukai apareció a unos minutos de comenzar el partido. Estaba tranquilo y debía decir que el equipo también lo estaba. Por sorteo Karasuno hizo el primer saque. Asahi anotó un punto directo como si fuese planeado. Nishinoya casi pasaba desapercibido pues era silencioso. Desde la última vez que lo había visto jugar, no solo habían mejorado drásticamente sino que la confianza que se veía entre ellos era diferente. Yuu cambiaba muchísimo en cuanto voleibol se trataba.

Todavía no me acostumbraba a ver el ataque rápido de Hinata y Kageyama pero aún seguía asustándome la velocidad de Nishinoya al prever un remate. Con facilidad ganaron el primer set, aunque el otro equipo parecía dejarse vencer. En cambio en segundo set presentaron un poco más de pelea.

Pobre Yachi, aún creía que Hinata era heterosexual, si tan solo se diese cuenta de cómo lo miraba Kageyama, tal vez se habría dado cuenta rápidamente que era inútil. Ganaron en un abrir y cerrar de ojos. Me alegré de haber venido, tenía esperanza en que vencieran a Oikawa ampliamente. Esperaba ese partido, deseaba ese partido. Sin embargo había un obstáculo de dos metros frente a los cuervos.

Los remates del gigante pasaban por encima de los bloqueadores y los primeros puntos fueron algo difíciles para Hinata. A mí alrededor todos miraban al gigante con admiración y sentían pena por Hinata. Lo entendía pero Nishinoya rápidamente dedujo su forma de ataque. Para sorpresa de todos, lo recepcionó sin problemas.

Solté una risita al ver el ataque súper rápido de Hinata. Era inevitable. Era como si le demostrara a todos los que le tenían pena, como tranquilamente podía superarlo. Muchas veces al ver como jugaban, daban ganas de unirme al club de vóleibol.

La incertidumbre del "qué harán" nunca me decepcionaba. Cuando menos te lo esperas, ellos hacen un movimiento nuevo ya sea intencional o no. El silbato sonó dando finalizado el segundo set. Ganaron gracias a esa volubilidad.

Al salir me encontré con el equipo y los felicité con una sonrisa.

―No puedo esperar el partido con Aoba Johsai. ―Dije sin poder contenerme. Noya rio revolviéndome el cabello.

―Primero tenemos que vencer a otra escuela. ―Comentó Daichi con tranquilidad.

― ¿Qué demonios miras, imbécil? ― Era Tanaka haciendo una de sus muecas, Yuu se le unió no mucho después. Daichi les llamó la atención mientras que a parecer el equipo contra el que se enfrentarían terminaba de pasar.

Al otro día llegué detrás de Kageyama a Aoba Johsai. Intentaba pasar desapercibido y no tuvo problemas al encontrar el gimnasio de volley. Aunque él realmente daba miedo, solo era porque no lo conocías. Sabía de sobra que le costaba expresarse con normalidad y el aura de terror solo aparecía cuando del volley se trataba.

Al salir a tomar el almuerzo, como le había prometido a Kiyoko y Yuu, escuché rumor entre las chicas que había aparecido alguien aterrador en el campus. Supuse que hablaban de Kageyama por lo que decidí no seguir con el tema.

El clima cada vez era más estable pero fresco. Noya me había prohibido esperarlo fuera, por lo que me unía a Kiyoko y Yachi en cuanto llegaba de Aoba. Al parecer los equipos con los que estuvieron entrenando en Tokio, vinieron a Miyagi unos días. Hinata hablaba bastante con un chico que no parecía de ánimos o simplemente era callado. Alguien llamado Bokuto reía sin razón y algo en él me recordaba a Yuu. Noya no me presentó y yo pasaba desapercibida gracias a eso. Le agradecí que no lo hiciera, pues sentía que molestaba.

No Me Dejes CaerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora