Narra Vivían.
No podía dejar de reír mientras áquel chico de ojos verdes me quería atacar, y yo lo esquivaba con mucha facilidad. Era como si mi cuerpo, no fuera mío, como si algo estuviera controlando cada uno de mis movimientos, y me divertía jugar con aquel chico lleno de furia, por alguna razón no me preocupaba, pero el juego termino cuando él me dijo:
—Estúpida zorra, morirás desangrandote poco a poco, ¡Te odio! —era cierto podía sentir su odio y los deseos de matarme, incluso me hubiera reído si sus palabras no me hubieran hecho enojar.
—¡¿Acabas de llamarme zorra?! — le miro enojada, mientras esquivo cada uno de sus ataques.
—Zorra, mujerzuela, ¿cuál es la diferencia? ¡pequeña puta, pagarás por haber matado a mi compañera! —se ríe sin ganas, y yo estoy cada vez mas enfurecida.
—No volverás a insultarme porque desgarrare tu garganta lentamente mientras bebo de ti, ¡sentirás haberme hablado así! —lo tomo de su cuello en uno de sus fallidos intentos de atacarme— ¡¿Ahora qué decías?!
—¡Te... mataré! —trata de gritarme pero es apenas un murmullo lo que sale de su boca ya que mi agarre es muy fuerte.
—No debiste haberte cruzado en mi camino, ¡no debieron! —grito fuerte, mirando a los dos chicos lobos y al otro imbécil de ojos café, que me mira con odio, y con las manos cerradas en puños— ¡¿yo no les había hecho nada, porqué lo hicieron?! —vuelvo mi vista al estúpido que tengo agarrado del cuello— ¡ahora pagarás! —digo sonriendo y me acerco a su garganta clavando mis colmillos en su cuello, y veo por el rabillo de mi ojo derecho que el chico de ojos café viene hacia mí con muy malas intensiones; lo siento por él, porque hoy morirá también. Me alejo con el imbécil agarrado mientras bebo su sangre, dulce cielo esto es algo delicioso, y como decía la tía Edmira cuando bebía el jugo de fresas, que era su favorito ¡néctar de los dioses!
Alejo mi boca de su cuello desgarran dolo un poco por la brusquedad con la que lo hago, lo que hace que sangre sin parar, lo azotó contra el suelo con mi mano derecha, y con mi mano desocupada desgarro su pecho arrancándole el corazón. Es algo extraño pero como dije no soy yo quien hace todo esto; es alguien que tiene el poder de mi cuerpo, alguien que desea matarlos por haberme insultado después de todo lo que pasé, y que disfruta haciéndolo. Alguien que necesita desahogarse.Suelto el agarre de su cuerpo sosteniendo su corazón en mi mano, me levanto y miro al chico de ojos café quien está estático mirándome.
— ¿Qué eres? —puedo saborear su miedo.
— ¡¿Eso es algo que también quisiera saber?! — lo miro y clavo mis uñas en el corazón el cual todavía sostengo, lo miro y veo la sangre correr alrededor de mi mano cayendo al suelo; recorriendo mi brazo, empapando el poleron— ahora, si no quieren que les pase lo mismo que a ellos.—señalo con la mirada los cuerpos inertes— ¡Me dejarán en paz!
— Por ahora, pero esto no termina aquí, acabas de matar a mi hermano y su compañera, ¡nos volveremos a ver! —promete, entonces desaparece y veo a los chicos lobos observándome.
— ¿Qué ahí de ustedes, no huirán, o intentarán atacarme? —preguntó a la defensiva.
— No, ¿solo quisiera saber que edad tienes? —una pregunta algo estúpida a mi parecer, lo miro sorprendida— ¿de verdad no sabes lo que eres?
— Y porqué te importaría, ¡si en un principio esto fue culpa de ustedes por detenerme y querer matarme acusándome de asesina! —les recuerdo enojada, aunque en ellos no veo, ni siento nada amenazador ahora.
— Mira en serio lo lamento, realmente pensamos que eras tú la asesina, ya que era una mujer vampira.
— ¡¿Vampira?¡ ¿Yo soy una vampira... —todo comienza a darme vuelta, siento los latidos de mi corazón bombear acelerados, y comienzo a caer poco a poco, la oscuridad me envuelve en sus brazos.
《Seguro ahora por estúpida me matan》 eso es lo último que pienso antes caer inconsciente, quedando indefensa y en sus fauces, garras o manos.
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"El Amor También Es Para Mí" Vivían Libro 1 [Borrador]
VampireLa noche es hermosa sea lluviosa o no, la noche trae consigo más que oscuridad, pero solo los ciegos y sordos, que ven y oyen se niegan a creer. Que la noche también atrae y acoge a seres sobrenaturales que los humanos solo han visto en películas. U...