Capítulo 40: No Mereces Tal Recompensa...

1K 85 8
                                    

~Vivían~

Mis manos comienzan a temblar cuando él toca mi brazo, acercándose para posar así sus labios muy cerca de mi oído derecho. Entonces todos los recuerdos de lo que me hizo vivir pasan como una película de terror por mi cabeza otra vez, cierro mis puños con fuerza, me siento indefensa otra vez.

Una lágrima baja por mi mejilla, ¡Maldito bastard*! No pude defenderme en ese entonces, era tan débil estando a su merced.

Cierro los ojos odiando a muerte al hombre a mi lado. Desee este momento, lo busque para enfrentarlo, y ahora que lo tengo aquí me siento... No, no, esto no se va a volver a repetir.

Mis uñas comienzan a crecer, abro mis puños, un escalofríos y una extraña sensación de poder me recorre de pies a cabeza. Mi lado sobrenatural esta apareciendo, puedo sentir mis colmillos salir lentamente, mi sed de sangre, mis ansias por cumplir la promesa que hice, de hacerlo sufrir, rogar. Con mis ojos aún cerrados, puedo sentir su asqueroso aliento cerca de mi mejilla, abro mis ojos de golpe, su mirada choca con la mía, y su confianza en sí mismo cambia.
Comienza a retroceder y una sonrisa se forma en mis labios, la confianza en mí misma ha vuelto de aquel oscuro lugar donde él la había querido encerrar al intimidarme con su presencia.

Comienzo a reír como una desquiciada, lo miro mientras lo veo todavía retrocer, y ahora soy yo quien se acerca, podría matarlo rasgando su garganta, tal vez arrancando su corazón, pero no, eso sería muy fácil para él; él no merece una muerte rápida, el merece algo mucho peor.

- ¿Qué... Qué eres, no eres igual a los otros, tus ojos no son rojos ni negros, tu cabello...

- Jajaja ¡¿Qué?! ¿Me temes ahora tío? ¡Oh! Lo siento por eso... -comienzo a acecharlo, desapareciendo y luego apareciendo delante, y detrás de él, su mirada de pánico se me hace cada vez mas divertida, y su miedo es palpable ¡oh sí! Me divertire con él, mi lado primitivo quiere jugar por un buen rato- ¿quieres saber que soy tío?

- Nno...-estoy tan excitada al tenerlo así, a mi merced. El deseo de sangre se hace cada vez más fuerte, deseo destrozarlo.

- ¡Mírame a los ojos infeliz! -él me evitaba aterrorizado- esta bien, jugaremos a las preguntas, las reglas son, ¡solo yo preguntaré! ¿No es entretenido? -él mira al suelo- ¡Responde y mírame! -gruño.

- Sssi...

- ¿Cuánto llevas aquí? -lo rodeo, mientras él mira al suelo y tiembla.

- Casssi... Ocho aaañosss, él mmme decía... -dice y yo con mi uña, comienzo poco a poco, a rasgar su camisa, hasta que queda en puros pantalones, ahora sí, expuesto y con miedo, tal cual lo estuve yo en el pasado.

- ¿Él?

- ¡El chupasangre! -grita con desesperación, puedo sentir el latir acelerado de su podrido corazón.

- ¿Chupasangre? -entonces no pregunto nada más sobre eso, ya sé a quién se refiere. Lo agarro del cuello clavando mis uñas pero no tan profundamente- tú, maldito, que violaste a una niña inocente, y la utilizaste a tu antojo, ¡mereces la muerte!

- ¡Matame, te lo suplicó! Estoy cansado de ser azotado, maltratado...

- ¡¿Súplicas?! Ah, no, no te mataré, por lo menos no todavía. No mereces tal recompensa. -lo suelto tirándolo al piso.

- Por favor... -comienza patéticamente a suplicar.

- ¿Por favor? ¡¿Tú me estás pidiendo por favor?! ¡¿Cuántas veces te pedí lo mismo en el pasado?!

- ¡Fue tú culpa! ¡Me... Me provocabas!

- ¡Era una niña!

- ¡Eras una mujer!

"El Amor También Es Para Mí" Vivían Libro 1  [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora